IX

5.6K 857 135
                                    

Luego de terminar el recorrido y tras un largo viaje (no pensaron que el centro recreativo estuviera tan lejos), llegaron a Jungmun.

-¿Las ves en algún lado?- Preguntó Sehun.

Luhan estiró el cuello para ver si alcanzaba a visualizar a Ha Yoo y su madre. Algo chocó contra la parte trasera de sus piernas entonces, haciéndolo tropezar hacia adelante. Cuando volteó, una hermosa niñita le sonría brillante y la tomó en brazos con una sonrisa similar.

-¡Oppa!- Exclamó Ha Yoo. -¡Eomma, los encontré!

La señora Yoon se abrió paso a través del gentío con algo de agitación. -Ten piedad de tu madre, Ha Yoonnie, ya no puedo ir tan rápido como tú.- Suspiró y les sonrió. -¿Cómo la pasaron? ¿Fue bonito?

-¡Lo fue!- Asintió Luhan con emoción. -¿Sabía que la lava es negra porque es rica en ferromagnesianos?

-No lo sabía.

-La lava no, sino el magma, son cosas distintas.- Aclaró Sehun. -Y tú,- Vio ofendido a su hermanita. -Corres directamente hacia él y a mí me ignoras ¿eh?

Ha Yoo se aferró al cuello de Luhan. -Luhannie oppa es más divertido que tú.

-Que te lleve él a pasear cuando estés aburrida.- Le sacó la lengua.

-Al menos él no se quejará todo el tiempo.- Lo imitó.

Luhan se rio. -¿Cómo les fue a ustedes?

-¡Ha sido increíble!- Dio un aplauso la otra. -Hemos podido ver un montón de flores bonitas y juntamos conchas marinas por la costa. El lugar era precioso.

-¡Luego fuimos a Sehwa!

-Así es, es otro recorrido aparte. Estaba cerca de Seongsan, así que lo hicimos también.

-¡Cruzamos caminando!- Siguió contando Ha Yoo. -Pero el ahjussi dijo que la marea subiría, así que tuvimos que volver.

Luhan la dejó en el suelo otra vez. -Espero que no estén cansadas, aún nos faltan cosas por ver.

El centro turístico era enorme. Recorrieron una aldea folclórica, la catarata Cheonjeyeon, un hipódromo, el puente Seonimgyo y más. Ha Yoo descubrió que había un museo dedicado exclusivamente a osos de peluche y casi imploró de rodillas ir a verlo. Luego de eso, la señora Yoon se excusó para descansar un rato en una cafetería pintoresca, tomó a su hija con ella, así que Sehun y Luhan siguieron adelante hasta el templo Yakcheonsa a unas cuantas cuadras de allí. Las luces ya estaban encendidas dado que estaba oscureciendo. Recorrieron observando en detalle la compleja y sorprendente estructura.

O al menos uno de ellos lo hacía. Sehun sólo podía ver a Luhan de reojo.

-Hyung.- Lo llamó, tocando distraídamente un enorme pilar de madera. -Tú puedes venir a este tipo de lugares todo el tiempo, pero no parece que hayas estado aquí antes.

Luhan meneó la cabeza, demasiado concentrado en el templo como para prestarle más atención que esa.

-Es... curioso.

El otro se encogió. -No tengo a nadie con quien venir de todos modos.

-¿Qué hay de Baek?

-A Baek lo conocí el año pasado, al igual que al resto de los chicos.

-¿Y tu prima?

Luhan arqueó una ceja irónica. -Yan Yan sería capaz de cualquier cosa con tal de evitar estar conmigo.

-¿Por qué?

-Ella me odia.

¿Existía alguien capaz de odiar a Luhan? No lo creía posible.

Arrebol (HunHan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora