SeokJin retrocedió tres pasos.
—¿Que?... —Susurró.
—Por tu culpa me han violado. Creen que soy un marica como tu y me han roto por dentro. ¿¡Sabes lo que se siente!? Pues no. A si que no me vuelvas a hablar en toda tu puta vida, ¿Me oyes?
Jin asintió en silencio con lágrimas brotando de sus ojos.