Luego de dos años huyendo de casi todo el mundo, decidí que lo mejor era quedarme en mi casa, en Londres, si alguien quería encontrarme, pues que lo hiciera, ya yo estaba lo suficiente cansada, al menos mentalmente, para seguir corriendo de todas las personas que intentaban acercarse a mi para descubrir mis secretos, ya había perdido mucho tiempo aunque dos años para una persona inmortal no era nada, pero no pretendía perder mucho más que eso.
Avise a mi padrino Marcus, que estaría en Londres, y si necesitaba mis servicios que me contactara, así que sin más me quede a vivir en esta Ciudad, la cual siempre he amado. No me volví a encontrar con Jake o Natalie, ellos respetaron mi decisión de estar sola y lejos de ellos para protegerlos, sin embargo, meses después decidí que Jake se hiciera cargo de una parte de las empresas de mis padres, que ahora eran mías, luego de sus muertes, o mejor dicho asesinato.
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Así que aquí estoy ahora, han pasado varios meses desde que le comunique a Marcus que me encontraba en Londres; la rutina me estaba matando, siempre leía, caminaba, hacia ejercicio, cocinaba, cazaba a alguna persona, e iba a dormir, todos los días, ya estaba apunto de morir, sarcásticamente claro.
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En algún momento de el día me quede dormida en el sofá leyendo, y los golpes en la puerta principal me despertaron, corrí con mi velocidad de vampiro para ver quien interrumpió mi sueño; antes de abrir la puerta arregle mi ropa, la cual consistía en una pijamas de flores, sí que penoso, pero no había nada mas que hacer, así que, tome un respiro y abrí la puerta, en frente de mi se encontraba un hombre moreno alto, y con lo que parecía un uniforme militar negro.
- ¿Elizabeth Jones? – pregunto con la voz de todo un militar
- Sí, soy yo – lo mire – ¿Qué necesita?
- El Rey Marcus ha dicho que requiere de sus servicios en una misión especial – respondió el hombre
- ¿Qué clase de misión especial? – pregunté, queriendo saber todos los detalles
- Desconozco de los detalles, pero si decide aceptar, le daré veinte minutos para que se cambie e iremos a nuestra base militar aquí en Londres, donde recibirá todos los detalles de parte de El General Mack – respondió viendo la hora y esperando por una respuesta de mi parte
- Esta bien, iré con usted – abrí completamente la puerta – puede pasar, y esperar en la sala – el hombre pasó y se sentó en el sofá grande, y yo camine escaleras arriba
Una misión especial, que genial, miles de preguntas se posan en mi mente, quería saber todos los detalles de la misión y por que necesitan de mi para llevarla a cabo, sin embargo, todas esas preguntas debían de esperar, por ahora mi única misión era arreglarme, tome una ducha de aproximadamente cinco minutos, dejándome solo diez para vestirme, mire en mi armario y saque un jean de cuero negro a la cadera, una camisa blanca con detalles en negros, y mis botines negros altos que tanto me gustaban, y deje mi cabello suelto al natural.
- Estoy lista – dije bajando las escaleras para encontrarme con el hombre, el cual aún no sabia su nombre, y cuando digo aún es porque usare mi poder para saberlo; Coronel Riggs
- Entonces, andando – dijo saliendo, yo cerré toda mi casa y escondí las llaves en una maceta de una flor carnívora que se encontraba en frente de la mansión
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Luego de un corto de viaje de veinte minutos, me bajaba de la ostentosa Hummer, para entrar en un pequeño edificio, al parecer las personas que pasaban alrededor no sabían nada acerca de lo que se podría ocultar detrás de esos edificios. Al entrar había una recepcionista rubia que saludo al Coronel con una sonrisa y llamo el ascensor por él.
