La Esposa De Drácula©

CAP 9: " MI CASA MIS REGLAS"

                                                                                CAP 9

                                                            "MI CASA, MIS REGLAS"

Sin darme cuenta Mery se encontraba ya parada y con la cabeza agachada. - Lo lamento señor y señora no volverá a pasar. - dijo nerviosa.

- Eso espero Mery, no me decepciones. Te puedes retirar. - dijo aflojando su corbata.

- Con permiso. - dijo retirándose Mery hacia el patio trasero haciéndonos reverencia.

Alcé mi mirada ya que inconscientemente estaba mirando a su dirección.

- ¿Quién te crees tú? Para prohibirme hablar con la gente.

- Soy tu...

- Si, si mi esposo, pero no es para que amenaces a la gente que trata de hablar conmigo. Estás muy mal Vlad y eso no me gusta.

- A mí tampoco no me gustan muchas cosas de ti, pero las tengo que pasar por alto. - Dijo sacándose su saco.

- ¿Ah sí? ¿Cómo cuáles?

- Que no me quieras besar, que no quieras dormir conmigo, que armes peleas y discusiones de la nada entre nosotros.

- ¿De la nada? - pregunté muy molesta.

-Sí de la nada. Esta es mi casa y yo pongo mis reglas. - dijo mirándome amenazadoramente.

- Ah entonces si es tu casa; yo no tengo porque estar aquí y mucho menos estar obligada a estar a tu lado. - dije caminando para la puerta principal de la casa. - Entonces me voy. -dije parándome dramáticamente; obvio sin drama no es nada. Sabiendo que el me detendría.

Paso como una ráfaga de viento y de un momento estaba pegada contra la pared.

- ¿Qué haces? ¡Suéltame! - grité-me estás lastimando.

Aflojó su agarré y se retiró. Sobé mi cuello, ya que me había tomado con fuerza.

-No me hagas enojar; no soy un humano para soportar tu respuesta tonta; esta también es tu casa porque eres mi esposa, me expresé mal; tanto tiempo solo, que hace que las palabras salen automáticamente de mi boca- respiraba entrecortadamente ya que estaba tratando de calmarse.

- Entonces yo también voy a poner mis reglas en esta casa porque también es mía- dije muy seria. Tenía algo de miedo al imponer mis ideas, pero tenía que arriesgarme a tener una voz en esta casa.

- Solo si yo las apruebo. -dijo luego de. Pensar; se notaba que estaba pensando demasiado todo.

- Eso no vale; es injusto. -dije pisoteando mi pie izquierdo contra el suelo; es una manía que hacía cuando no obtenía lo que quería. Luca decía que era un berrinche de niña; no podía controlarlo ya era parte de mi esta costumbre. Deje de pensar en Luca...

- Nada en esta vida es justo Ileana- dijo sentándose en la silla.

Es por eso que estoy aquí pensé

-Oye te oí- dijo mirándome de nuevo.

- ¡Deja de hacer eso!;es insoportable.

- ¿Qué haces con esa ropa? -dijo observándome de más.

¿Acaso te gusta lo que ves? pensé

-Lo que veo es mío y eso me gusta- me respondió con una sonrisa muy pícara en su rostro lo cual me hizo reír.