The Trip

6. Aracnofóbia

PDV ALEN:

Reinaba un silencio total en la van. Jay conducía y Keyna iba de copiloto, mientras que Sarah y yo estábamos sentados atrás. Yo leía un libro y Sarah revisaba los mensajes de su móvil.

La van estaba compuesta por el asiento de pilo y copiloto, detrás otros tres asientos y un maletero tan ancho y largo que cabrían dos personas tumbadas.

Levanté la mirada del libro que leía y descubrí a Sarah mirándome con los ojos como platos.

- ¿Pasa algo? -pregunté en bajo, pero ella no movió ni un músculo.

Y entonces me dí cuenta de que Sarah no me miraba a mí, si no a algo en mi izquierda. Me volví lentamente para encontrarme de cara con una araña peluda y de largas patas. Me quedé helado. Era enorme.

Jay tomó una curva y la araña salió volando en dirección a Sarah, haciendo que ésta última chillara. Keyna se volvió rapidamente y ahogó un grito al ver la araña balanceándose colgada de una fina telaraña.

- ¡Para la furgoneta, párala! -exclamó Sarah ocultando su rostro entre las manos.

- ¿¡Pero qué os pasa!?

- ¡QUE PARES LA FURGONETA! -gritaron Keyna y Sarah a la vez.

Jay redujo la velocidad y paro a un lado de la carretera y cuando se volvió a preguntar que demonios pasaba, Keyna y Sarah salieron como rayos por la puerta de la van. Yo las seguí y vi como se movían como si estuvieran electrocutadas, pensando que tenían la araña encima.

- Había una araña como una casa de grande -intenté sonar desinteresado, pero tenía cierto temblor en la voz.

- Joder tío, no sería para tanto... - empezó, pero en su rostro se mostró una sonrisa traviesa y volvió dentro.

- Eh, ¿qué vas a hacer? -pregunté pero en ese momento Sarah se acerco corriendo y me hizo mirar por toda su mata de pelo para ver que no tenía la araña.

Cinco minutos más tarde, Jay apareció con la araña en un bote de cristal y la puso delante de las chicas.

- ¿Por esto? ¿Por esto habéis montado tanto escándalo?

- Vaya, siento que hayamos tenido que parar, pero tengo Aracnofóbia y casi me da un ataque hay dentro -se defendió Sarah y entró en la caravana, no sin antes vacilar por si había más arañas supongo, dando un portazo.

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PDV JAY:

- ¿Y ahora que hacemos? -preguntó Keyna mirando de soslayo a la araña.

- No sé, yo tengo hambre -respondí poniendo mi mano sobre la tripa.

- Si quieres freímos la araña -dijo Jay y se tronchó de risa de su chiste.

- Este viaje ha sido un desastre.