- Le gustas – le dije al Coronel cuando nos encontrábamos solo en el ascensor, el cual solo descendía a gran velocidad
- ¿De que habla usted? – dijo el moreno, ruborizándose un poco
- Te gusta a ti también – lo dije emocionada y riendo
- No se de habla – dijo este mirando hacia al frente
- Debería de pedirle una cita, le aseguro que aceptara – dije encogiéndome de hombros
- Ya llegamos – anuncio ignorando lo que había dicho, las puertas se abrieron y muchas personas estaban reunidas alrededor de una mesa redonda y cada una tenia una laptop o Tablet en las manos – Elizabeth Jones esta aquí – anuncio el coronel en voz fuerte y clara, y todos voltearon a mirarme, algunos se mostraban sorprendidos, y otros atemorizados
Miraba a mi alrededor, tantas personas en este enorme lugar, muchas otras oficinas y hasta algunos laboratorios se encontraban en aquel lugar, que tan grande podría ser, me pregunté.
- ¡Elizabeth Jones! – exclamo alguien desde unos de las oficinas que se encontraban en la parte de arriba de aquel enorme lugar subterráneo – sube aquí – pidió y junto al coronel comencé a caminar hacia allá
- ¿Quién es usted? – pregunte directamente cuando estaba en frente de aquel hombre
- General Mack , a sus servicios – hizo una reverencia – soy el General encargado de los servicios secretos de Londres
- ¿Cuál es mi misión aquí, General? – pregunté sin rodeos
- Pasa a mi oficina y siéntate – hice lo que me pidió, y detrás de mi sentí la puerta cerrarse – el Rey Marcus nos ha informado acerca de los poderes que hasta ahora usted tiene – pensé en mis poderes, tele-transportarse, hipnotizar, obtener cualquier poder con solo un toque, leer mentes, controlar los 4 elementos, volar, cambiar formas, escudo, en total tenia 8 poderes y aún podía obtener más – la verdad que tener 8 poderes y uno tan poderoso, pensamos que seria perfecta para esta misión de rescate
- ¿Misión de rescate? – pregunté sorprendida, me darían algo tan fácil, por que no lo hacen ellos
- Sí, pero esta no es una misión de rescate cualquiera Elizabeth, nadie excepto tú y otra persona tienen un poder tan fuerte y raro como lo es el Escudo, al menos aquí en Londres – respondió, ¿Quién más podría tener ese poder? Mi mente comenzó a divagar por mis recuerdos, y solo había una persona pero era imposible, él se encontraba en Francia
- ¿Por qué este poder es tan importante en la misión? – pregunté
- Por que viajaran a otra dimensión, y si no tienen este magnifico poder, serian lastimados atrozmente al llegar allá – respondió
- ¿A quien debo de rescatar? – pregunte, quería saber por quien correría el riesgo de entrar a otra dimensión
- Eso es clasificado, solo podre darte su nombre Colton Haynes – era un lindo nombre – tu compañero aún no ha llegado, así que podrás ir a la habitación que te hemos preparado para que descanses, y mañana partirán a la otra dimensión – finalizó abriendo la puerta de la oficina y dejándome salir
La habitación donde me encontraba era pequeña, consistía en una cama individual, un closet donde había pura ropa negra militar de mi talla, y armamento, desde una navaja hasta un rifle francotirador, por suerte sabia como usar estas cosas, mi padre cuando estaba vivo me había entrenado desde pequeña en distintas artes marciales, y me enseño a como usar cada arma, al principio no entendía por que mis padres me obligaban a asistir a todas esas clases, yo quería salir con mis amigas y bailar ballet junto con ellas, pero mi padre decía que yo no iba a necesitar eso. Ahora lo entiendo, ellos me preparaban para mi futuro cuando cumpliera 17 y me convirtiera en lo que soy ahora, una vampira, fuerte y letal.
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Espero que les haya gustado el primer capitulo, por favor, voten y comenten.
Si pueden, recomienden la novela, Gracias...
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Vampira Curiosa
VampireCuando un día aparecen unos hombres en frente de la puerta de Elizabeth diciendo que tiene que ir a una misión de rescate, ella acepta, primero porque su rutina diaria es aburrida, y segundo por descubrir a donde tiene que ir y quien va a rescatar...