- Me enamore de esa chica de Kepler, más que de su bella sensualidad de su amor por los detalles de la vida, ella en sus ojos tiene un remolino de estrellas órbitando al rededor de sus iris, y es tan intrigante como peligroso perderse en su mirada certera, mirada que excudriña lo más profundo del Alma de cualquier aguerrido que se le acerque.
- Yo viajero que ha pasado por tantos mundos, por tantas estrellas, tantas Galaxias exóticas, que he hecho nombre en las estrellas plantando banderas en Lunas ajenas y llegando a Planetas cual Colon de la Era Moderna, al llegar a Kepler me sentí como un niño, como un tonto, como un pequeño con mucho miedo de lo que un simple beso de esa Chica le puede hacer a mi mente, miedo que creí nunca iba a sentir, huyó mi audacia, enmudeció mi boca y mi instinto aventurero me pregunta...
¿Que pasaría si ella me toca?
¿Que pasaría si ella me besa?
¿Que pasaría si se duerme en mis brazos?
¿Si me llevará de la mano a explorar lo inexplorable?
¿Si así Algún día ella decide juntar si camino al mio y así trazar un sendero entre las estrellas?- Un camino que al final del viaje se convierta en nuestro camino...
- Un camino tan Hermoso que las estrellas narren su Hermosura en Constelaciones por siempre en el Firmamento. Amén.