Capítulo 3~ dieciocho años~

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*********************************DIAS DE ACTUALIZACIÓN: MARTES Y VIERNES************** Los dias de actualización variaran dependiendo el Numero de Lectoras************************************

La muchacha camina de regreso al campamento con cuidado. Encontrarse con alguna criatura extraña como la que la acababa de perseguir, era una de sus mayores preocupaciones, o más bien la segunda. Era complicado quitarse de la cabeza al joven que la había hecho sentirse tan extraña y necesitada a su tacto. Jamás lo había visto "Era incomprensible aquel sentimiento"

Tarda alrededor de media hora en dar con el lugar en donde sus amigos se hallaban. Quizás esperaba encontrar a su hermano preocupado, o todos armando alguna clase de búsqueda por ella. Después de todo, aquella criatura había producido rugidos que son completamente imposibles de no escuchar. Aun peor, un sentimiento de asfixia la invade ante la idea de que aquella criatura haya dado con el campamento de sus amigos. Así que apresura el paso hacia donde la oscuridad se iluminaba. Y allí estaban ellos, riendo alrededor de una fogata, y otros en sus respectivas carpas. Ni un herido y mucho menos alguien que pareciera haber notado su ausencia.

De inmediato llevo la vista hacia Xiumin, quien conociendo su afición por lo sobrenatural, esperaba alguna reacción o estado que indicase que había escuchado algo. Pero nada. Él se hallaba sumido en algún libro que había traído. Lexi no lo comprendía. "Era absurdo" No había ido a parar muy lejos como para que nadie lo escuchara. "O quizás solo lo alucinó, se desmayó y ahora cree que el joven de ojos avellanos que le había arrebatado el aire, era real"

Sintió su pecho desinflarse y a un suspiro escaparse de sus labios. "Su vida era tan aburrida que ahora se imaginaba cosas para sentirla más emocionante"

Caminó en dirección al su respectiva carpa, en donde su mejor amiga Rachel ya hacia descansando.

La silueta de su amiga, se retorció somnolienta—

-¿Lexi?—la llamó mientras ella se acostaba—Vaya. Hasta que te animas a venir. Por un momento creí que te habías acostado junto a Taemin—Vacila ganándose un manotazo de Lexi. Rachel ríe. Se juntaron la una con la otra, abrigándose mientras el sueño las llevaba.

-Rachel...-- Murmura Lexi ante la imagen de aquel joven asomándose por sus pensamientos. Su vientre se retorció, y ella podría jurar que no había sido una alucinación suya... sim embargo... "Nada de aquello tenía sentido"

-¿Ahh?—Murmura su amiga, somnolienta—

Lexi suelta un suspiro y cerró los ojos—

-Nada. Buenas noches Rachel—Eso era todo lo que tenía que decir. No quería hacer pensar a su amiga que ahora estaba loca.

Una gran fiesta de cumpleaños se organizó en su casa, la cual quedaba a las afueras del bosque. Sus padres lo habían consentido, y su hermano Minho junto a su mejor amigo, Taemin, habían sido los organizadores de esta fiesta sorpresa organizada. Cumplía dieciocho años. Unos largos y hermosos dieciocho años. Muchos asistieron, aunque la mayoría de ellos eran más conocidos de su hermano que de ella misma. Aun así se divirtió. Taemin no la había dejado toda la noche, pero en un descuido suyo se escabulló hacia el patio, el lugar en donde se veía el interior del bosque. Camino silenciosa apoyándose en el muro de piedra que hacía a un lado, y se vio parada observando el cielo iluminado por las estrellas dispersas en constelaciones. Hacia una brisa ligeramente fría que se colaba por debajo del vestido ceñido azul que tenía encima. Los pies los llevaba descansos porque los tacones altos la mataban, además se escuchaba la música a todo volumen, aún.

Lexi respira hondo, cierra los ojos y exhala. Y luego volvió a abrir los parpados, y el aire se le quedó atascado en los pulmones. Su cuerpo se estremeció y todo lo demás pareció desaparecer. Había una figura perdida en la oscuridad, y solo unos ojos avellanos se distinguían. Increíblemente sus pupilas brillaban como los de un gato en la noche. Pero ella lo sabía, se trataba del mismo joven que había visto en aquella cueva. "Era él"

Permaneció allí, observándolo mientras aquel hacia lo mismo. Se sumergió en aquellos ojos mientras el corazón le golpeaba el pecho y perdía la noción del tiempo—

-¡Eh! ¡Preciosa!—La voz de Taemin la llamó y ella volteo hacia él, distinguiéndolo caminar hacia ella con una lata de cerveza en la mano—Escapándote como siempre. ¿No es así? Vamos ¡Es tu cumpleaños!—Le habló cariñosamente, pero ella regresó la vista hacia el bosque profundo, no obstante aquellos ojos que la observaban ya no se hallaban. "Él se había marchado"

Quiso correr hacia el interior del bosque, pero la mano de Taemin ya le sujetaba la muñeca.

-¿Lexi?—la llamó y ella parpadeó aun perdida en aquellos ojos avellanos.

-¿Ah?—Farfulló—¿Decías algo?

Taemin sonrió cálidamente colocándole la mano tras la espalda---

-Ven, regresemos a tu fiesta. No me harás un desaire. ¿Verdad?—Le guiña un ojo derecho y ella suelta un suspiro. Como detestaba estar rodeada de tantas personas.

Lexi pudo al fin escabullirse a su cama alrededor de las tres de la madrugada. Esa noche se había quedado perdida en el claro de la luna. Esta noche había luna llena y era el último día de luna en este periodo. La chica cayó en profundo sueño del que parecería jamás despertarse, no obstante un calor que ardía y no la consumía, la invadió. Apretó los labios y su cuerpo se contorsionó entre sueños... un resplandor rojo como el fuego iluminó su cuerpo, y así fue como todo iniciaría...

Quizás eran más de las seis de la mañana. Se hallaba acurrucada en el pasto, pero la joven no tenía frio. Rodó en el paso y estiró los brazos. De pronto abrió los parpados y un grito salió de su garganta.

-¡Santo Dios!—Grito la chica empujando al joven que se asomaba contra ella. Se trataba de Xiumin-- ¡¿Qué ocurre contigo?! ¿Es que no te han enseñado a no entrar en una habitación sin el consentimiento del dueño?! ¿Qué te pasa?—

Xiumin mostró su blanca sonrisa y enseguida levantó los brazos para tomar asiento junto a ella—

-Interesante habitación—Vacila él mirando el espesor del bosque—No sabía que te gustaba dormir al aire libre y mucho menos que era tu habitación—

-Si. Si. Como sea—Masculló la joven refunfuñando, y dando media vuela. De pronto sus ojos tomaron la luz del día y un golpetazo azotó su pecho. Analizó las palabras de Xiumin con cuidado... "Era correcto" se hallaba en medio del bosque. Para ser exactos, quizás a unos veinte metros al interior del bosque desde su casa. ¿Qué hacia allí?—

-¿Eres sonámbula?—Preguntó Xiumin—

La chica se hallaba aturdida—

-¿Eh? No... ¿Cómo?—

-Quizás lo eres—sonrió él—Quizás y antes has salido de tu casa, pero siempre has regresado dormida... y quizás anoche hubo alguna energía que impidió tu retorno. Era noche de luna...—Lexi parpadeó. "Quizás no debería de escuchar la suposición de Xiumin"—

-De todos modos ¿Qué haces tú aquí?—Le espetó-- ¿Paseos matutinos? ¿Es que me vigilas mientras duermo y me has seguido?

-Paseo matutino—Xiumin suspiró—Anoche hubo algo—Murmura él—Bueno... quizás solo lo aluciné, pero juro haber visto algo—

-¿Qué cosa?—Preguntó ella inmediatamente. Quizás el joven que ella veía, no era parte de su imaginación. "Tenía esperanza"

-Una criatura—Empezó Xiumin con los ojos iluminados—Era de un color anaranjado rojizo... era como el fuego vivo. Santo Dios, creí que mis ojos se quemarían por contemplarlo. Era como un ave...—

El pecho de Lexi se desinfló y se cerró a las palabras de él. "Definitivamente, Xiumin no hablaba del mismo joven que ella anhelaba tanto"

SUEÑOS DE UN FENIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora