DIECIOCHO

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- Hey, creí que ya no vendrías.

- Hola Bartender.

- Pide lo que quieras, la casa invita.

- ¿Lo que quiero?

Él asintió.

- Ahora mismo quiero un boleto a cualquier parte del mundo ¿Podría la casa invitar eso?

- La manera de que la casa invite eso, es viajar juntos.

Ella sonrió, extrañaba las bromas de Matt y él añoraba con fervor volver a verla.

- Por ahora, dame una cerveza.

Miró su vaso cargado de cerveza, y se perdió en ella. Su mente la llevo a lugares que no quería, lleno de recuerdos dolorosos. Sintió una mano acariciar su mejilla, limpiando una lágrima traicionera.

- No llores, hermosa.
- El amor... ese amor que un día me llevó a las nubes, me dejo caer de la forma más dolorosa. Y así terminé en tu bar.

Él agradeció tanto que ella le contará, pero no quería verla llorar. No podía resistirlo.

- Si quieres me lo cuentas otro día. Lo que has dicho por hoy, es suficiente.

Hola Bartender.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora