VEINTIOCHO.

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— ¿Cuándo me contarás?

— ¿El qué?

— Oh, vamos. Yo ya te he contado la ridiculeces que he hecho. Es tu turno bonita.

Ella bebió de su cerveza para tener valor y poder hablar.

— No te rías.

— Cuando alguién dice eso, significa que el otro si se va a reír.

— Entonces, no te lo diré.

— Oye, eso no sería justo.

— La vida no es justa.

— Touché.

— Adiós, Bartender.

— Aquí esperaré hasta que me lo cuentes.

Hola Bartender.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora