Eres mi hogar (Harry Potter) (Los merodeadores)

9. Platicas de tren

Rose no había dado ni tres pasos cuando recordó que no estaba sola.

-Vamos Peter- La pelinegra casi olvidaba que viajaba con Peter.
Y practicamente se lo llevó a rastras detrás de ella.
-¡Hola chicos!- Sonrio Rose a los tres chicos que se encontraban dentro. -¿Podemos pasar?

Los tres chicos asintieron, Peter y Rose metieron sus baules e inmediatamente se sentaron. Por decirlo de alguna manera, ya que Rose casi se dejo caer, con tal de que Peter no le ganara el sitio que quedaba a un lado de Remus.

-Hola Remus- Dijo con una sonrisa.

El chico solo se quedo petrificado, claro que la recordaba era imposible olvidar a una chica tan singular. Intento decir algo, pero no podía decir una sola palabra, no estaba muy acostumbrado a charlar con la gente. "Dile Hola, no seas tonto Remus" No pudo evitar reprenderse mentalmente, estaba apunto de abrir la boca, para pronunciar lo que su subconciente le decía, pero...

-Rosaline creo que....-Interrumpio Peter- tu lechuza esta algo inquieta.

-Mi lechuza esta loca- bufo Rose- creo que tiene serios problemas de comportamiento.- Mientras ponía una fingida cara de aflicción.

-Espero que la lechuza no se parezca entonces a la dueña.- propuso divertido un chico de gafas. A Rose casi se le olvidaba que había mas estudiantes en el compartimiento.

-Uuuh! Espero y eso no sea percibido en Hogwarts sino la lechuza será aceptada por mas tiempo que yo.- Contesto Rose en un tono exagerado de preocupación, mientras observaba al sonriente chico.

-Por cierto mi nombre es Rosaline Ga...- Rose fue interrumpida a mitad de la presentación por los insistentes sonidos de la lechuza.- Cállate lechuza tonta. Falta poco para llegar al castillo.
-¿Como se llama la lechuza Rosaline?- preguntó el cuarto chico.
-No se aún no le pongo nombre, pienso ponerle molestias o quejas. Ya que siempre esta molestando.- dijo en tono serio. Ya que la lechuza era realmente molesta.
-Ponle Quejicus.- propuso el primer chico que habló, Rosaline creyó ver que mas que dirigiendose a ella era mas al otro chico, ya que en los dos se dibujo una sonrisa de burla.

-Creo que nos hemos perdido algo Peter...bueno no importa.- Dijo mientras le quitaba importancia con la mano. -Como dije hace un segundo mi nombre es Rosaline Gaunt. Y el de mi amigo es Peter Pettigrew.-
-Hola- sonrio Peter tímidamente.
-Yo soy Remus Lupin- dijo educadamente dirigiéndose a Peter.
-Yo soy James Potter- dijo el de gafas.
-Y yo Sirius Black- Se presento el ultimo.

-Bueno muchas gracias Sirius y James tomaré en cuenta su recomendación. - Agregó acompañada de un guiño para el par.

Platicaron alegremente durante todo el camino. Pero mientras el expreso avanzaba Sirius no dejaba de preguntarse si Rosaline era igual de insoportable que sus padres, ya que en cuanto escucho el apellido Gaunt, recordo la platica de su madre sobre las sangre pura:
[...]
"Habra hijos de diferentes familias Sirius, desde asquerosos sangre sucias hasta familias como la nuestras...- Decia en tono altanero Walburga Black- debes de estar cerca de los correctos de los Malfoy, los Lestrange, los Gaunt, todos familias de sangre pura."

Intentaba sacarse eso de la cabeza pero era inevitable pensar que ella al igual que él seria inevitablemente otra Slytherin.

Compartieron algunas cosas sobre su vida, lo que les gustaba y unas tantas cosas sobre Hogwarts:

-Es verdad, les juro que en el lago del castillo hay un calamar gigante.- alegaba James.
-Ya lo sabía, Dorn me ha platicado sobre eso.- Dijo con un tono presumido Rose.
-¿Quién es Dorn? ¿Tú hermana?- Se arriesgo a preguntar Peter.

-No Pet, es mi elfina doméstica. Me ha contado muchas cosas sobre el castillo. Los elfos saben mas de lo que los magos creen- Respondió Rose.
-Seguro te mintió. - Interrumpió Sirius. -Eso es lo que hacen los elfos. Mis padres dicen que su única función es servirnos hasta el momento de su muerte, pero creo que su segundo propósito es fastidiarnos un tanto la vida. 
-¡Dorn nunca me mentiría!- Dijo Rose con un tono molesto.- Y creo que no deberías hablar asi de los elfos solo porque el tuyo de seguro te odia. 
-Vamos chicos, no discutan por una tontería- Intento tranquilizarlos James.
-Vamos ya casi llegamos al castillo, es mejor que nos pongamos la túnica- Se atrevió a comentar Remus, cuando vio que ninguno hablaba.

La verdad es que la discusion no hubiera tenido mucho sentido sino fuera porque Sirius antes de conocerla ya pensaba que Rose tendría la misma forma de pensar de su madre y su familia.
Además ni James, ni Remus, ni Peter, podrían haberse dado cuenta que estaban en el mismo compartimiento que los dos seres mas testarudos de todo el mundo mágico....