Capítulo VII: Contraaque

19 3 0
                                    

Lucy

En la base del campamento todo estaba fuera de control, muchas personas aprovecharon la oportunidad del revuelo para huir de aquel lugar. De ser por mí, habría salido a la calle en busca de mis hermanos, pero habían asignado un guardia cuya única labor era vigilarme, salir de allí iba a resultar imposible.

– Déjame ir – le supliqué por milésima vez

– Sólo estoy cumpliendo mi trabajo, no voy a arriesgar mi vida por culpa de una niña

– No soy una niña – respondí

– Como digas, no vale de nada que sigas suplicando. Permanecerás aquí hasta que el jefe nos diga que hacer contigo – se notaba en su tono de voz que no le agradaba hacer ese trabajo, en cierto modo también era un prisionero de aquellas personas.

– ¿Porqué lo haces? – pregunté al cabo de unos minutos

– ¿Hacer qué? – respondió con una pregunta

– Obedecerlos – dije mirando hacia los lados cuidando no ser escuchada por nadie – Es obvio que no quieres estar aquí, cuidando de mi como si realmente te importara a donde quiero ir – logré captar su atención por un segundo, lo tenía justo donde lo quería – Ni siquiera formas parte de su organización, o lo que sea que tengan, de ser así estarías allí fuera con ellos persiguiendo a los fugitivos y no haciendo el papel de niñera. Entonces repito mi pregunta ¿porqué lo haces?

Se mantuvo quieto durante un momento, a través de su mascara se me era imposible descifrar si estaba mirándome o simplemente había decidido ignorar mi comentario.

– Tienen a mis hijos – respondió después de un largo silencio – mi esposa murió en la catástrofe, estábamos en el interior del país cuando sucedió. Los niños habían ido a casa de su tía, por fin tendríamos una tarde a solas, sólo queríamos tumbarnos en la cama y dormir una siesta o ver televisión, pero cuando el piso comenzó a temblar a penas pude ver como me miraba asustada antes de que un pedazo de techo se desplomara sobre ella. Me tomó todo el día encontrarlos, no fue una tarea fácil. Cuando por fin llegué sólo pude verlos desde lejos, los estaban reclutando al igual que a ustedes, los montaron en camiones y los trajeron aquí.

– ¿Porqué no fuiste a salvarlos? ¿Cómo terminaste aquí? – pregunté interrumpiéndolo, estaba perpleja ante su relato. Fue en ese momento cuando noté que su postura era diferente a la del resto, tenía los hombros ligeramente caídos y el uniforme le quedaba un poco grande.

– Vi como muchos padres se oponían a ser separados de sus hijos pero ellos aplicaban la fuerza para lograr su objetivo; todos esos padres fueron asesinados después de los niños estuvieron alejados de ellos. Decidí entonces que no iba a dejar a mis hijos en sus manos así de fácil, aguardé a que uno de los guardias estuviese solo para atacarlo, fue fácil abordarlo, era uno de los de menor rango, era joven y estaba lleno de nervios – hizo una pausa y su cuerpo se estremeció ante el recuerdo – Cuando me deshice de él tomé su traje, sus armas y me uní al grupo. Hacerme pasar por uno de ellos, fue más fácil de lo que pensé, no se conocen entre sí, todos están siguiendo órdenes de un mando superior y vienen de diferentes lugares. Escuché que han hecho lo mismo en cada lugar donde quedó gente, pretenden reunir a todos los sobrevivientes del mundo en un punto quien sabe con que fin, pero debo recuperar a mis hijos antes de que lo hagan. Es por eso que no puedo dejarte ir, no les temblará el pulso para hacerme daño por no cumplir con mi trabajo.

– Entiendo – asentí resignada – Entonces si tienes un propósito para mantenerme aquí

– Me gustaría no ser el que se interponga entre tus planes, vi que también tienes familia, pero espero puedas entenderme.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 27, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Attwater - El TeoremaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora