Capitulo Final : Tranquilidad eterna

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Abrí los ojos lentamente sintiendo unas luces que casi me quemaban los parpados sensibles que poseía en aquellos momentos. Mi cuerpo entero dolía en todas las maneras posibles, me costaba respirar.

Pude notar que tenía un montón de máquinas conectadas a mi cuerpo. Este casi no se permitía al movimiento debido a los diversos aparatos que se mantenían junto a mi, casi como si fuesen parte de mi ser. 

Miraba a los lados, inspeccionando, tratando de dar con alguna respuesta, convenciéndome de que había sido un simple sueño. Todo lo que divisaba era una habitación blanca en su totalidad, estaba vacía y parecía ser de noche debido a que percibía el cielo oscuro desde las cortinas blanquecinas del otro lado. 

Cerré los ojos concentrándome en todo el dolor. Pronto comencé a llorar, tanto físicamente como psicologicamente estaba desecha, ya no podía más  . El dolor de perder un amigo y también de perder a Jack quien pretendió con astucia serlo. 

No podía creer que al final de todo yo  era la única culpable de todos lo que había pasado, aún no comprendía la razón por la cual me permití llegar hasta este punto tan crítico. Un punto en el que nada era recuperable, donde lo que más temía, se había vuelto una realidad cruda y sin cura. Tampoco pude pensar en el momento en el que todo se salió de control o como todo esto pasó de manera tan rápida.. 

Ladeé la cabeza al escuchar una voz femenina algo gastada. En ese punto, me permití alzar la mirada unos cuantos metros para encontrarme con unos ojos cargados de tristeza, decepción y asombro. Era mi madre, pero... no se parecía en nada a la antigua mujer que había conocido.

Sus ojeras estaban cargadas completamente dándole un tono negro el cual le hacía notar que  no había dormido en algunos días. Parecía haber bajado de peso de una manera increíblemente rápida, casi podía ver los huesos por encima de la clavícula.Su cabello el cual parecía no haberse pintando, lucía en tonalidades blancas en forma de canas. Estaba cansada y gastada.

    —  No puedo creer que ahora los tengo a los dos en el hospital...   —  Dijo ella  hablando de mi padre en un susurro. Lágrimas corrían sin control por sus ojos tratando de controlarse,cosa que pareció casi imposible. 

No me permitía el lujo de hablar, de hecho, no podía hacerlo. Tenía una especie de máquina conectada a esta y a mis fosas nasales permitiendo el paso de aire dificultoso que se colaba siendo recibido por mis pulmones quienes luchaban desesperadamente por dejar de inhalar y exhalar. 

Me sentía realmente mal. 

Aquella mujer guardo unos minutos de silencio en lo que se tranquilizaba. Seguidamente se puso de pie y depositó un beso suave en mi mejilla. 

 —  Debo de revisar a tu padre, aún no ha despertado. Por favor, no hagas nada arriesgado, ya vendré el doctor a ponerte tu suero diario e indicarte tu posterior tratamiento de recuperación...    —   Seguidamente, besó mi mejilla con emoción y tristeza. Omití casi toda su frase... en mi cabeza solo había pensamientos completamente  cortos: ¿Que quería decir con que mi padre no despertaba ? ¿Que estaba en una especie de trance o coma? No podía ser, mi padre... lo había descuidado... no recordaba de él. 

Me quedé sola un momento y la habitación se llenó de ese silencio incompleto el cual se presentaba desde le inició.

Minutos después un hombre vestido de bata blanca y gafas me sonrió con delicadeza entrando a paso leve por la habitación hasta donde me encontraba. Supongo que era parte de su trabajo tener que fingir alegría aunque el paciente estuviese casi agonizando. Era algo hipócrita, pero... se me hacía una buena forma de animar a quienes realmente deseaban salir adelante, quienes realmente deseaban vivir.

No como yo. 

 —Veo que ya despertó señorita... —Me sonrió con suavidad insertando el suero en la pequeña bolsa que conectaba a mis venas. — Empecemos con el tratamiento... —



Horas



Días




Meses pasaron y mi mente aún no dejaba ese trauma permanente. Aún estaba desecha ante la falta de Zack. Noches rompía en llanto ahogado, sin contar las innumerables pesadillas que esta me causaba , insomnio, paranoia, depresión, falta de animó... todo ahora era mi mundo. 

Tuve que estar en silla de ruedas durante más de 3 meses. Terminando al final con dos muletas a cada lado de mis brazos para apoyarme de forma permanente. 

Mi padre había despertado de su coma, pero jamás fue el mismo. Su voz había callado, no hablaba... parecía externo a este mundo. Tratamientos se le dieron, pero nada le funcionó, estaba desesperado, no podía creer todo lo que había pasado. Casi entraba en grito cuando supo la noticia.

Le habíamos contado a los doctores y a la policía exactamente que había paso antes.  Pero ellos no nos creyeron, lo tomaron como un accidente o suicidio, los odiaba. 

Ahora que lo pensaba, no tenía nada por lo que valiese vivir. Estaba desecha... mis pies jamás volverían a funcionar  y nunca podría volver a tener una vida normal. Había perdido mi aliento por la vida... ¿Que mas daba estar muerto o vivo? 

Pasaba más tiempo en la casa, pues mi madre tomaba más atención a mi padre, tenía que llevarlo a citas constantes con el médico ya que estaba mal. Y yo me sentía realmente deprimida... quería acabar con todo, mi único amigo en la vida había muerto junto con Jack, quien también considere un amigo.

Miré directamente a la ventana de mi casa.

¿Estará lo suficientemente alta? 

Caminé con paso torpe hacía esta y una vez allí la abrí medianamente como para dejar entrar a mi cuerpo. Me quedé sentada en el marco de esta, observando el suelo quien me esperaba. 

Las lágrimas rodaron por mis mejillas recordando todo lo que había pasado y lo débil que había quedado ante aquello. Sin pensarlo, salté hacía mi destino... el único destinado a ser para mi... supongo que la felicidad jamás estuvo en mi vida... y no estaba predilecta para mi, creo que al depresión, la ansiedad y la amarga vida me orillaron a tomar una sola decisión.

Morir...   

Un compañero de juegos se va, y otro viene...


Mi tiempo expiro.


Fui la última de la lista.. salvé a que otras personas tuviesen el mismo cruel destino que nosotros.  Al menos eso fue lo último que me dejó feliz antes de cerrar los ojos en mi tranquilidad eterna,para al fin descansar. 


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¡Otra novela llegada a su fin! Espero haya sido de su agrado, el final fue triste lo sé.. pero no veia otra forma de acabarlo, Alisson necesitaba descansar de todos sus problemas... 


Pregunta! . ¿Se ha visto el cambio de escritura en esta historia? Hace poco me pase por la de MAP  y vaya que si tenía formas extrañas de escribir las historias, sin contar los errores de ortografía que cometía que ahora trato de mejorar constantemente.

Ahora bien, necesito su opinión... ¿Quieren que se suba ya la segunda temporada de MAP o... una novela yaoi? Tengo ambos, pero necesito saber que quieren primero *u*<3

Por último, agradezco de antemano todo su apoyo, votos y comentarios positivos que recibió esta novela. Ojala la siguiente tenga más votos, leídos y comentarios. Muchas gracias, los apreció mucho, sin ustedes no sería nada! 

Abrazos asesinos! 

La voz de la Traición   © #CreepyAwards2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora