II-Help Me-II

I-Capitulo 4-I

Narrado por Adam

Un fuerte ruido venir del pasillo fue lo que me despertó de mi sueño, mire a mí al redor, todo estaba oscuro, al parecer el dolor de cabeza desapareció, todo el día había dormido como nunca antes, me levante de mi lugar y me dirigí al origen del ruido, me asuste cuando me di cuenta que provenía del cuarto de Louis, de seguro él ya se habría despertado. Abrí la puerta lentamente hasta que note una pequeña figura en el suelo, era Louis.

-Que haces aquí?!-me grito alterado, se rascaba las heridas de sus brazos además de estar sin pantalones.

-Amanda me llamo y me dijo que te cuidara, idiota le has preocupado mucho, te desmayaste sin más-le conteste seco, necesitaba saber la verdad ahora mismo.

-Aléjate de mí-me contesto.

-Que dices?!-dije confundido.

-QUE TE ALEJES DE MI ESCUCHASTE-me volvió a gritar, yo no me moví. Yo le dije a Amanda que lo cuidaría por ella, no pienso dejar eso de lado.

-Louis...-intente acercarme a él pero mientras lo hacia él se alejaba más.

-ALEJATE DE MI IDIOTA-Sus ojos estaban rojos, estaba a punto de llorar.

Me detuve.

-Que es lo que te pasa?-murmure, esperando una respuesta coherente.

-Son cosas que no te incumben-me contesto igual de borde que antes.

-Pero me preocupan y a Amanda también-.

-Son cosas privadas, no se metan en ellas-sigue actuando borde.

-Cosas privadas que no son sanas como esta-le dije estirando uno de sus brazos con un movimiento rápido quedándome hincado frente a el-Louis, te desapareciste casi dos semanas, necesitamos explicaciones-dije sin más.

-Vete a la mierda-se soltó de mi agarre bruscamente y aparto la mirada, ya me estaba cansando, se estaba comportando como un crío.

-Está bien-suspire- Al menos déjame sanar las heridas, podrías tener una infección-le propuse, él ni se inmuto por lo cual decidí ir por el botiquín rápido y regresar, por suerte el seguía en la misma posición que antes, me acerque a él y me senté, saqué las vendas del botiquín, algodón y el alcohol. Abrí con cuidado la pequeña botella de alcohol y humedecí el algodón con esta, después puse el algodón sobre las heridas iniciales de su brazo. Louis soltó un grito ahogado, lagrimas corrían por sus mejillas, su mano libre se aferraba a mi camiseta, repetí la acción hasta terminar con todas las heridas de ese brazo. Vende el brazo y proseguí con el izquierdo, en todo el proceso ninguno hablo, todo era silencio interrumpido por los gritos ahogados de Louis y una que otra maldición, no quería forzarlo a hablar, estaba mal, muy mal, debe de calmarse y después quizás pueda hablar con él.

-Gracias-dijo en susurro.

-Que dijiste?-le pregunte con ironía.

-GRACIAS, no me hagas volverlo a repetir-dijo enfadado, me encantaba hacerlo enojar.

-Bueno, cálmate, ahora será mejor que vayas a dormir-dije para dar por terminada la conversación.

-Ya es de noche?-pregunto confundido.

-Si, será mejor que descanses-dije cansado y me levante.

-A dónde vas?-.

-A la mierda-conteste y me dirigí a la puerta-Buenas noches- y la abrí.

-Espera-no sé de donde saco tantas fuerzas pero él estaba ya detrás de mi tirando de mi brazo-No te vayas-murmuro.

-Vaya, el chico está en sus días-bufe y me di la vuelta para quedarnos cara a cara- Que no querías que me fuera y ahora quieres que me quede?-le dije un poco sarcástico y molesto.