Capítulo 4

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No es posible tengo que cambiar de oficina ahora mismo, largarme de  aquí, pero soy nueva tendré que acostumbrarme a verlo de nuevo
No importa voy a seguir con mi trabajo ya solo me faltan 8 bosquejos, quiero terminar cuanto antes e irme a casa, con solo verlo ya se me revolvió el estómago.
Estoy terminando el último bosquejo cuando me doy cuenta que ya no hay nadie en la  oficina, entonces me decido a guardar e irme a buscar mi BMW. Llego al apartamento y Sophia me recibe con un gran abrazo y una caja un poco interesante, me acerco ha abrirlo y me doy cuenta que dentro de la caja hay dos cachorros uno era negro y el otro café canela, casi lloro cuando los vi (aunque sólo uno era mío) ya los amaba y por lo visto uno de ellos me escogió a  mi. Luego Sophia me contó que los encontró abandonados en una caja, se me partió el corazón cuando escuché eso no se como los pueden abandonar. Yo me quedé con uno de ellos, fue muy difícil pero el negro me escogió  y de inmediato el me siguió
Sophia me contó su día y me dijo que fue al campus para recoger información, yo por mi parte pase callada mientras preparaba la cena, pero no podía más y grite:
¡Gustavo está trabajando en la misma oficina que yo y no lo sabía!
Sophia me vio y me abrazó (lo único que me faltaba para llorar)
Es imposible no hacerlo si a esa persona la iba a ver todos los día por el resto de mi estadía en esa empresa. Luego de mi momento sentimental nos fuimos a ver pelis junto a nuestros perritos, yo caí dormida en la primera película así que no se que paso después.

Estúpido y Amado DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora