Vi un cielo en tu mirada,
Que me dio alas,
Que me hizo sentir amada.
Sentí fuego en tus palmas,
Que quemaba el dolor,
Que acababa con el terror.
Ahora me falta calor.
Te desvaneces, amor,
Y después, siempre voy yo.
¿Qué soy?
Soy ave, que vuela y renace.
Soy un huracán originado en un bache.
Soy de segunda, soy reemplazable.
Pero, ¿sabes que no soy ni seré? Tuya.
Soy una loba,
Que camina hasta encontrar.
Soy un barco,
Que tus mares sabe surcar.
Soy aprendiz de los dioses.
Soy amazona del viento.
Soy un fénix.
Me duele,
Me quemo,
Hasta que las cenizas me hacen alguien nuevo.
Soy creyente,
Amo al dios que hallo en tus abrazos,
Temo al diablo que se esconde tras tus ojos.
Soy mártir,
Por vivir de tus caricias,
Por morir de sus torturas.
Soy el agua,
Que reina en el mundo,
Que se estrella en las rocas.
Soy cicatriz,
Que duele en el instante,
Que te sabe llevar hacia delante.
Que yo muero,
Que yo vivo,
Y que vuelvo a morir.
Un ciclo vicioso
Que se vuelve a repetir.
Soy un fetiche,
Que quieres probar,
Sin saber si lo disfrutarás.
Soy la parca,
De mi propio destino,
De mi yo prohibido.
Soy sangre,
Que recorre mi cuerpo,
A veces por fuera y otras por dentro.
Soy dolor, soy placer.
Dulce satisfacción en un atardecer.
Plumas de fuego que me ayudan a desaparecer.
Malicioso pico que me impide terminar de una vez.
Soy fénix.
¿Tanto te molesta?
Si quieres verme muerta,
Soy la musa perfecta.
Renacimiento de cenizas,
Que me deja heridas,
Que acaba con la vida.
