3. Nunca Jamás

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Abrí los ojos lentamente, lo veía todo borroso. Me sentí incomoda y pensé que era normal ya que me había quedado dormida en la ventana. Apoyé mi mano en el suelo y note un tacto arenoso, como tierra. Abrí los ojos como platos y vi que no estaba en mi habitación, sino en una especie de selva y estaba tumbada encima de un montón de hojas.

Estaba alucinando y lo único que se me ocurrió fue levantarme. Me incorporé un poco y puede ver que a mi lado estaba el libro de Peter Pan y el cocodrilo de peluche, y enganchado en mi pie, el bolso con el que había estado jugando anoche mientras leía. Me levanté, cogió el bolso y me lo puse, y metí el libro y el peluche dentro. Mire alrededor, no sabía dónde estaba ni a donde ir. Empecé a caminar sin rumbo, dando vueltas. Anduve durante unos minutos que me parecieron eternos, todo me parecía igual, solo veía árboles, arbustos y plantas.

Pensaba en cómo había llegado allí y pensé en la más estúpida idea: ¿Y si cuando me quede dormida la sombra vino y me trajo a Nunca Jamás? No, es imposible, seguro que esto es un sueño y en cualquier momento me despertare, y espero que sea cuando antes porque me estaba empezando a molestar el hecho de que no hubiera nadie. Caminé hasta que la vegetación desapareció para aparecer una playa.

-¡Estoy en una maldita isla!-grité aunque no creo que nadie me escuchara.

Me senté en la arena y miré al mar que se extendía por todos lados. Ya no podía negar la posibilidad de que estaba en Nunca Jamás, pero no quería creerme, era imposible, solo era un cuento infantil. Saqué el libro del bolso y me quedé mirándolo. Lo abrí por donde me había quedado y seguí leyendo para distraerme de mis pensamientos. Wendy, John, Michael y Peter habían llegado volando a Nunca Jamás. Pase la página y no puede evitar sobre saltarme cuando vi entre las páginas lo que parecía un mapa. Lo cogí y lo mire varios minutos, sin salir de mi asombro.

Había varios sitios marcados, como la laguna de las sirenas, el árbol de las hadas, las cuevas del eco, la isla calavera y otros más. También puede ver una "x " en medio de la isla. Estando en Nunca Jamás supuse que debería ser el campamento de los niños perdidos, si es que había alguien en la isla.

No tenía nada mejor que hacer, así que decidí ir al campamento, el problema era que no sabía dónde estaba el Norte. Había muchas playas en la isla y no podía saber en cual estaba para orientarme, seguía en el mismo punto de antes. Bajé la cabeza deprimida y vi mi colgante.

-¡Pues claro! La brújula del colgante.-la miré y era increíble pero señala el Norte.-Por ahí.

Me puse en camino y me adentre en la selva. Caminé durante aproximadamente 1 hora entre la vegetación siempre siguiendo el Norte, de vez en cuando miraba el mapa para saber si iba bien. Ya debía de faltar poco, sentía el cansancio y no creo que mis piernas puedan soportar más. Debía ser medio día, el sol estaba en todo lo alto.

Volví a mirar el mapa para asegurarme de que iba por buen camino cuando un escalofrío me recorrió todo el cuerpo y sentí como la idea y las ganas de pegarle algo pasaban por mi cabeza. Era imposible, la "x " se había movido y había aparecido en la otra punta del mapa. No pude aguantar las ganas de gritar y chillar, y de hacer la pregunta que se pasaba por mi cabeza.

-¡Ahhh! ¿¡Donde demonios estoy!?-grité lo más alto que puede sabiendo que nadie me escucharía.

-Estas en Nunca Jamás.

•Believe in Me• | •Peter Pan/Robbie kay• |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora