Mala Jane.

Cap 9

Liz: -Y yo a tu padre- sonrió.
Jane: -¡Qué!- me levanté.
Liz: -Sólo estoy bromeando ¿No te gusta que usen tus estrategias en tu contra?- me miró desafiante.
Jane: -No sabe con quien se mete- me agaché para quedar a su nivel y mirarla a los ojos.
Liz: -Lo sé muy bien- mantuvo su mirada.
Jane: -No me rete. Por que a diferencia suya...yo vivo con- mordí mi labio inferior-...Harry- susurré.
Liz: -¡Harry!- lo llamó, le iba a decir. A los segundos Harry llegó.
Harry: -¿Qué pasa?- nos miró a ambas.
Liz: -¿Te gusta Jane?- ¿Que si yo qué? ¿Qué le pasa a esta mujer? Él me miró y sonrió, mis músculos se tensaron increíblemente.
Harry: -Me agrada- me miraba directo a los ojos.
Liz: -¿La ves como mujer?- Maldita vieja, aunque la verdad si quería saber la respuesta, aunque dudo él fuera honesto si la respuesta de su mente fuese 'si'.
Harry: -Como niña- ¡¿Niña?! ¿Por qué mejor no me cortaron la cabeza en este momento?
Jane: -Es lo que soy- lo rodeé mirándolo de pies a cabeza- pero aquí su hermana insiste que usted me ve de otra forma.
Harry: -¿Liz, es verdad?
Liz: -Tenía la ligera sospecha- la miré fulminante. Ella sólo me sonrió malévola.
Jane: -¿Señor, puede venir conmigo a mi habitación un segundo?- Liz alzó una ceja.
Harry: -C-claro- subimos- ¿Qué sucede?
Jane: -¿Puede sentarse?- me senté en la cama. Él lo hizo tambien.
Harry: -Dime ¿Qué pasa? 
Jane: -Verá...yo no estoy muy acostumbrada a portarme bien que digamos- me subí a la cama- y...sé que aquí hay algunas reglas- me posé detrás de él- ¿Debo seguir alguna, no?- dije sobre su hombro.
Harry: -Te las diría si me dejaras verte el rostro. 
Jane: -Pues, voltéese- él se volteó nos miramos fijamente, estábamos a pocos centímetros de distancia. No pude evitar ver sus carnosos y juraría que deliciosos labios rojos que me tentaban a devorarlos sin recordar quien era o qué edad tenía. Subí mi mirada hacia sus enormes y profundos ojos verdes; muy parecidos a los míos, pero los suyos eran más oscuros y cristalinos.
Harry: -Creo que me dará una tortícolis si quedo así- susurró, sentí su aliento chocando con mis labios.
Jane: -Tal vez necesita relajarse- dije sin apartarme ni un segundo, pero noté que él tampoco lo hacía.
Harry: -¿Me está mandando a dormir?- me miró a los ojos.
Jane: -Me le estoy ofreciendo- Sí, dije eso con doble sentido, reí por dentro pero permanecía seria físicamente.
Harry: -¿A qué?- dio una media sonrisa.
Jane: -Permítame- delicé su chaqueta por sus brazos y la lancé sobre la cama, él quedaba en su camiseta blanca. Puse mis manos sobre sus hombros y comencé a presionarlos suave pero firme a la vez; los soltaba y los presionaba con ritmo, dándole un masaje, aunque ganas no me faltaban de arrancarle la camisa también.
Harry: -Jane- quiso detenerme. Silbé con mis labios para expresarle que guardara silencio.
Jane: -Cierre los ojos- susurré en su oído, él cerró sus ojos. Yo seguí masajéandolo, pero acerque mi rostro a su cabello para olerlo, de repente cerré mis ojos y sentí la presión del silencio en mis oídos, no esuchaba nada más que su respiración relajada. Abrí mis ojos y me asomé a la par de su cabeza y me derretí al verlo https://www.facebook.com/photo.php?fbid=534322243253599&set=a.528401120512378.125667.482095688476255&type=1&theaterautomáticamente y sin pensarlo me dirige a su boca contemplándola atentamente sin detener mis manos, me incliné lo suficiente como para rozar mis labios en los suyos antes de que él abriera sus ojos y se apartara brúscamente.
Harry: -¡¡Jane!!- se levantó y me miró boquiabierto. Yo estaba igual de sorprendida, si quisiese seducirlo me le hubiera desnudado ¿Pero un roce de labios? ¿Cuándo he necesitado yo eso?- ¿Por qué hiciste eso?- No respondí, pues yo también estaba tratando de decifrar la respuesta a esa pregunta en lo más profundo de mi retorcido cerebro. Harry abrió la puerta y salió.
¿Qué te pasa, Jane? ¿Por qué necesitabas el beso de él? Lo del masaje si fue una técnica pero...¿Por qué quería besarlo? O más bien, sentir sus labios cerca aunque estos nisiquiera se hayan tocado por más de tres segundos. Me dejé caer en el acolchado y miré hacia el techo pregúntandome si era Jane la de hace unos segundos.
Me volteé y me acurruqué en la cama, miré su chaqueta tendida, la tomé y la abracé ¡Jane! ¿Qué estás haciendo? ¡No lo sé y no me importa! Peleaba conmigo misma en mis adentros. Tomé la chaqueta y la olí mientras la abrazaba, me perdí en su aroma. Recordé ese momento en la disco cuando lo miré por primera vez entre aquellas luces intermitentes que lo hacían parecer irreal. Me quedé dormida.....
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Cuando desperté tenía la chaqueta puesta sobre mí, suspiré y me levanté, ya no me sentía igual. Entré al baño y me deshice de la vejiga apunto de estallar, me lavé los dientes y bajé a la cocina.
Liz: -¿Cómo amaneciste?- me sirvió una taza de cereal.
Jane: -Al parecer en mi cama y con ropa.
Liz: -¿Qué tiene eso de malo?
Jane: -Que debía amanecer en cama de Harry y sin ropa- me burlé de ella. Si volvía a decir algo sobre mi padre le lanzaba la taza de cereal en la cara.
Liz: -Yo amanecí succionando el tubo de Harry Styles- por inercia le lancé la taza de cereal a la cara, normalmente no hago lo que pienso porque todo lo hago sin pensar.
Jane: -Mira, Liz. No sé que clase de mujerzuela seas, no sé si te vendas por diez centavos o seas zorra gratis pero si vuelves a decir algo sobre mi padre voy a tener meter tu cabeza en agua hirviendo hasta que tu cara se deforme por completo ¿Comprendes?- Ella tomó una servilleta y se limpió.
Liz: -Cada vez que tú bromees sobre mi hermano yo lo haré sobre tu padre- me dijo amenazante.
Jane: -Anoche le di un buen masaje en mi habitación a Harry, aparte que lo besé.
Liz: -Y yo...-la interrumpí.
Jane: -No, no. Dijiste que sólo devolverías la broma si lo que yo decía era broma.
Liz: -Tú no hiciste eso con Harry.
Jane: -¿Quieres apostar?
Liz: -No caeré en tus juegos, niña- me miraba fulminante.
Harry: -Buenos...dias- apareció y se sentó.
Jane: -¿Le gustó el masaje, señor?- me senté en el desayunador frente a él.
Harry: -Sí, Jane, fue agradable- dijo seco. Liz dejó caer un vaso en el lavabo haciendo ruido, yo no evité reír.
Jane: -¿Y qué haremos hoy?- dije entusiasmada.
Liz: -Iremos a la universidad, no hay alumnos aún pero debemos trabajar.
Jane: -¿Y yo qué haré ahí?
Harry: -No podemos dejarte sola aquí.
Jane: -Buen punto- dije con la boca llena.
Subí a la habitación y me alisté para ir con Harry y Liz a la universidad, no podía dejar de pensar en lo que sentí al rozar sus labios, Jane Styles había bajado de categoría maléfica la noche anterior. Bajé las escaleras y Liz me esperaba.
Liz: -¿Nos vamos ya?
Jane: -Claro, Harry ya viene, sólo está quitándose el condón.
Liz: -Harry ya se fue a la universidad, por desgracia tendremos un viaje las dos solas- rodó sus ojos.
Subimos al auto y nos dirigimos a Mánchester.
Jane: -So tell me Harry if every time we fa-ja-mos, you feel this kinda orgasmo, Harry pide máááás, mááás...Quiero fajarte- tarareaba.
Liz: -¿Qué estás cantando?
Jane: -Se llama Kiss You, pero en versión Faje.
Liz: -Eres una depravada.
Jane: -Me siento tan sexy cuando me dicen eso- reí.
Liz: -¿Enserio te gusta mi hermano?
Jane: -Na na na na na na na na- tarareaba la canción para evitar responder- Mucho más faje (And let me kiss you)
Liz: -¿Dónde aprendiste esa palabra tan rara?- dijo acelerando.
Jane: -De la mujer que amo.
Liz: -¿Tu madre?
Jane: -No, una mujer con la que acosté hace algunos meses- dije sarcástica- ¡Obvio que mi madre! No soy bisexual, bueno no aún. 
Liz: -Jane ¿Tú te proteges? Veo que tomas el sexo muy a la ligera.
Jane: -No. De hecho tengo sífilis, herpes, hepatitis, gonorrea, candidiásis y un poquito de sida pero no mucha.
Liz: -Hablar contigo es una pérdida de tiempo.
Jane: -Liz ¿Cuántos polvos te has echado en el año?- ella abrió su boca y me miró indignada.
Liz: -Soy virgen- lancé una carcajada exagerada, ruidosa y obviamente fingida.
Jane: -Bien, tú virgen es tan cierto como que el alcoholímetro salga normal en mí un sábado por la noche- seguí riendo.
Liz: -Aunque no lo creas, estoy esperando a la persona indicada.
Jane: -Pues se te va a oxidar si no lo usas, si quieres te paso una escobilla más tarde para que te limpies las telarañas.
Liz: -No seas tan grosera...
Jane: -Oye, hoy amaneciste de humor elevado, estás diciendo buenos chistes.
Liz: -¿Y tú has tenido relaciones?