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11:00.

Y aún tengo que estar con el culo pegado a esta maldita silla por 30 minutos más. Me quiero largar, a donde sea, pero me quiero ir.

Saqué un sacapuntas de la estuchera de un tío que se sienta de frente mío, me levante para tirar la basura en la papelera y de regreso, discretamente hice que se rompiera mi tacón, fingui que me había lastimado el tobillo gritando y asustando a todos, incluso al maestro, dio un pequeño salto en su silla antes de levantarse.

–¿Esta bien, señorita Quisling?–fingui llorar

–No.–dije entrecortada para que fuera más creíble

Del otro lado del salón, Rubén me miraba con una ligera sonrisa, sabe que es mentira.

Me ayudo a sostenerme para llevarme a la enfermería. La ventaja, es que la enfermera no dice que es mentira. Me mandaran a casa.

Antes de que salieramos del salón, les grito a todos que hicieran el trabajo. No lo harán, debería saberlo de sobra.
Apoye casi todo mi peso en el profesor, prácticamente me estaba cargando. Frey estaba pasando por el pasillo, me miro, miro mi tobillo y sonrió ligeramente.

Odio que me conozcan tanto.

Seguimos andando hasta la enfermería, donde me dejo sentada en una silla, toco la puerta y cuando la enferma abrió, le dijo algo para después irse.

La enferma espero un poco para el maestro se alejará.

–¿Quieres irte a tu casa?–pregunto mirándome de reojo

–Sí.–susurre

–Pasa.–pidió mirándome

Me quite el taco roto y entre.

–¿Cómo sigue la relación con tus padres?–preguntó sentándose

–Mal.–sacó algunas cosas de su escritorio y escribió en ella algo.–Creo que mi padre me odia cada vez más

–¿Has hablado con tus abuelos?–firmó y me tendió el papel

–No, no quieren saber nada de mi familia

Se levantó y me abrazo.

–Te acompañare a dirección.–tomo mi mano y me llevo

(...)

La casa estaba en completo silencio. Mi padre esta en el trabajo. Mi madre de compras (o haciéndose estúpidos fáciles). Y yo, se supone que debería de estar en el instituto.

Tire mi mochila en el recibidor, estaba descalza. Tuve que tirar a la basura mis tacos. Lástima, eran preciosos.

Fui a la cocina mientras me quitaba el abrigo, encendí la calefacción y puse el abrigo en el respaldo de una silla. Abrí el frigorífico, ¡hay comida!. Tenía una nota: Anniken, iré con y tu padre después de que salga del trabajo a una fiesta, regresaremos tarde. Te dejo comida, no nos llames. Además de ese plato de comida, habían otros dos atrás de este. Saqué el que tenía la nota.

Al menos estaré sola hoy. Podría hacer una fiesta, aprovechando que ellos se fueron a una.

Me senté en la mesa a comer, cuando termine, esperaré a que los amigos salgan del instituto para decirles de la fiesta.

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⏰ Última actualización: Dec 24, 2019 ⏰

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The 5th Wave »r.d.g.«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora