Capítulo 2

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Mientras tanto en otro lugar, una chica de cabello negro azabeche se encontraba sentada en un sillón de terciopelo color carmesí con unos cuantos detalles en negro, mientras escribia en una pequeña libreta que reposaba en sus finas y delicadas manos. - ¡Marinette, hija hasta que por fin te encuentro! - dijo un hombre alto y robusto, con cabello castaño y bigote de igual color - ¿Qué sucede papá? - contesto esta un poco preocupada al notar que su padre entro a la habitación exaltado - No es nada mi niña, es solo que me asuste cuando no te encontra en tu habitación - dijo el hombre mientras revolvía el cabello de la joven, esta simplemente río ante la acción de su padre - Simplemente quise levantarme un poco más temprano a lo habitual - decía la chica aún entre risas por el desastre que había hecho su padre en su cabello - Bueno hija, será mejor que bajemos a desayunar ya que estas despierta - dijo el hombre a su hija como buen padre - Si, vamos - contesto la muchacha mientras tomaba del brazo a su padre y mostraba una sonrisa; ambos salieron de la habitación juntos como lo hacían todos los días. A pesar de la ausencia de su madre en su vida, Marinette nunca mostro inconformidad con el cariño que su padre le brindaba día a día; y si era verdad; el Sr. Dupai se encargo de que su hija nunca careciera de amor paternal, aún después del fallecimiento de su esposa Sabine. Y así se encargo el solo de la crianza y cuidado de su hija, dandole siempre lo mejor a su pequeña.

 Y así se encargo el solo de la crianza y cuidado de su hija, dandole siempre lo mejor a su pequeña

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Rosa negraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora