One Night |Justin Bieber| +16 EDITANDO

Epílogo

Miranda POV'S

Sus manos llevaron mis pies a su cintura, él deslizo el condón a través de la potente erección. Me quede ojiplatica al verla, morada y venosa. Y bastante grande.La tomo en sus manos y la guió a mi apertura empapada. Jugueteó con su polla, frotando la gran cabeza con mi manojo de nervios, el clítoris. Gemí y mordí mi labio inferior con fuerza.

-¡Dios, Justin!

-¿Qué quieres? Pídemelo.

Ordenó y frotó con más fuerza. En este momento entiendo la clase de hombre qué es en la cama, le gusta escuchar a sus prezas pedir más y más.

-A ti, dentro de mí.

-¿Cómo?-provocó con su voz gruesa y jadeante.

-¡Cállate, y folláme!-grité desesperada por sus divagues. Él tomó mis caderas y entro en mí de golpe, fuerte. Grité.

Él empezó un vaivén lento y pausado, se movió en círculos. Y vi las estrellas. Miré su rostro; tenía sus ojos enchinados; su boca semi-abierta; y el sudor perlaba en todo su rostro.

Excitante.

Tomó mis caderas y salió de mí, cuando iba a quejarme sentí como me puso delado, justo enfrente del gran espejo de cuerpo entero, él gateó hasta posisionarse detrás de mí. Abrió mis piernas y embistió. Entreabri mis labios y gemí. Cerre los ojos al sentir mi cuerpo hormiguear.

-Abre los ojos nena...

Los abrí lentamente, y me encontre con nuestro espejismo. Podíamos ver como él salía y entraba de mí. Su mano derecha en mi cintura, masajeándola, casi rozando mi pubis perfectamente depilada. Su otra mano masajea mis pechos. Mi cuerpo hormiguea, nuestras respiraciones jadeantes se opacan con el sonido de su polla entrando y saliendo de mí. Arañé su brazo al sentir sus embestidas más fuertes y salvajes. Eché mi cabeza hacia atrás, buscando sus dulces labios. Me besó lentamente, acariciando mi lengua de forma sensual y suave. Mordí su labio inferior, y lo escuché gemir. Mientras recorrió mi cuello con su lengua, sentí las puntas de sus dedos subir lentamente por mi muslo. Jadee al sentir como subía, con la punta de sus dedos rozó mi clítoris, y solté un gemido sonoro, que fue opacado por sus labios suaves y carnosos.

Frotó mi clítoris y mi respiración cada vez era más jadeante y pesada. Mordía y succionaba la piel sensible de mi cuello. Tomó con sus manos mi cintura y me puso de espaldas a él, me tomó por el cabello y elevó mi culo. Y entendí cual posición él quería. Me puse firmemente con mi pecho en el colchón y mi parte inferior apuntando hacia arriba. Con mi cabello enroscado en sus manos salió de mí. Solté un quejido.

Segundos más tarde lo sentí hundirse en mí, sacándome la respiración por un momento.

-¡Oh Dios...Justin!-exclamé sintiendo mi cuerpo convulcionar. Llegando a la cúspide del máximo placer que he podido sentir alguna vez. Mire su rostro rojo, esa vena que tanto había visto en vídeos de él cantando resaltó al costado de su cuello. Sus ojos cerrados, jadeando.

Se apartó de mí, se levantó de la cama y caminó hacia el baño. Escuché el sonido del condón caer en el tacho de la basura. Segundos después salió de allí, completamente desnudo. Dios me perdone por tantas las fantasías explicitas que rodan por mi mente.

Él me miró, con su mirada tan negra y sedienta de placer. Subió a la cama lentamente, y al mismo paso tortuoso gateó hasta mi lado.

Mi respiración seguía jadeante, y destellos de colores electrizantes recorren mi sistema nervioso.

Llego a la altura de mi rostro y nuestras miradas oscuras chocarón, cerré los ojos al sentir sus labios en mi cuello. Chupó y mordio haciéndome jadear y echar mi cabeza hacia atrás.