Seres vivos medio muertos, individuos que buscan el avance dentro del retroceso, animales carecientes de personalidad y equívocos de su existencia, somos seres tan estúpidos que soñamos con metas o fantasía inalcanzables, habitantes tan huecos que busca encajar, tantos niños con problemas abrumadores y tantos adultos inmaduros e incoherentes.
Somos todos tan parecidos que buscamos destacar, somos la misma mierda que algún día nos dieron de tragar, somos todos uno mismo pero con diferente finalidad.
Somos tan interesantes y especiales que terminamos decepcionado a todos, somos tan idiotas que creamos ilusiónes, somos un gran universo que contiene galaxias en la pupila de unos ojos, somos tanta vida que acabamos con la misma en cuestión de segundos, tenemos tantos rasgos únicos y peculiares que ignoramos, todos tenemos mundos de manías, deseos y sueños escondidos en alguna parte de nuestra memoria, tenemos tanto y mostramos tan poco, cual es el temor de mostrar cada cicatriz adquirida en alguna batalla, o de gritarle a él mundo cada uno de nuestros miedos, por que tememos a enamorarnos de los defectos, cual es el problema de ser nuestra propia causa y efecto.
Somos seres trascendentales enraizados a ideales falsos y fantasías truncas, enamorados de lo cotidiano y excluyentes de lo peculiar, tan aferrados a los roles de esta ignorante sociedad, somos tantos mundos y misterios que durante nuestra muerte se darán a conocer.
Tenemos tanta necesidad por imponernos ante la naturaleza de nuestro mundo que nos terminamos convirtiendo en los verdugos del mismo.
Somos seres trascendentales estancados en la comodidad.
Somos seres infelices tratando de demostrarnos lo contrario.
