Queridos lectores, acá les dejo el 17. Deseo de todo corazón que les guste.
Sus votos y comentarios me animan a seguir escribiendo, gracias por hacerlo.
A los nuevos seguidores un besosotototototote.
Y para todos los que les gusta esta historia, sientan que el capítulo está dedicado a ustedes.
Sin más... !A leer¡
----------------------------------------- o ----------------------------------------------
Estoy sentada en el mueble con los pies debajo de mi cuerpo y con mis manos alrededor de la tercera taza de café.
No he dormido continuamente en toda la noche, solo un par de veces que cabecee mientras miraba al vacío y pensaba. Mi mente está más agotada de lo que está mi cuerpo. Robert ha ocupado la mayor parte de mi tiempo. – como ha sido desde el día en que lo conocí. – lanzo un suspiro al cielo.
Veo la hora en mi reloj, marca las seis y cuarenta de la mañana. Con pereza me levanto del sillón para darme una ducha e ir a trabajar. Pensé numerosas veces llamar para decir que estoy enferma. Pero no dejaré que doblegue mi orgullo. – aún más - . Nunca sabrá lo mucho que me dolió la última llamada que le hice. Lo único que si sabrá es que a final de mes… Renunciaré al trabajo.
Perezosamente me visto. Escojo unos pantalones un poco holgados y cómodos arremangados delicadamente en la bota, son color caqui y una camisa manga larga muy formal de botones al frente. No tengo ánimos de arreglarme el cabello así que lo ajusto en una coleta alta. El infaltable corrector de ojeras en el poco maquillaje que uso hoy.
Salgo de mi departamento tengo todas las cosas en la mano. Por lo que tomo la cartera con mis dientes. Me guardo el teléfono en el bolsillo trasero y cierro la puerta por fin.
En planta baja unos de los vecinos de un piso mayor me dejan la puerta abierta para que salga. Le sonrío amable y él me da un asentimiento de cabeza a manera de respuesta.
En la calle abro la cartera y tomo mi reproductor, pongo el audífono en su más alto volumen. Le doy al botón de aleatorio y la voz de los clásicos “Queen” inundan mis oídos.
Can anybody find me somebody to love?
each morning I get up I die a little
can barely stand on my feet
take a look in the mirror and cry. *
Lanzo un bufido de pura frustracion. Le doy al botón de siguiente. Estás vez son mis adorados “The Beatles”
I don't like you
But I love you
See that I'm always
thinking of you
Oh, oh, oh,
you treat me badly
I love you madly
you really got a hold on me…*
- ¿Me estás jodiendo? – pregunto a cualquier entidad divina que me esté observando.
Es suficiente. No voy a caer en ningún juego macabro del destino. Molesta apago el aparato y lo lanzo en la cartera. Desquitándome con él de alguna manera por las canciones que reprodujo.
