Novia de adopción.

12.Por provocarme.

Baje a la cocina justo después de ella y me senté delante de ella en mi sitio.

Ella me miró y yo no le aparte la mirada, coge mi vaso de agua y bebí sin apartarle la mirada.

-He hecho bikinis cuantos quieres Catlyne cielo-dijo mi madre dejando dos sobre mi plato.

-Dos-Dijo ella observándome a mi y luego a mi madre- Gracias.

Me empecé a comer mis bikinis, partiendo cachitos pequeños con las manos y llevándolos a mi boca mirando a Catlyne.

Ella me miraba y parecía que la estaba poniendo nerviosa, tanto que sin querer dio un manotazo a su vaso tirándolo al suelo.

-Cielo vigila ¿estas bien? ¿te has cortado?-Dijo mi madre rápidamente levantándose a recogerlo.

-No tranquila estoy bien-Dijo ella levantándose se había tirado parte de la cocacola encima, voy a cambiarme.

Y dicho esto mirándome desapareció de la cocina.

No pude evitar soltar una risita que mi madre interpretó mal.

-No tiene gracia Ivi podría haberse cortado la pobre....-tiro los cristales a la basura y fregó él charquito de cocacola.

Yo decidí no decir nada, y seguí comiendo mis bikinis, al ratito bajo de nuevo, se había puesto un pantalón cortito y se había cambiado la camiseta ahora era blanca y en letras negras ponía "I'm bad girl❤"

Sonreí al leerlo y seguí comiendo, luego me llené él vaso de cocacola y me lo bebí del tirón lo más sensual que pude, me levante y agachándome muy cerca de ella metí mi plato y vaso en el lavavajillas, notaba su mirada clavada en mi y sabía que le estaba provocando, me levanté para irme a la habitación victoriosa pero al hacerlo y dar un paso me quise morir.

Un cristal un maldito cristal del vaso que Catlyne había tirado se me había clavado en él pie, di un gritito y ya tenía a mi madre encima.

-Si es que a quien se le ocurre ir descalza por donde se ha roto un cristal-dijo mi madre llevándome hacia él baño para curarme.

-Mama ya lo hago yo,que ha sido por mi torpeza-Dijo Catlyne ocupando él lugar de mi madre y llevándome al baño ella.

Me senté en él retrete y ella me sacó él cristalito del pie y me curó la herida.

-Gracias-le dije, mi plan había fracasado.

-La próxima vez no me provoques-Me dijo levantándose y iendose del baño.

No había fracasado del todo, por lo menos había conseguido provocarla.