Ciego, sin recuerdos, atado a ti

Capítulo 3: Lo que ocurrió con él

Capítulo 3: Lo que ocurrió con él

Luego de que la Reina Seelie se retirara, Sebastián regreso a la sala y se quedó parado junto al sillón donde yacía Alec inconsciente. Sebastián se inclinó, agarrando a Alec y levantándolo estilo princesa lo llevo a su habitación, donde lo acostó en la cama y se fue.

Sebastián salió de la habitación y llamo a Amatis, quien enseguida apareció.

-¿Me llamo mi señor Morgenster? –Pregunto

-Tenemos que irnos, que Andrew Blackthorne y Mathew Allgood cuiden a Alec. –Ordeno Sebastián-También avisa a todos que deben llamarlo, "señorito Alec" y que lo traten amablemente, no quiero que se sienta incomodo.-

-Sí, mi señor.-Asintió Amatis, antes de irse.

~

En Nueva York, todos se habían reunido en el Instituto luego de una búsqueda exhaustiva que no llego a ningún lado. Ahora, Robert y Maryse estaban preocupados, Jace e Isabel no sabían que pensar, y los demás estaban tratando de analizar en qué lugares aún no habían pasado.

-Hemos buscado en toda la ciudad y no hemos encontrado a Alec en ningún lado-Dijo exaltado Robert.

-Yo aún no consigo rastrearlo-Admitió frustrado Magnus.

-No lo entiendo, ¿Por qué Alec desaparecería sin avisar a nadie? ¿No les parece un poco extraño?-Pregunto Jace asiéndose notar por los presentes-Alec es la persona más responsable que conozco, y aún si tuviera el corazón roto, estoy seguro de que él respondería las llamadas, intentaría avisarnos de que está bien, además es imposible que Magnus no pueda rastrearlo si él está a salvo, pero... ¿Y si le paso algo malo? ¿Qué tal si se encontró con algún enemigo y este lo tomo como rehén?-

-Aún si un enemigo de la Clave lo hubiera atrapado, yo debería ser capaz de encontrarlo, a menos...-Magnus se detuvo al darse cuenta de la verdad y eso le causo escalofríos.

-¿Magnus? ¿Pasa algo?-Le pregunto Isabel

-Yo soy capaz de encontrar a cualquier persona excepto una, la única posibilidad de que yo no sea capaz de encontrarlo es a menos que se lo haya llevado Sebastián.-Dijo Magnus con cierto tono de angustia-Si él se lo llevó, Alec está en un grave peligro.-

-Oh no, Robert no podemos permitir esto, Sebastián ya me quito un hijo, no permitiré que se lleve a otro.-Le dijo Maryse a su esposo.

-Descuida, encontraremos a Alexander, y si ese maldito se atrevió a ponerle una mano encima lo va a lamentar-Intento calmarla Robert.

En ese momento, se abrió un portal detrás de ellos, sin embargo, nadie se dio cuenta, como así también, nadie vio a quien entro por aquel portal.

-¿Qué se supone que voy a lamentar, Lightwood?-Pregunto Sebastián, asiéndose notar.

-¡Sebastián! ¿Cómo entraste?-Pregunto Clary parándose.

-Eso no es de tu incumbencia hermanita. Yo solo eh venido aquí a traerles un regalo.-Dijo Sebastián al tiempo que dejaba un portarretrato sobre el escritorio.-Nos veremos pronto.-

Sebastián desapareció, mientras que, Maryse se acercó al escritorio, sin embargo, lo que vio, la dejo helada, las piernas le fallaron y callo de rodillas al suelo con lágrimas en los ojos.

Todos se sorprendieron ante el acto, pero los primeros en reaccionar fueron Jocelyn y Robert, quienes se acercaron a ayudar. Ambos se arrodillaron junto a Maryse.

-Maryse, ¿Qué ocurre?-Le pregunto Jocelyn.

Maryse señalo el portarretrato con el dedo y musito una sola palabra: Alec.

Robert camino hasta el escritorio y agarro el portarretrato, lo levanto y casi se le cayó al ver lo que contenía, era una foto de Alec durmiendo en una cama, parecía tranquilo, sin preocupaciones, lo cual, alerto aún más al hombre.

-No puedo creerlo-Musito Robert para sí mismo, antes de volverse hacia los demás-Es Alexander, es una foto en la que está durmiendo en una cama-

Después de ello, todos se acercaron a ver, con mucho temor, la foto del mayor de los Lightwood.

Maryse se levantó del suelo con ayuda de Jocelyn y se acercó a su esposo.

-Tenemos que encontrar a Alec, antes de que ese monstruo se atreva a hacerle algo-Dijo Maryse a todos los presentes, quienes asintieron en silencio.

Continuara...

ruxuQp'