30 Days Smut Challenge

dos

Los preparativos para el lanzamiento del libro los estaba volviendo locos, ya no tenían tiempo para nada, Dan estaba tan emocionado que Phil solo asentía a todo aquello que el alto decía, sus ideas siempre son buenas.

Cuando por fin había acabado todo, cuando por fin tenían tiempo para ambos, estaban tan exhaustos que Dan se quedó dormido en el sillón y Phil simplemente se acostó en el piso, pensando en todo lo que han hecho, todo lo que han logrado, juntos, a lo largo de los años, nunca se había imaginado llegar a ser tan grande y mucho menos crecer junto a la persona que ama.

Pronto tendrían el tour para Europa y después el de América, estaban muy emocionados, pero eso implicaba no tener privacidad, intimidad, ni tiempo, así que todo el tiempo que tuvieran hasta el primer show lo usarían en darse mimos.

Phil pronto se percató que había tardado mucho pensando y ya se asentaba la noche, se levantó y se acercó a Dan, al que no le había prestado atención en todo este tiempo, al verlo, su corazón se llenó de alegría, sabía que él era el indicado, siempre lo supo, desde el primer beso que le dio, cuando tomó su mano por primera vez, supo que estaban destinados a estar juntos, así como también se percató de cuanto dolería cuando se separaran, algo que esperaba que nunca pasara.

Dan estaba acostado en el sillón, abrazado de un cojín, P se acercó a su rostro, de la nada Dan dejó escapar un gemido, sus mejillas estaban rojas y estaba comenzando a sudar, Phil sonrió, sabiendo cuanto necesitaba a Dan, pero no esa noche, estaban muy cansados.

Tomo el rostro del alto y le esparció besos por todos lados, dejando por último un beso en sus labios, haciendo que este se despertara, solo para atraer a Phil hacía sí.

Phil sentó a Dan, para después tomarlo en brazos, como en los viejos tiempos, yendo así a la habitación.
Lo recostó suavemente en la cama sin soltar su beso, tenían un beso suave, tierno, lleno de amor, un beso de esos que de solo verlos te dan diabetes.

Se separaron por que el oxígeno necesitaba entrar en su organizmo, la habitación se estaba volviendo cada vez más caliente, incrementando el calor de ambos chicos.

"Dan, amor, quizás te enojes, pero estoy demasiado cansado para pasar a 'segunda base' ¿te parece que sea mejor para la mañana? Sé cuanto amas el sexo mañanero." Dan se volvió una fresa, quizás nunca se acostumbraría a la sinceridad de Phil en estos casos, él también estaba cansado y para ser sinceros, sí le encantaba.

"Lo único que quiero es sentirte cerca, que tu loción se impregne en mí, sentirme unido a ti." Phil no tuvo que escuchar nada más, despojo a Dan de sus prendas, cuando por fin estuvo desnudo, él también se desnudó.

Ambos se vieron, juntaron sus miradas, sabían que querían, aprendieron que la mirada dice más que cualquier palabra ya que refleja el alma, o algo así decía Phil, Dan sólo lo admiraba hablar.

Phil se sentó en las piernas de Dan, empujándolo con gentileza para que se recostara en la cama, ya teniéndolo así, Phil lo besó, esta vez fue un beso rápido, que bajó desde la comisura de sus labios hacía su mandíbula, bajando hacía su cuello, una de las partes mas erógenas de Dan, la cuál amaba Phil, ya que no podía ni tocarlo por qué hermosos sonidos salían de los labios del menor.

Phil se entretuvo un buen rato ahí, besando y succionando, lamiendo, oliendo, devorando, está más decir que es su parte favorita del cuerpo de Dan, cuando sabia que ya era suficiente, bajo a sus clavículas, su segunda parte favorita, estaban tan marcadas que era imposible no admirarlas, las besó y mordió un rato, encantado de escuchar a Dan gemir por el simple hecho de sentirlo al darle mimos.

Así siguió bajando, hasta llegar a sus muslos, en los cuales simplemente deposito un beso en cada uno.
Sintiéndose satisfecho, atacó los labios de Dan una última vez, antes de soltar un bostezo, Dan creyó que moriría de ternura al verlo, amaba tanto a Phil que todo lo que hacía para él era perfecto.

Dan se acomodó, tomando su respectivo lugar, al derecho de la cama, tomando en brazos a Phil, pegándolo a su cuerpo cuanto más se podía, escondiendo su rostro entre su cuello, oliendo a Phil, tranquilizandose casi al instante en el cual la fragancia tocó su nariz.

Así abrazados charlaron un rato más, hasta que con un gran bostezo Dan volteo a ver a Phil y sin decir nada más, lo besó, dando así las buenas noches.

Así como estaban, desnudos y abrazados a tal punto de que ni el aire podía pasar entre ellos, se quedaron dormidos, sintiéndose protegidos por el otro, algo que no cualquiera tiene con su pareja.

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Perdón, esta medio fofo y corto, prometo hacer el próximo más largo 💓.

xoxo, Kiara.