Mi pequeño y secreto diario.

Liberarme, para poder liberarte.

Una noche con brisas. Un cielo nublado. Las cosas que más me dan placer en la vida están situadas entre lo tenue y deprimente, entre lo tranquilo como el sonido de las hojas de los arboles al chocar entre sí por causa del viento, como la lluvia, como las nubes, como las brisas. Lamentablemente, tú también eras uno de esos placeres, el más complejo, el más desinteresado y deje que el tiempo transcurriera porque me conformaba estúpidamente con compartir un momento contigo. Me conforme con mirarte. Me conforme con escuchar tu voz, aunque no la dirigieras hacia mí. Me conforme con tu sonrisa. Entonces ¿Que está pasando? ¿Porque el llanto no cesa? Si solo me eh conformado con lo poco, ¿Porque no sostengo la mirada? ¿Porque evado las preguntas?

Necesito pedirte una única cosa, necesito que dejes de hacer parecer que quieres estar cerca de mí. Necesito que te alejes, que te calles, que no sonrías, que no me mires. Necesito sentir que no te tengo para poder aceptar que no podría perderte. Porque necesito después de todo este tiempo, liberarme. Ya no quiero guardar silencio, ya no quiero mirarte de reojo, ya no quiero mentirme ni mentirle a los de más, y no quiero sentir que estoy rompiendo las reglas al quedarme siempre lo más cerca que puedo de ti, al mirarte sin mirar y al hablarte sin hablar. Estoy preparada para dejarte ir, pero esta vez necesito que me ayudes a liberarte y así, me liberes también a mí.

Eh tenido suficientes remordimientos. Ya eh pasado cada noche y aún sigo aquí... y si aún sigo aquí, ¿Que más podría pasarme? Lo peor se ha encarnado bajo mi piel, eh sentido lo que es estar sola, derrotada, destruida y aún sigo aquí. Así que esta vez, olvidarme de ti no puede dolerme tanto como me ha dolido retenerte en mi mente. Porque para ello no necesitaba ser fuerte, solo aparecías en mis pensamientos cada segundo del día. Ahora sé que puedo deshacerme de tu recuerdo, arrancarme tus palabras del alma, borrarme tus caricias de mi piel, limpiar los besos que dejaste en mis labios. Y lo único que necesito después de haber sido tan débil y haberme enamorado, es que te esfumes y que contigo, te lleves todo eso que acabo mencionar. Y que algún día, cuando regreses, y quieras reparar todo lo que has hecho ya no quede nada, y tu trabajo se habrá terminado. Estaré curada. Como si hubieras sido una enfermedad que me ataco durante mucho tiempo. Como si jamás hubieses enterrado tu mirada en la mía y como si jamás hubiera sentido nada de lo que ahora siento por ti. Y será tarde. Y tendrás que marcharte. Caminaras lentamente lamentando no haberte dado cuenta antes, negando con la cabeza y agachando la mirada, guardaras en tus bolsillos tus sentimientos y notaras un vacío en el pecho. Y como un día tú te quedaste con mi corazón, esta vez el tuyo me pertenecerá. Pero yo no jugare con él. Solo lo guardare y lo dejare morir si así lo deseas, y cuando regreses a pedírmelo, y a implorarme lo que en este momento yo te estoy implorando a ti, entonces ese día sin más, te lo regresare, y te hare el favor que tú me hiciste a mí. La diferencia será que yo nunca jugué con él, solo lo guarde y lo ignore. No abras sufrido tanto como yo, no abras llorado tanto como yo, no abras pasado por lo que yo y entonces lo entenderás, y no lo volverás a hacer esto con nadie más porque ya sabrás lo que se siente. Tal vez no sea yo la que te haga sufrir lo que tú me hiciste, porque yo no soy quien crea el Karma. Tal vez sea otra chica, que te de esas noches en vela y que te deje secos los lagrimales...

No has sido un error, porque gracias a ti me eh dado cuenta que soy capaz de amar a alguien a pesar de las adversidades. No estoy orgullosa de haberte querido con tal incondicionalidad y hasta el punto de considerar el entregarte una parte importante de mi vida, estoy orgullosa de el hecho de darme cuenta que tú no puedes hacerlo. Tú no puedes querer a alguien ni dejarte querer, estas muy lastimado o temeroso, o inseguro o rencoroso, y eso lamentablemente hace que en efecto, alejes a quienes te aman, como tu alguna vez lo dijiste. Yo sé que no estás listo para enamorarte, pero no nacemos estando listos. Si tan solo te hubieses dejado llevar por tus sentimientos...

Por esto esta noche hace viento. Por eso mis cortinas se menean al ritmo de mi melodía favorita, por eso cierro los ojos y te veo, veo tus ojos castaños, veo tus hoyuelos en las mejillas, veo tus curvados labios y me doy cuenta que sí, te quiero, pero ya no te esperare. Siempre eh dicho que si todos diéramos una oportunidad de que alguien nos enamorara, entonces los únicos corazones rotos serían los amores imposibles. ¡Y es verdad! ¿Porque no dar esa oportunidad? seriamos muchos menos lo que caminamos por el asfalto con el corazón hecho pedazos. Por lo menos habríamos obtenido una oportunidad para intentarlo, todos merecemos una. Pero vemos y no queremos ver, oímos pero no escuchamos, no nos damos cuenta que, quien nos quiere esta justo enfrente de nosotros, esperando por esa oportunidad de oro que tal vez cambie las cosas. Tal vez te enamores, tal vez esa persona sea más de lo que habías estado esperando o de lo que te mereces. ¿Porque no hacerlo? ¿Que perderías al dejar que alguien intentara ganarse un espacio en tu corazón?

Pero ¿Yo que se? Solo soy alguien que escribe casi sin pensar.