Mi Novio Sicario ( Mario Bautista Y Tu__)

Capitulo 25

Despues de haber salido de ese lugar mas confundida de lo que ya estaba nos dirijiamos hacia algun lugar dónde hubiera comida.

-Podrias apurarte?-le hable a ulises mientras le golpeaba con una envoltura de chocolate y la cual el esquivo.

Si no se apuraba terminaria comiendomelo a el.

-Ya voy, tranquila, no veo pof que usar la agresividad.-

-pues apresurate.-el bufo.

Despues de 30 minutos de camino, gruñidos de parte de ulises llegamos a un pequeño local de comida.

-Al fin!-grite.

El lugar era no era chico pero, tampoco era grande. Tenia mesas adentro y afuera, pero nosotros decidimos afuera.

Tomamos asiento y un chico de nuestra edad se acerco a la mesa.

-Buenas tardes, que van a ordenar?- pregunto, a si que trabajaba aqui, bueno eso es obvio.

-humm...dos hamburguesas, 2 ordenes de papas y un pastel de chocolate.-dije sonriendole, mientras dejaba el menu sobre la mesa.

-Como sabias que pediria eso?-hablo ulises.

-En realidad, eso es para mi.-

-Enserio?-

-Enserio.-le sonrei.

-Comelona.-me miro entrecerrando los ojos.

-Gracias.-

Ulises pidio su comida y mientras esperabamos estaba platicandome algo, la verdad no le puse atención.

Estaba tan concentrada pensando en Mario, no se como es que no logro sacarlo de mi cabeza.

Hablando del rey de Roma...

Mario iba entrando al restaurante, traia su tipica chaqueta negra, unos pantalones negros, una camiseta cafe y unos vans del mismo color, y esos lentos con los que se veia tan sex...

QUE ESTOY PENSANDO?

Se sento en la mesa de adentro y saco su telefono, pero fue interrumpido por la mesera. Levanto su mirada.

Podia verlo por la gran ventana.

Ella le sonreia coquetamente y el...

HACIA LO MISMO!!

Maldito...nisiquiera se por que me interesa.

Yo creo que mi mirada era tan intensa que volteo a verme y sonrio.

Fruncio el seño al ver que mi cara se veia molesta y con el seño fruncido y luego sonrio con arrogancia se dio cuenta que me molestaba que esa maldita puta le estuviera coqueteando.

Ella se retiro sonriendole descaradamente.

Tienes que calmarte ____

-_____? Estas escuchandome?-ulises movio su mano frente a mi cara.
No me habia dado cuenta que ulises seguia hablando.

--Que?.

-Aqui esta su orden.-llego el chico.

Dejo la comida en su mesa y entonces se me ocurrio algo...

Le daria de su propia medicina...

-Disculpa, como te llamas?-le hable, mientras le daba una sonrisa coqueta.

Mire discretamete hacia Mario, esta mirando hacia aca y no se veia feliz.

Se veia realmente molesto.

-Me llamo, chad.-sonrio.

-Bueno chad, crees que puedas a compañarme a comer? En realidad no podria comerme todo esto yo sola-

-No lo se, estoy trabajando.-

-Anda.-hice un puchero

-De acuerdo, tomare mi descanso antes.-dijo.-ire avisar al gerente. Y se fue.

-Que fue eso?-pregunto ulises con la boca llena.

-Nada, ahora cambiate de mesa, luego te explico.-

-Ahora ni comer agusto puedo.-entrecerro los ojos negando con la cabeza mientras se levantaba para irse a otra mesa con su comida.

-Listo.-sonrio sentandose dónde segundos antes estaba ulises.-

Voltee a ver a Mario miraba hacia chad con tanta furia que hasta daba miedo.

Y llego la hortible mesera.
Ella le sonrio como lo habia hecho minutos antes mientras se inclinaba enseñandole sus operados pecho mientras le ponia su comida sobre la mesa.

Y Lo Peor Es Que El Le Sonreia Igual!!

Ella le entrego la cuenta y le dio un papelito, deseguro era su numero.

-Estas bien?-me pregunto chad.

-Si, solo...me distraje- el asintio.

Pase hablando con chad mas de media hora, era un tipo agradable despues de todo.

Mario no despegana su mirada de nosotros seriamente enojado.

Y ulises no dejaba de mandarme mensajes de texto de que me diera prisa o lo escuchaba bufar ya que estana una mesa atras.

-bueno, fue un placer conocerte ____, pero tengo que regresar al trabajo.-chad se paro de la mesa.

-Igualmente.-le sonrei

-Espero volver a verte, en realidad me pregunta si tu...-estaba nervioso.

-si yo?...-lo anime.

-Si tu querias salir conmigo otro dia.-

-Claro.-le sonrei.

-Oh por cierto, toma- me entrego un papel.-este es mi numero.

-Gracias, te llamare.-mire hacia Mario me maldeci por no traer una camara su cara esta roja de la furia. Esta celoso. Sonrei.

-Adios.-se despidio.

Entre al baño me estaba aguantando desde hace rato.
Camine por el pasillo cuando un mano me agarro del brazo.

-Te gusta jugar, eh?- me acorralo contra la pared.

Era Mario.

-Tal vez.-sonrei.

-No debiste hacerlo-sonrio.

-Por que?

-Yo siempre gano.-

Antes de que pudiera hablar Mario habia chocado sus labios contra los mios.

Era un beso apasionado y senti como si ya hubiera probado esos labios.

Dulces y carnosos labios.

Tenia que admitirlo.

Mario me gusta, me encanta.