Mike Is A Killer •5sos•

Ghost

Ese día fue el último de mi existencia tal vez...
Todo sucede en cámara lenta, el hombre malo me tiene en brazos, vamos hacia lo que sería mi sótano, el lugar en donde mis víctimas pagarían sus delitos.
- Michael Clifford, quien pensaría que después de todo mi hijo ha de ser semejanza mía? Mírate, indefenso...
- Suéltame maldito bastardo!
- No lo haré Michael...
- Déjame en paz! Mi vida está completa sin ti!
- Por que razón me pides que te deje de nuevo? Que acaso no es lo que anhelaste siempre? Un padre
- Tu no eres mi padre!
- Y, como sabes eso? La sangre no se niega Michael, eres idéntico a mi.
- Suéltame te eh dicho!
El hombre de verdes ojos me puso boca abajo en el suelo.
Después de eso el mundo se nubló.
Sentía la sangre irrigar mi cabeza, esta empezaba a doler, tenía los ojos tapados, ahora sólo dependía de mi sentido del oído para saber como se movía mi padre.
- El cazador fue cazado Michael.
Pasaba algo de metal por mi cuerpo, era plano y sentía el filo amenazante en mi piel.
- Como se siente Michael?
Dime que sientes al saber que tu vida depende de alguien que te odia con cada milímetro de su ser?
Al escuchar semejante sermón caigo en cuenta realmente de cual es la situación. Estoy aquí seguramente colgado de cabeza con un loco a solas en el sótano de mi propia casa...
Seré tal vez inconsciente y puedo decir que idiota también, seré alguien con errores pero hay algo que no permitiré nunca y eso es que alguien se atreva a tomar mi vida.
Mi padre, aquí el ser que detesto tanto pero que de algún modo lo quiero conmigo, siempre me hizo falta y, aún en estos instantes agradezco que esté aquí y haya dado la cara.
- Si piensas asesinarme hazlo de una buena vez, total no creo que alguien vaya a extrañarme.
Dije con la voz firme y cargada de odio.
- Crees que voy a asesinarte?...
- Lo harás así que termina con esto, es un fastidio tener que aguantarte.
- Michael Clifford .... Dime como fué tu infancia?
- A que mierda viene eso?!
- Contéstame!
Dijo con rabia y encajó el objeto filoso en mi pierna.
Dolía demasiado pero no lo suficiente, no hay algo que me duela más que Kellin, así que puedo con esto y si piensa que ese bastardo va a hacerme hablar está perdiendo su tiempo.
- Habla! Joder Michael si que te gusta sufrir...
Dijo deslizando tortuosamente el instrumento con filo, mi piel se desgarraba a su paso lento, las gotas de sangre se iban formando en chorros y mi voz quebrada sonorizaba el lugar.
- Es tu última oportunidad, Cómo fué tu infancia?
Preguntó el hombre de ojos verdes con impaciencia el la voz, yo tardé unos segundos y meneé la cabeza.
- Así no funciona conmigo, si quieres hablar debes bajarme y destaparme los ojos.
- Tu no vas a decirme que hacer, maldita sea sólo responde puberto de mierda!
- Bien! No vas a hablar como persona civilizada conmigo entonces... Mátame!
Jodido anciano de mierda!
Vamos si tanto me odias hijo de puta mátame! Maldita sea tómate ese par de huevos y quítame la vida!
Hubo silencio sepulcral, unos minutos eternos en donde no sabía si quiera en donde se encontraba mi padre.
Mientras gritaba con todo mi odio, movía mis manos a manera de poder soltarme del amarre y lo conseguí.
Una risa baja y un sonido de desaprobación salía de la boca de mi padre.
- Michael... Te has soltado! Genial! Tengo un hijo bastardo muy listo... Pero, por que no te dejas caer?
- Porque se que algo no muy bueno me espera debajo de mi.
No seas cobarde y enfréntame.
No pasaron más de 5 minutos después del reto que le hice a mi padre cuando escucho los quejidos de Matt.
- Ese maldito bastardo se ha despertado...
Dijo mi padre a la par que podría escuchar como se alejaba un poco su voz.
Escuché más quejidos y después un golpe seco, pasos y otro golpe seco.
- Levántate!
Mi padre grita molesto.
Después escucho sus pasos rítmicos hacía a mi. Siento que me levanta en brazos, y comienzo a retorcerme.
Siento contacto con una superficie lisa y fría, después tengo en frente los ojos saltones de mi padre, me analizaba y después su mirada cambió a una retadora, de tal forma que así serán las cosas con el... Tengo que leer sus micro expresiones para poder saber que demonios piensa ese loco.
Comienzo a analizarle también, sus arrugas profundas en el rabillo del ojo, su seño marcado, rasgos afilados en el puente de la nariz, pómulos y mandíbula sobre saliente, tengo su rostro bien grabado en la mente para cuando vaya a declarar a la policía le capture cuanto antes y así deje de estorbar en mi vida, aún tengo cabos que atar.
Una línea dura y obscura apareció entre los labios de mi padre, alejó su rostro lentamente y se relajó.
Me hizo señal para que me levantase, pero sólo me quedé sentado encima del congelador para carne.
- Michael si en verdad asesinaste a aquel chico que encontraron con el intestino conectado a la boca deberías decirle a tu viejo padre.
Intentó ser amable y negociar los detalles de aquel trabajo pero no saldría nada de mi boca, confesarle aquellos actos sólo me hará vulnerable a su voluntad.
- No te diré nada, por que yo no lo hice.
- Vas a negarlo?
Una carcajada sarcástica lastimó mis oídos unos segundos tardó en apagarse y mi padre me veía con una pizca de burla, dobló entones los brazos por encima de su pecho y se acercó lentamente.
- Tu eres un joven cobarde, insolente, alguien inútil con una vida de miseria, no tienes nada que puedas perder, vives sólo y vacío, sólo mírate tan miserable y patético... Por qué alguien como tu no haría un asesinato como ese? Serás imbécil e incluso el mayor de los idiotas pero se que tu eres muy listo, joder sabes que la policía no tiene ni idea vaga de quien cometió aquel crimen? Eres un genio Michael, engañarás a todos menos a tu viejo. Ahora me dirás lo que le hiciste a ese chico!
- Yo lo haré? Que inesperado, no sabía que veías el futuro inmediato... Sólo que te has equivocado... Yo no diré nada.
- Es una maldita orden! No te pregunte si lo harías!
- Por que es que sospechas que yo asesiné a ese joven?
- Eso no te importa! Oh claro a menos que no tengas el valor suficiente para hacerlo, ahora entiendo por que es que no te has suicidado, eres un cobarde tanto que ni siquiera te atreves a cobrarle a la vida todas las malas pasadas que te ha hecho.
Dijo pegando con sus puños la tapa del cofre para carnes,  me mira furioso pero no me da miedo lo que él pueda hacerme, me levanté con la vista fija en sus ojos, levanté mi índice hasta su nariz y le aparté de mi.
Me dirigí hasta donde Matt yacía en el suelo bastante atolondrado, le levanté sobre una mesa de trabajo de acero, lo acosté boca arriba, después conseguí cinchas y le amarré manos y pies a los semibarandales de la  mesa.
Con cuidado fuí quitando una a una las prendas que cubrían su cuerpo, después procedí a hacer un tapón con las calcetas de Matt y se lo puse en la boca haciendo presión con su camiseta atada por detrás, Matt tenía cara de terror, entonces me dispuse a buscar mi caja de herramientas saqué un par de martillos, vendas, hilo, auja, pinzas, guantes y demás cosas para llevar a cabo un trabajo diestro y pulcro.
Después tomé una bolsa de suero con sonda y catéter, coloqué el suero como es debido y comencé a esterilizar la zona que iba a trabajar.
Abrí una capa de piel de la cavidad abdominal con el escalpelo más grueso, después comencé a abrir una a una las capas siguientes de piel, el tejido adiposo del individuo ya era notable, los intestinos, estómago y parte apenas muy sutilmente un pedazo del diafragma se asomaba.
Después retiré el tramo final del colon cuidando que su contenido no se vertiera en la zona que ya había saneado, desconecté el estómago, y comencé a limpiar de nuevo.
Mi padre estaba espectante, ante el trabajo medianamente rápido que hacía.
Entonces empecé una sutura simple con una cruz final, conecté el estómago con el intestino este conducto no permitiría la excreción y así se haría un mejor aprovechamiento de la materia fecal. Terminé aquello y me puse a cerrar la cavidad ventral con una sutura simple con doble cruz al final, limpié la sangre y coloqué un suero.
- Ves? Eso no es tener valor, no es ser alguien poderoso por tener la vida de alguien en tus manos, estas acciones te hacen mediocre, alguien lacivo para la sociedad. Esto no es para aplaudirse, esto es para encontrarse consigo mismo a pesar de ser un acto cruel y vengativo.
- No me vengas con ideas vagas, esto que has hecho sólo prueba que eres mi hijo, somos idénticos. Eres la misma basura despreciable que tu padre.
- Tu y yo no somos iguales!
- Que no? Y como es que sabes eso pequeña sabandija?
- No tienes cara para decirme sabandija!
Nos acercamos demasiado, estamos a una distancia potencialmente peligrosa, nos miramos con rabia.
Entonces el con un movimiento brusco coge un escalpelo e intenta apuñalarme, yo sacó una jeringa de mi bolsillo, mientras la pelea por mantenerme intacto se hace más salvaje, lleno un poco la jeringa de aire y le aplicó el aire a mi padre en una arteria del cuello.
- Uno, dos... Tres, cuatro y cinco!
Digo con una sonrisa amplia en mi rostro, maté a mi padre.
Arriba se escucha ruido...
- Michael...
Canta mi madre desde la sala.