Vivo O Muerto

Escape parte 3

Voz: ¡Josh, Josh, Josh despierta!

Intentaba abrir los ojos para ver quién era.

Yo: ¿Que sucede?

Pude abrir los ojos y vi a Forest, era él intentando despertarme.

Forest: ¡Oh gracias a Dios!
¡Papá, papá ven rápido!

Paul entró rápidamente a la habitación.

Paul: ¿¡Que sucede!?
Ya despertaste

Como si nada, me acordé de Luzo e intente levantarme de la cama, pero un dolor me lo impedía.

Aún recuerdo el dolor que sentía en el hombro.

Yo: ¡¿Donde esta Luzo?!

Forest: Calmate, Luzo esta bien, no le pasó nada malo

Paul: Recibiste un disparo hijo, intente quitarle el arma a el señor Madinson y por accidente disparó, te pegó la bala en el hombro, te desmayaste por la contusión.

Yo: ¡Oh, diablos!, me duele mucho

Luzo salió de la nada y salto hacia la cama donde estaba.

Yo: Tranquilo Luzo, estoy bien.
¿Oye, que sucedió con el señor Madinson?

Paul: Bueno... en realidad... Hijo, una sirvienta infectada que estaba casualmente en esa habitación lo atrapó, no sabemos que sucedió, lastimosamente lo dimos por muerto después de ver sangre saliendo por debajo de la puerta

No podía creer que el señor Madinson había muerto en su propia casa.

40 minutos después

Paul: Tenemos que irnos, creo que escucharon los ladridos de Luzo

Forest: No podemos dejar a la sirvienta y a la señora M solas

Paul: Agh, es verdad. ¿Oigan quieren venir con nosotros?

Señora M: No quisiera ir con alguien que deja encerrado a una persona sola con un caníbal

Paul: ¡Ya se lo dije señora, era por el bien de todos!, a veces hay que sacrificarse.
Bueno, como quiera...

Salimos por la puerta trasera y tomamos un vehículo de el difunto señor Madinson ya que tenía 3 autos.

Paul encendió el auto cuando de repente...

Sirvienta: ¡Altoo, llevenme con ustedes!

Paul frenó rápidamente el auto

Paul: ¡¿Pero que caraj#?!

Sirvienta: Por favor, llevenme con ustedes, no quiero estar con esa señora un minuto mas

Señora M: ¿¿Adonde crees que vas??

Por si fuera poco la viuda señora Madinson también estaba loca, saco un arma y empezó a disparar a todas partes. Paul piso el acelerador y salió de ese lugar rápidamente, me di la vuelta para ver por última vez esa casa cuando veo que una multitud de personas caníbales agarraron a la señora M y a la sirvienta.

Por fin pudimos escapar de ese pueblo, ahora nos dirigimos hacia el centro de la ciudad, donde supuestamente todo era mejor, mala idea.