[APH] [AU] Diario De Un Fundashi Periodista. (AsaKiku)

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Diario:

Hoy no quería ir a clases.

-considerando el hecho de mi vergonzosa e inexplicable actitud de ayer, tratando de enorgullecer a papá aunque él no lo sepa-.

Llegué a clases puntualmente, y me ofrecieron ayuda para la clase de químicas, que he reprobado.

Es que he descuidado el ramo, por el simple hecho de andar con Arthur-san evitándome y yo preguntándome que hice mal.

Digo, no lo besé, apenas y alcancé a besarle la mejilla.

*Esta frase fue tachada*

He estado evitándole en los recesos, como tenemos cuatro, Arthur-san ha dramatizado.

-¿Y cómo no? Sí le corto las llamadas "Por error"-.

Pero hoy, la señorita Elizabeth me dijo que debía ser más honesto, y que qué diablos me pasa con Arthur-san, que yo no suelo ignorarlo, y que qué pasaría al final con Madeline-san, que al parecer, ahora me correspondía.

Debía tomar una decisión.

(...)

Volví, Arthur-san estaba llamando. Corté de nuevo.

No deja de insistir.

Es que hoy, la señorita Madeline se declaró... ¿¡No ven que hay más seres humanos!? Yo no soy precisamente 'Sociable' como para gustarle a todos los seres humanos.

Y como no se me ocurrió nada mejor, fui a esconderme tras Arthur-san, que me miró con el ceño fruncido pero sorprendido.

Ugh, odio que haga eso, es que se sonroja por cosas tan mínimas... que me da algo en el pecho.

Uh, pero quiero ignorar el piquete por un rato.

Me preguntó por qué me negué a la declaración, y respondí que ya no sentía nada por Madeline-san, ¿Cómo pasó eso de pronto?.

Es que creo que los humanos que no tenemos oportunidades, recogen sus viejos sentimientos, aunque hayan renunciado a ellos.

*Párrafo tachado*

Además de que no deja de llamar para hablar el accidente que tuvimos en el patio -del cual huyó él-.

Iba con mis libros de matemáticas, cuando sentí que tomaron mi brazo y bruscamente, me aprisionaban contra la pared.

Sentí un gran aroma a perfume masculino, pero la respiración pesada de quien me salvó no me dejaba concentrar.

¡Me estaba tocando!.

¡Otro humano me estaba tocando!.

Resultó que Arthur-san me había salvado, ya que iba a llegarme un balón de fútbol.

Oh, además, Anneliese-san volverá a clases.

Punzadas en el pecho, ya que Arthur-san me dijo hace seis meses, que aún no superaba su partida.