Capítulo 9

1.4K 62 13
                                    

PVO LAURA:

Una vez que llegamos a clase nos sentamos junto con Cristina y Claudia, que ya vuelve de su expulsión.

Yo: si supieras todo lo que te he echado de menos estos días Clau.

Andrea: ni tanto eh... no la engañes, ni os habéis dado cuenta de su ausencia, con esto de que ahora tenéis una nueva amiguita.

Yo: ay Andrea, ¿no tienes algo mejor que hacer que intentar meter mierda entre amigas?

Andrea: obvio que si, tengo muchos amigos que me están esperando, pero odio que mientas a la gente.

Yo: ¿yo mentir? venga Andrea, ya basta.

Pablo: vete, con tus supuestos amigos.

Andrea: ¿por qué dices supuestos?

Pablo: porque yo no los veo, pero bueno si tu quieres seguir viviendo en tu nube de fantasía hazlo y a nosotros déjanos en paz.

Andrea: ¿tampoco te vas a ir ya con tus amigos?

Pablo: ¿que amigos? esos no son amigos ni son nada, supuestamente el que era mi mejor amigo se follo a mi novia todas las veces que pudo, y los demás solo me querían por conveniencia.

Andrea: que rápido te ha llevado tu hermana a su terreno eh, parece que no tienes personalidad.

Yo: ahora si la tiene, puede decidir con quien ir y con quién no, soy su hermana, y si le tengo que aconsejar que no se vaya con gente como vosotros lo voy a hacer, pero está en el hacerlo o no.

Pablo: déjala ya Lau, no merece hablar con personas huecas.

Andrea: ¿que me has llamado?

Pablo: persona ¡HUECA!

Cristian: buenos días chicos, todos a vuestros sitios por favor.

Andrea: tu a mi no me llamas así, con esto estás demostrando lo mucho que me querías.

Pablo: mas que tú a mi seguro que si, al menos yo no me follaba a nadie que no fueras tú.

Cristian: ¡chicos ya basta! a vuestros sitios he dicho.

Andrea: eso será porque tu no me dabas todo lo que yo pedía.

Pablo: eres una...

Yo: Pablo para por favor, no la sigas el juego, lo que quiere es que os saquen de clase y poder estar contigo a solas, por favor.

Pablo: tienes razón lo mejor no es hablar con personas huecas.

Andrea: ¡eres un poco hombre!

Cristian: ¡Andrea ya basta o te sientas o te pongo un nuevo parte!

Andrea: volveremos a hablar de esto, tu a mi no me dejas mal delante de toda esta gente.

Después de toda esta discursión se va a su sitio y por fin Cristian puede hacer la clase de filosofía en paz.

Se mueve de un lado para otro, nuevamente se ha puesto unos pantalones ajustados con una camisa pegada al pecho...

Dios mío si es que ¿a quien no se le pueden ir los ojos con este hombre delante?

Cristina: Laura vuelve... te está preguntando.

Vuelvo a mirar y ahora lo veo delante de mi con los brazos cruzados.

Cristian: ¿nuevamente sin prestarme atención? ¿tan aburrido soy?

No, precisamente eso no lo eres, y si te estaba prestando atención pero no a lo que decías.

Dios mio.. ¿que me está pasando?

Yo: lo siento, estaba pensando.

Cristian: la próxima vez espero que estés mas atenta.

Yo: si, lo siento.

Me sonríe y vuelve a la pizarra, pero sigo sin prestar atención de lo que dice.

Cristian: bueno chicos, hasta aquí la clase de hoy, quiero que para la semana que viene me hagáis un trabajo de mas o menos 5 paginas de lo que hemos hablado hoy, os estoy regalando un punto para la nota final, así que aprovecharlo, luego nos vemos a última hora en educación física, que os sea leve el día.

Después de decir eso me mira, sonríe, coge sus cosas y se va.

Cristina: ¿que te pasa? estás súper distraída.

Yo: nada..

Claudia: algo te pasa, y despues vamos a hablar de eso.

Segundos después entra el profesor de matematicas, y ya el resto de las horas pasan volando hasta que llega la hora de volver a verle.

Cristian: chicos vamos para el patio.

Nos levantamos y una vez allí nos dice que vamos ha jugar al fútbol.

Genial, como siempre se me ha dado tan bien.

Hace grupos y por suerte a Andrea y a sus otros amiguitos los pone en el otro grupo.

Mas de media hora después nos da un descanso.

Pablo: no me creo que vayamos ganando.

Yo: porque nos tocó con los que saben jugar.

Claudia: pero 8-0 es una paliza.

Cristian: viendo el poco compañerismo del equipo que va perdiendo, he decidido jugar yo también con vosotros, a ver si al menos conseguimos empatarlos.

Todos los de mi equipo protestan, pero a mi me parece una buena idea, verlo correr, verlo en movimiento va ha ser muy bueno.

Comenzamos a jugar, en una de las jugadas llevo yo el balón, Mario me pide que se la pase, pero al tener a Cristian frente a mi intentando quitarme el balón me bloquea.

Vuelvo a concetrarme y consigo esquivarle, llego hasta la portería, cuando iba a tirar noto unas manos en mi estomago.

Cristian: tira en medio.

Me suelta y aun en shock tiro el balón, sé que ha entrado cuando escucho la celebración de los demás.

Muchos vienen a celebrarlo conmigo, miro a mi izquierda y lo veo sonriéndome.

Esas acciones de agarrarme por la cintura se repiten en muchas mas jugadas, y cada vez que me toca me estremezco.

Suena el timbre de final de clase, y el resultado final ha sido 10-6, ganando nosotros obviamente.

Vamos a los vestuarios a refrescarnos y como no es raro en mi soy la última, Claudia y Cristina cansadas de esperarme se van a fuera con el resto de las chicas.

Cuando ya estaba lista y a punto de salir una mano en mi espalda me hace detenerme.

Cristian: muy bien jugado, no sabía que tenías tan buena puntería.

Yo: hay muchas cosas que no sabes de mi, yo tampoco sabía que eras tan tramposo.

Cristian: ¿tramposo yo? Que va.

Yo: vaya que no... ¿por eso me agarrabas de la cintura para que no pudiese seguir no?

Cristian: y me vas a negar que no te gustaba.

Yo: ¿a mi gustarme? Claro que no.

Cristian: por eso te quedas embobada cada vez que me miras.

Yo: ¡eso no es verdad!

Cristian: soy tu profesor, pero no soy ciego y también soy hombre.

Se acerca peligrosamente a mi, y algo me dice que tendría que separarme, pero no lo hago.

Dios mío... Si es que es guapísimo...

¡Pero es tu profesor!

Amor.... ¿imposible? Profesor- Alumna.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora