Una Casa, 3 Problemas.

Cap 50.

Estoy malditamente cansada de limpiar de verdad. Él cuarto de los princesos estaba muuuuy sucio de verdad.

Por lo menos el cuarto de Mel y Diego era algo ordenado, solo algo.

El de Ryan y Amber era un desastre, mucha ropa por todos lados, zapatos, etc etc.

Erick y Ashley en las mismas, aunque Ashley me comentó que vive peleando con Erick para que no deje la ropa en el piso pero aveces no le hace caso.

El cuarto de los padres de Lucas estaba ordenado pero igual pasé una escoba por el polvo.

Eran como las 3:00pm y aún no habíamos almorzado por estar limpiando, ya había terminado mi parte, Lucas aún no terminaba. Me asomé por la ventana y Diego estaba extendido en el césped de la casa, me reí por eso debe estar muy cansado.

Bajé las escaleras y me encontré con Ashley dormida en el sofá, la dejé descansar un rato. La sala había quedado muy bien, fui a ver la cocina y estaba limpia igual, no sé dónde está Erick. Amber y Ryan aún no llegaban.

Fui al jardín trasero y todo limpio. Mel estaba terminando de amarrar una bolsa con lo que supongo es basura.

Todo iba bien.

Decidí pedir pizza, porque mis ganas de cocinar son de 0%. Además es más rápido. Ya había llamado y en unos minutos estaría acá.

Como estaba por afuera decidí pasar por el garaje para ver que hacía Lucas.

Me asomé y todo estaba limpio, pero él no estaba por allí. Entre y lo vi tendido en lo que parece ser una colchoneta. Se veía tan tierno, estaba sudando.

-Cariño...- lo llamé. No se movía.-Lucas...-

-¿Uh?- me estrujo los ojos y me vio.

-Ve adentro- le dije.

-Un momento- me dijo.

-Párate vamos, no seas morza- le dije riendo.

-¿Qué hora es?- veo mi teléfono.

-Las 3:10- le digo.

Se para super rápido y me mira alarmado.

-¿Por qué no me despertarte más temprano?- me pregunta sacudiendose la ropa.

-¿Para qué?- le pregunto.

-Tengo que hacer algo antes de irnos- sale del garaje.

Ante su descuido busco el control y lo cierro. Lo guardo en mi  bolsillo y entro a la casa. Justamente cuando iba a subir las escaleras tocaron el timbre.

Fui a abrir y era el chico de reparte las pizzas.

-Aquí tienes- me las entrega- Son 12,5$- le entregó el dinero.

-Gracias- le sonrío y se va.

Las pongo en la barra de la cocina y busco unos platos para serviles a cada uno.

-¡A comer!- grito para que todos me escuchen.

Vienen corriendo por algún lugar hasta que llegan a la cocina.

-¡Moría de hambre!,creí que no ibas a cocinar o algo así- dice Erick sentándose.

Reí y les serví a cada uno, tenían mucha hambre por lo que veo.

-¿Donde está Lucas?- pregunto.

-Creo que está arriba- dice Mel.

Asiento y me pongo a comer con todos. A los minutos entra Lucas en la cocina. Nos mira y antes de irse lo llamo.