Ahora y el "Antes"

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Había un momento en que HyukJae se trasformaba completamente, y ese era... cuando bailaba.

El baile es un arte. El baile puede ser usado como un arma a la provocación o como la inspiración. Y quien puede dominarlo simplemente tendrá en sus manos oportunidades únicas.

Eunhyuk movía sus caderas con ritmo y gracia, sus ojos estaban fijos en un punto blanco de la habitación, y sus pies necesitarían de un terremoto para perder la coordinación que mantenían. La música hacia los efectos a sus oscilaciones, y la canción parecía describirlo como un texto en un libro detallado.

Estaba tomándose ese tiempo para meditar sin presiones sobre muchos aspectos de su vida; entre ellos por supuesto, estaba su relación... ¿Qué pasaba? Era la pregunta principal de todo el laberinto.

Poniendo en orden los hechos, podía tener una cosa muy clara, y era que Donghae estaba cambiando.... Por muy idiota y mediocre que fuera ese descubrimiento, siendo que era de lo más obvio, HyukJae se creía que había algo detrás de esto.

Asi se generó la segunda incógnita del: "¿Por qué?" que por mucho que tratara de ver distintas circunstancias, todos terminaban siendo igual de estúpidas e incompletas. El rubio no podía dar respuesta a ninguna de sus preguntas mentales, solo podía crear una lista de comparaciones...

Si antes Donghae le parecía un crio a quien había que cuidar, ahora le daba la impresión de que él no representaba más que un estorbo en su día a día.... últimamente el menor parecía ser más independiente de lo que lo había creído capaz.

Recordaba que cuando no eran más que amigos, incluso hace un par de años, Donghae mantenía una sonrisa segura. Era hiperactivo y un adorable chico al que todos sentían aprecio, eso quizás no había cambiado, pero su actividad e imprudencia habían disminuido bastante.

Cuando lo conoció, vio en él una necesidad de ser acogido como un lindo peluche entre sus brazos; el mismo Hae era una persona cariñosa que demostraba sus sentimientos de la manera física (especialmente con él). Hyuk no se sentía seguro de querer tomar toda la responsabilidad entonces, pero ahora que quería hacerlo no había rastro de esa imagen tan expresiva ni fácil de tratar.

Comprendía que ambos habían crecido, que el tiempo te hace perder muchas de tus características despreocupadas de la vida, y que es una etapa que no puedes simplemente evadir. Pero lo que no podía entrarle en la cabeza, era que absolutamente TODO lo que amaba del pelinegro, estuviera desvaneciéndose rápidamente.

Él no quería ese cascaron de hombre guapo, fuerte y formal. No... solo quería a un muy torpe chico, juguetón, empalagoso, despreocupado, mimado y hasta un tanto molesto. Que era causa de sus migrañas, de sus más grandes sonrisas, y de repetir cada vez que salía una tontería de su boca: "Idiota" como un sinónimo al "cariño"

>>Primero me enamore de sus defectos...no quiero dejar de verlos<<

La música se detuvo y él respiraba con dificultad, sus manos descansaban en las caderas y su cabeza caía hacia el frente donde el flequillo rubio cubría mitad del rostro. Hacia largas respiraciones jalando mucho aire a sus pulmones, alistándose para comenzar de nuevo.

Donghae no solo era diferente en la persona, si no también en muchos aspectos físicos. ¿Qué si le gustaban? Debía admitir que le fascinaba el grosor que habían tomado sus brazos y sus muslos; le encaba lo esbelto de su cintura y lo ancho de sus hombros; lo atraía lo dominante que podía verse.... Mas siempre existe un "pero"

No dejaba de ser un hombre. No importaba, el instinto es una fuerza poderosa que domina al sexo masculino igual que la carne fresca a un león. La cosa estaba en que siempre ha tenido el pequeño/gran conflicto estético de su cuerpo, siendo tan delgado, siendo tan pequeño, siendo tan poco atractivo.

Tan fríos como invierno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora