Mi Verdadero Ser

cap 11

Por varios días James había tratado de hablar con Lily, pero no importaba lo que hiciera parecía que ella no estaba sola, siempre rodeada de personas, o con alguna amiga.

Pronto seria fin de semana, así que le lanzo una nota en su última clase del viernes, la cito a orillas del lago negro el sábado en la mañana, a esa hora todos se iban a Hogsmeade por lo que podrían estar solos.

Después de desayunar esa mañana de sábado salió del castillo y comenzó a caminar hacia el lago en silencio, a los pocos minutos vio a Lily corriendo tras él con una enorme sonrisa, realmente era muy bella, le dolía recordar la verdad que le había dicho a Severus, era difícil de creer que todo ese tiempo solo lo hubiera estado utilizando.

- James – lo saludo y se abrazó a su cuello enérgicamente – fue una repentina y agradable petición, hace mucho que no tenemos una cita a solas.

- Lily – con gentileza se soltó del abrazo y la alejo un poco – no es una cita, yo... quería hablar de algo contigo.

- Es algo importante? –

- Podría decir que es muy importante – comenzó a temblar un poco, era difícil decirle aquello cuando el había sido el más insistente en empezar esa relación.

- Suenas raro – ella tomo sus manos con un gesto preocupado – pasa algo malo?

- A mí no – dijo respirando profundo – pero estoy seguro de que esto no te gustara

- Que pasa? – su tono vario de preocupación a algo que podría definir como irá.

- Vera... creo que lo mejor sería terminar con nuestra relación – creyó que lo mejor sería ser directo.

- Pero que dices? – ahora si podía asegurar que ese tono era enojo puro – tu insististe en salir conmigo, y ahora me estas dejando.

- Yo... lamento mucho eso, no fue mi intención acerté sentir incomoda con tanta insistencia, y realmente me gustabas mucho ... creí que podrías ser el amor de mi vida.

- Entonces no lo soy, es que hay alguien más...? – sabía que terminar seria difícil, pero no esperaba que tanto.

- No quiero mentirte Lily, eres una persona muy buena, pero si, estos últimos meses conocí a alguien que me entiende, tenemos muchas cosas en común y nos llevamos muy bien – recordar a Severus lo hizo sonreír sin darse cuenta, pero se recompuso pues no era el momento – tú me gustas mucho, pero nos estamos engañando, no tenemos muchas cosas en común y estos últimos meses no hemos hecho más que pelear, tú te mereces a alguien que de idolatre porque eres muy bella y amable.

- Y eso a ti no te basta – vio los ojos de Lily humedecerse – porque no soy suficiente para ti.

- No es eso – no debía, pero quería reconfortarla – eres bellísima, amable, lista... mereces a alguien que sepa apreciar todo eso.

- Pero yo solo te quiero a ti – comenzó a sollozar y lo abrazó – pensé que nos casaríamos, ya hasta había elegido el nombre de nuestros hijos.

Pensar en eso hizo que se le erizaran todos los bellos, por su mente no había pasado la idea de tener hijos con Lily, pero la ligera imagen de un par de niños de cabello lacio y oscuro, con piel pálida y sonrisas radiantes... eso lo hacía feliz. Agito la cabeza tratando de alejar esos pensamientos, no era el momento.

- Lamento mucho esto Lily – la alejo de su cuerpo – es lo mejor.

Escucho un golpe y comenzó a arderle la mejilla, le había abofeteado, bueno, era algo que esperaba.