Cap 47.

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Los pequeños tortolos ya andaban rondando por la casa muy felices.

-Siento envidia...-Lucas se cruzó de brazos- Tú no andas conmigo todo el día agarrada de la mano...- hizo un puchero.

Aew, que tierno jaja.

-Te amo- reí.

Ahora que lo pienso, aún nos queda mucho tiempo de vacaciones y no quiero quedarme acá aburrida.

-Lucas...- él me mira y me da un "uh?"- ¿Y si vamos a New Orleans?- sonreí.

Él me miró analizando.

-Puede ser, ¿te das cuenta que es muchas horas de viaje verdad?-

-Sí lo sé, podemos irnos en avión- alcé mis hombros.

-Déjame pensarlo...- sonrió.

Se que la idea no le agrada del todo. Además, mi mamá es la única con auto allá y somos 8. No cabemos todos e irnos en auto son muchas horas de viaje y tendríamos que hacer varias estaciones.

-Está bien- le di un beso.

Ahora que me acuerdo, había dejado con la mamá de Sofía a Blue. Oh por Dios.

-¡Lucas, Lucas!- exclamé moviendolo ya que se estaba quedando dormido.

-¿¡Qué, qué!?- se sobresaltó.

-Olvidamos a Blue- hice un puchero.

Él se tiró de nuevo en el sofá y me miró con cara de "¿es en serio?".

-Oye, es nuestro perrito, o más mío que tuyo-

-¡Es de los dos!- gritó.

Bien.

Me acerqué a él peligrosamente y el se fue encogiendo poco antes poco en el sofá.

-No me grites.- lo señalé.- A menos que estemos discutiendo o yo tenga la regla, pero del resto no- él asintió. Y luego sonrió, me tomó de la cintura y rápidamente me puso debajo de él.

-¿Te he dicho lo hermosa que eres cuando te molestas?- sonrió. Y me acomodo el cabello.

A pesar de qué había estado en situaciones así antes con Lucas, me ponía nerviosa.

-S-si- logre decir.

-¿También que te ves más bella cuando estás nerviosa?- sonrió aun más.

-No estoy nerviosa-

-Te conozco mujer- ironizo y sonrió.

¿Mujer, qué?

Solo me reí a carcajadas y el me calló con un beso. Pase mis manos por su cuello y el tenía una en mi cadera y con la otra se apoyaba.

-¡Mi señor!- exclamó Amber- ¡Hagan sus cochinadas en otro lado!, por favor.- se tapó los ojos.

-Debe ser que Ryan y tú...- dice Lucas.

-Cállate- sonrió ella.- O Kendall nunca será madre-

Lucas se tapó allí en forma de protección y yo solo reí. Los amo tanto jaja.

Me levanté del sofá, subí las escaleras y agarré las llaves de mi auto y dinero, iré a buscar a Blue y comprarle comida.

Lucas me miró y me habló.

-¿A donde vas?- me señala.

-A buscar a mi perro- resalte el "mí".

Él solo me miraba con los ojos achinados.

Una Casa,  3 Problemas. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora