El beso de Mayo (Candy Candy fanfic)

Capítulo 4

Al fin la terrorífica noche ha pasado sin más contratiempos.

Me dirijo hacia el aula y apoyado en una columna cercana veo a Terry. Distingo el cansancio en su rostro, estoy segura que no ha podido dormir nada esta noche preocupado por mí y por eso ha venido a ver que estoy bien antes de que empiece la clase.

Nos intercambiamos miradas cómplices y unas leves sonrisas.

Tranquilizándose al saber que estoy bien se encamina hacia los dormitorios masculinos, seguramente a intentar dormir todo lo que no pudo anoche.

Yo entro en el aula y me pongo a hablar con Annie y Patty hasta que llegue la hermana. Por suerte no se escucha nada de lo que sucedió la noche pasada, el orgullo herido de Eliza impide que pueda intentar atacarme con eso, pero su fallo delante de las hermanas la ha enfadado aún más.

Al acabar las clases de la mañana me intento dirigir hacia la Colina, pero mis amigas me frenan.

-Candy, espera ¿has visto cómo te miraba Eliza está mañana?- pregunta Patty con temor.

-Sí, igual de mal que siempre- río intentando aliviar la situación.

-No, no es igual. Desde que regresamos algo ha cambiado- sentencia Annie, yo asiento en silencio.

-No queremos angustiante, sólo precabirte. Debes estar atenta Candy- me pide Patty con dolor en la mirada.

-Tranquilas, llevo años lidiando con ella, seguro que podré defenderme- digo blandiendo el puño- nos vemos después del almuerzo.

Marcho a gran velocidad. Después de lo que pasó anoche no quiero preocupar a Terry, las chicas me han retrasado, hace ya diez minutos que debería estar allí.

Me precipito por en medio del bosque atajando el camino habitual, de pronto un silbido hace que me detenga abruptamente.

Miro a mi alrededor pero no veo a nadie, oigo otro silbido esta vez más largo e intento seguirlo hasta llegar a su origen, elevando la vista reconozco la silueta de Terry en una rama en lo alto de un árbol, trepo sin pensarlo hasta él.

Una vez arriba me tiende su mano para ayudarme a sentarme a su lado.

-Bienvenida a nuestro nuevo lugar de encuentro mi princesa.

Él permanece sentado a horcajadas y yo tomo mi lugar en el espacio entre sus piernas.

-¿Cómo dices? ¿Nuestro nuevo lugar de encuentro?- le pregunto sin entender nada.

-Juzga tu misma- me dice señalando el sendero hacia la Colina. Inmediatamente distingo en él a varias hermanas con Eliza y Louise detrás de ellas, regresan hacia el colegio.

Escalofríos recorren mi interior.

-Después de lo que ocurrió anoche he pensado que lo más seguro era vigilar desde aquí y no volver a la Colina donde quizás alguien podía intuir que nos reuníamos.

Hace unos minutos he visto como Eliza encabezaba a las hermanas hacia allí, pero a juzgar por lo cabizbaja que vuelve estoy seguro que se habrá llevado una buena reprimenda por molestarlas con falsas conjeturas...suerte que nos hemos adelantado- me dice con una arrogante sonrisa.

Quiero ser fuerte pero sin poder evitarlo mis ojos se llenan de lágrimas, Terry me mira preocupado y me abraza fuertemente contra él.

-¿Qué pasa Candy?¿Te han hecho algo? ¿Qué a ocurrido? Dime por favor.

-No es nada, simplemente...- comienzo a responder pero no puedo contenerme, me protejo en el calor de su pecho y sollozo amargamente.

-Candy por favor háblame ¿Qué ha pasado? Si te han hecho algo juro que..