Kung fu Tigresa

¡Choque de dimensiones!

En China más específico en un bar, un cerdo de color negro con colmillos cortos estaba caminando sin hacerle nada a nadie en eso Ras y Razas aparecieron frente a él, los dos leonés sonrieron y sujetaron al cerdo de los colmillos y se lo llevaron, los dos llevaron al cerdo a un callejón y lo lanzaron al fondo.

Oigan esperen no tengo nada por favor no me lastimen -dijo el cerdo asustado-

Relájate Ke Pa -dijo Ras sonriendo y el cerdo se sorprendió-

¿Cómo sabes ese nombre? -dijo el cerdo confundido- ¿cómo sabes..

Como te llamas? -dijo Ras sonriendo- sencillo yo te conozco y también sé cómo liberarte de tu forma de cerdo -el cerdo sonrio interesado- pero solo te libraré si tú me dices algo que me interesa y lo haces

¿Qué cosa quieres que haga? -dijo el cerdo nervioso-

Sencillo cuando liberemos tu verdadera forma queremos que nos lleves al mundo de los espíritus y lo abras del otro extremo -dijo Razas sería-

El mundo de los espíritus -dijo el cerdo sorprendido- requiere de mucha energía ir hasta ese lugar pero también yo tengo otra ideas

¿Qué liberar a tus hermanos demoniacos? -dijo Ras serio- no seas Estupido Ke Pa, esas cosas morirán antes de que puedas sacarlas de su sello, es más ni siquiera tendrás el poder para liberar el sello -el cerdo quedo callado- escuchame la única forma en que podamos ganarle a los guardianes más Poderosos es con un ejército y si me ayudas a sacar al Orochi de su mundo tendremos a China no a todo el mundo bajo nuestros pies y gobierno -el cerdo sonrio- pero eso sí traicioname y morirás tengo el poder necesario para eso -el cerdo asintio- bien tendremos el poder del Orochi y de un ejército de demonios -los ojos de Ras y de Razas brillaron de un color rojo, mientras tanto en el palacio de Jade todos estaban entrenando tranquilos, Panda estaba meditando mientras Ti y Hinata estaban sentadas a su lado meditando de la misma forma, Tigresa estaba sentada en una silla tallando su vientre tranquila, su vientre había crecido un poco estaba sonriendo y esperando a que su bebe comenzará a moverse algún día, Po estaba golpeando un saco de boxeo de forma tranquila, estaba sudando un poco, Izanamy estaba sujetado de baños de una barra de metal sostenida por dos soportes, estaba flexionando los brazos, no estaba usando su camisa y en la cintura tenía todas unas cadenas con un pesa muy grande de metal al final, Iza estaba frente a él sonriendo sonrojada, los dos guardianes estaban haciendo ejercicio pero Byakun no estaba por ningún lado-

¡Hay Byakun más duro! -se escucho el grito de Bianca y todos se quedaron sorprendidos helados donde estaban- ¡No aflojes ahora! ¡Más duro, con fuerza, con fuerza, Si más rápido! -por alguna razón todos se sonrojaron pensando mal, pero en eso apareció Byakun corriendo empuñando una carreta y detrás de él estaba Bianca sentada en la carrera con un cono en la boca- ¡Si más rápido! ¡Máximo esfuerzo!

Ya no puedo -dijo Byakun viniendo de dolor y sudando bastante, solo usaba su pantalón-

¡Estás aguadito! -Bianca grito divertida, los demás se rieron un poco- ¡termina la rutina y te compenso toda la noche, con un postrecito y muchísima acción! -Byakun sonrio y comenzó a correr empujando la carreta con más fuerza-

Me dan pena esos dos, un maestro debe hacer ejercicio sin motivación sucia y con solo su deber por delante -dijo Panda serio, Ti alzo una ceja sonriendo y se acercó para darle un beso en la mejilla, pasó por su cabeza hasta su oreja y le dio un leve mordisco, Panda sonrio un poco de forma nerviosa y sonrojado- Ti por favor...no es...-Ti le susurró algo al oído y Panda abrió los ojos sorprendido- ¿ahora? -Ti asintio dandole una mirada sensual y calmada, Panda la cargo en sus brazos y se levanto- ¡póngase a gritar o a entrenar nos vemos más tarde! -a panda se fue corriendo mientras Ti se reía, todos se quedaron congelados y sorprendidos-