Cuando menos pensé, ya habíamos llegado al Bunker 9. Jason abrió la puerta, todavía callado... Quizás decepcionado ¿La morena será su novia? Nico entro conmigo todavía en brazos y encontramos a Leo murmurando algunas cosas y dibujando, borrando y escribiendo algo en una gran cartulina.
-Hola chicos- saludo Leo.
Su voz sonaba ausente. Como si su mente vagara por otros rumbos.
Nos volteo a ver un segundo, volvió a poner su mirada en la cartulina y después rápidamente volteo a vernos sorprendido.
-¿Qué sucede?- pregunto rápidamente acercándose a mí y a Nico.
Nico me sentó sobre una mesa.
-Ataque de Annabeth y Piper- dijo Nico, como si explicara toda la situación.
-Oh hermano- dijo Leo.
Miro a Jason, quien estaba jugando con un martillo en sus manos, parecía debatirse entre golpearse a sí mismo o golpear a la morena.
-Jason... ¿Estas..?- pregunto Leo.
Jason negó con la cabeza. Nico solo lo miro un segundo con preocupación y después poso su mirada en mis pies.
-No puedo creer que no sepas defenderte- murmuro Nico.
Solté un bufido enojada.
El camino hacia el grifo donde yo anteriormente había lavado una herramienta, tomo un trapo y lo mojo. Se acercó de nuevo a mí y paso el trapo húmedo por mis pies. Estaba frio, tanto como su mirada. Un escalofrió recorrió mi columna vertebral. Ardía, pero no tanto como se suponía que debía.
-¿Por qué no te quejas?- pregunto Nico.
-¿Quieres que me duela?- pregunte amargamente-
-No...- aclaro el- Solo que... Es muy raro no ver a un mortal quejándose por todo.
Lo mire estupefacta. Decidí no decir nada y mirar hacia donde Leo y Jason, ambos mantenían una charla seria. Después de unos segundos alargue la mano hacia las de Nico.
-Dame el trapo- le pedí.
Ahora el me miro estupefacto.
-Yo lo hare, no quiero ser una molestia- dije yo.
El negó con la cabeza.
-No es una molestia ayudar a alguien que lo necesita- me respondió Nico.
-Dame el trapo, yo puedo hacerlo.
Volvió a negar con la cabeza y siguió tallando mis pies.
-Leo ¿Tienes vendas?- le pregunto Nico, después de un rato.
-Si- dijo el moreno.
Camino a una habitación apartada, quizás el baño. Después de un rato salió con una caja metálica blanca entre sus manos, se acercó a nosotros. Hurgo en la caja a un lado mío y saco unas vendas, Nico las coloco cuidadosamente en mis pies.
-¡Aquí está mi radio!- grito Leo emocionado sacando una caja negra.
Tenía una antena en la parte de arriba y unos cuantos botones plateados.
-¡Genial!- dijo Leo.
Coloco la radio a un lado mío y la encendió, sonó un poco de música y luego empezó a sonar un rap en otro idioma, español:
-Sé que mis rimas a veces causan disgustos, cuando mis neuronas corren hasta yo mismo me asusto- entono el rapero.
Y por alguna razón... Identifique la canción y empecé a rapearla junto con la radio.
-Mis respuestas pueden ser tan agresivas, que hasta las letras me huyen porque tienen miedo de que las escriba...
Los tres me miraron estupefactos. Yo solo seguir rapeando hasta que todo se volvió negro y me sumí en la oscuridad, luego hubo una luz y un recuerdo... Yo, rapeando la misma canción mientras iba en un coche... Había una señora al lado mío, su rostro era indefinido... Sus facciones no se acomodaban y llegue a ver su boca en su frente. Atrás había una niña, menor que yo supuse... Había lluvia, oía las gotas caer en la lejanía... ¿Un recuerdo? ¿Un sueño? ¿Una visión?
Y desperté.
-¡Chica!- grito la voz de Leo.
Unos brazos me removían.
Abrí mis ojos y vi a Leo sobre mí, su expresión demostraba preocupación.
-¿Qué... Que sucedió?- pregunte cansada.
-Te desmayaste- dijo Nico.
Que gran explicación.
-Tuve una... Una visión.. O no sé lo que fue...- dije yo.
-¿Qué?- pregunto Jason.
Me incorpore lentamente, Jason me miro.
-Un carro... Una señora... Una niña... Lluvia...- dije yo.
Los recuerdos se borraban.
-Yo rapeando la canción... La canción que sonaba en la radio...- dije yo.
Y todos me volvieron a ver sorprendidos.
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Los Muertos No Lloran (Nico di Angelo y tu) (Go Wattys 2016)
Fanfiction-Me negaste los abrazos...- murmuro el, viéndola. Ella negó con la cabeza, cerrando los ojos. -Me negaste los besos- continuo diciendo el- .Me negaste el olfato, me dejaste tenso. -Nico...- susurro ella, acercándose a el, volviendo a abrir los ojos...