Novela dedicada a todas las piezas del cubo.
Sí perteneces a otro fandom eres completamente bienvenida.
[...]
Madison es una chica de 18 años, un poco rebelde pero, centrada en sus estudios.
Sebastián es un chico de 20 años que sólo piensa en tenerl...
Nuestros labios rozaban, mi respiración aceleró junto con mi corazón.
Podía respirar su aroma, su perfume varonil. Dios, es cómo sí los mismísimos Dioses le fabricaran uno especial para que me hipnotizara completamente.
Necesitaba sus besos, sus labios son tan carnosos, mierda no podía resistir.
-¿Qué esperas para besarme idiota?- Gritaba mi mente.
Sebastián:
Tenia tantas ganas de besarla, Madison estaba paralizada con mis labios, me separé un poco de ella y creo que sufrió por mi terrible decisión. Nos miramos cara a cara y sonrei porqué Madison bajaba su mirada.
-Hey, mírame.- Le dije con ternura y ella me miró.
Sonrei y ella regresó la sonrisa, tomé con mi mano derecha su cuello y toda esa parte que cubría con mi mano. Con la mano Izquierda tomé su cintura, la impulsé hacía mí quedando juntos esta vez para darle un beso.
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Madison:
Nuestros labios se juntaron en un dulce y perfecto beso, nuestros labios nacieron para estar juntos, encajan a la perfección.
Sebastián:
Nos separamos y Madison sonrió dejando ver sus hermosos dientes.
La tomé de mi mano y la guíe hacía mi auto.
-¿A donde vamos?- Me detuvo.
-Es una sorpresa- sonrei y mordí mi labio inferior.
-Mierda- Me dijo con carita triste y ambos reímos a carcajadas.
Abrí la puerta del auto, tomé su mano como en las películas para que se sentara.
-Gracias Señor Villalobos.- Agradeció en forma de burla y sonrió.
-Denada a-bue-li-ta.- Saqué mi lengua y ella puso cara de ofendida.
Arranqué el auto y quise romper el silencio.
-Madi, cuentame más de ti.
-¿Sobre qué?
-No sé, ¿Como vas en la escuela?
-Tranquila Mamá prometo no reprobar más de cinco materias- rió a carcajadas.
-Oye sólo intento saber más de ti- sonrei.
-Bien, pues, hace meses recibí un correo.
-¿Ah sí?
-Sí, es una gran oportunidad para mi futuro, es sobre la universidad en Miami, eligen a los...
-Mejores estudiantes para tener la oportunidad de ser becados e ir a Miami a estudiar, blah, blah.-La interrumpí y caí por dentro en una gran tristeza y furia.
Madison se me quedó viendo con cara de confundida. Nos quedamos en un gran silencio.
Cuando mi furia se habia ido y solo quedó mi tristeza intente hablar, decirle cómo sabía sobre esto y tenía que incluir a Daniela.
-Madison, sobre lo que pasó en el aeropuerto, ella también...
-Sebastián, no quiero saber nada de ella, no lo arruines.-Me interrumpió molesta.
-No, sólo dejame explicarte qué...
-Sebastián, callate porfavor, lo arruinarás.- Madison bajó su mirada e inclinó su cabeza al vidrio de la ventana, estaba a punto de soltar una lágrima.
-Suficiente- pensé y me estacioné en la orilla de la carretera.
-Sebastián, ¿Porqué pa...- la interrumpí con un beso tan profundo que paramos hasta qué nos faltó la respiración.
-Nunca dudes ni por un segundo que te quiero en mi vida, me gustas, me gustas de azul, me gustas de blanco, me gustas de rojo, me gustas de cualquier color, simplemente me gustas y quiero que recuerdes siempre este momento. Aveces somos tan diferentes y a la vez tan iguales, aveces somos tan tímidos y a la vez tan arriesgados. Somos perfectos para perdernos juntos o encontrarnos. No quiero sonar tan cursi, mírame a los ojos... Simplemente me gustas y sí no lo digo hoy quizá pierda cualquier oportunidad de hacer de este momento la parte favorita de mi vida.
