Capítulo 6~Guardián~

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*********************Comenten y estrellita para saber que leen*****************

El silencio empieza a separarlos. Lexi teme que lo haya ofendido, pero está decidida a escuchar su respuesta—

-¿Qué crees que soy?—

-Un vampiro...-- Responde ella y el joven curva los labios en un gesto de melancolía—Puedo... ¿Verte en tu verdadera forma?...

Susurra ella, repentinamente. El joven no se inmuta, y al cabo de unos segundos se gira hacia ella. Ni siquiera lo ha pensado dos veces. Su rostro adopta aquella imagen espantosa de colmillos imperfectos, ojos rojos como sangre; y hundidos con venas sobresalientes por su rostro. "Es espantoso" Lexi se estremece y está a punto de retroceder, pero se contiene. "No le tiene miedo" No le va a hace daño ¿No es así?

El joven retorna a su normalidad y Lexi se acerca aún más. Ni siquiera lo había notado antes.

-No respiras—Susurra ella y extiende la mano al pecho de él—Tu corazón...--

-No late—Le responde él arqueando las cejas—Mi piel es fría. Es normal, Lexi. Estoy muerto... o por ahora lo estoy. Soy un híbrido... no es lo que tu crees...—Pronuncia en un murmullo—

Lexi frunce el rostro—

-¿Por ahora? ¿Qué clase de hibrido? ¿Qué quieres decir con ello?—

El joven permanece en silencio, y no parece dispuesto a responder. Entonces, Lexi pregunta lo que en su mente ha estado rosando desde hace mucho—

-Aquella vez en la cueva... ¿Es la primera vez que nos hemos visto?—

-Así es—Le responde él si ningún rastro de duda—

Lexi se halla más confundida—

-Pero yo... te he visto entre sueños... te he soñado desde que tenía...--

-Es natural—La irrumpe- Lexi... eres más de lo que crees. Tú no pereces a este lado—

Lexi frunce aún más las cejas—

-¿A este lado? ¿Qué quieres decir con ello? ¿De qué me estás hablando? ¿Tú sabes algo de mí? Dímelo—

El joven gira el rostro hacia ella pero se queda en completo silencio.

-Lo sabrás a su debido momento. Aun no...-- Ha sonado tan brusco que a Lexi le ha provocado un dolor en el pecho. Parece renegarle.

-Yo decido cuando es el momento adecuado—Le responde ella, pero él, esta vez, no le contradice. Solo suspira. Se siente un ambiente denso entre los dos, y Lexi está a punto de dar media vuelta, pero en menos de un segundo; él ya la tiene sujeta por las mejillas.

Su corazón se desboca y su aliento abandona sus labios. Inmediatamente cierra lo parpados y luego percibe sus labios suaves, amables... y fríos posar en los suyos. La joven se aferra a él y lo braza por la nuca, entonces la obliga a retroceder hasta subirla sobre la cama. Una caricia por sus costados la estremecen, y el calor la inunda. Acarician sus labios entre sí y se pierden entre las sabanas. El joven le besa en la mejilla y luego solo la recuesta a su lado—

-Solamente... quédate aquí—Le murmura al oído. Lexi se queda inmóvil. Le es complicado respirar. Solo quiere seguir besándolo hasta que se quede sin aire, sin embargo, estar con él, es aún más apremiante. Lexi esboza una sonrisa, y se halla apunto de decirle buenas noches, cuando percibe un pequeño detalle—

-¿Cómo te llamas?—Le murmura, pero la respuesta nunca llega. Así que solo se quedan dormidos.

Una brisa pasa por su costado. El peso abandona el lado opuesto del colchón, pero Lexi no se atreve a levantarse. Finge que duerme.

SUEÑOS DE UN FENIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora