Capítulo 4: Le robaste a la persona equivocada.

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Me acerque al coche, con una navaja lista para forzar la puerta, pero curiosamente el auto no estaba cerrado, es muy extraño ¿Quién dejaría un coche como este, en una zona tan peligrosa y sin seguro? El tipo debe estar loco. Entre al coche y me sorprendí al ver las llaves pegadas ¿Enserio? Esto no tiene nada de divertido. En fin, nadie tiene por que saberlo, puedo inventar una extraordinaria historia sobre esto.

¡Un segundo! Yo no sé conducir... No creo que sea muy difícil, he visto a Lee hacerlo muchas veces. Ella gira la llave, mueve la palanca, quita el pie del pedal y...

-¡AHHHH! ¡Rayos! ¡PARA! -Pise frenéticamente los pedales hasta que el coche se detuvo. No es tan fácil. Mire alrededor y me di cuenta que aún estaba bastante lejos de casa. Tenía dos opciones, llamar a Lee o intentar conducir este auto.

No quiero llamar a Lee, no, se supone que este es mi primer trabajo sola, no quiero echarlo a perder, pero si no logro conducir esta coche lo terminare chocando y nadie me dará ni cien dólares por él. A menos que...

Justo en ese momento un taxista cruzaba por ahí. Baje del auto rápidamente y le hice la parada. Subí al lado del acompañante.

-¿A dónde la llevo señorita? -Saque mi pequeño revolver y le apunte. Sus ojos se abrieron de sorpresa, sonreí, fue algo natural.

-Tranquilo buen hombre, requiero de sus servicios, pero no en este auto. Baje. No intentes nada o te volare la cabeza de un tiro. Camina, sube a ese auto, me llevaras a donde yo te diga.

-¿A ese auto? ¿Él está aquí? Por favor no me obligues. -Comenzó a mirar a su alrededor asustado, me dio la impresión de que no me temía a mí.

-No lo diré de nuevo, sube al coche. -Al fin me obedeció, subí junto a él. -Evita orinarte en los pantalones quieres, no queremos dañar el auto.

* *

-Gracias, señor, como comprenderá este auto no tiene taxímetro, ¿le parece si le pago a la próxima?

-Sí, solo déjeme ir por favor. -Levante el arma y jale el gatillo, salieron muchas burbujas de jabón, me comencé a reír, amaba ese revolver, lo tome de una tienda de bromas, parecía bastante real pero disparaba burbujas. El pobre hombre parecía que estaba a punto de desmayarse. -¡ESTAS LOCA!

-No debiste decir eso. -Que conste que no tenía pensado sacar el arma real, el mismo se buscó el tiro que le di. Casi amanecía, tenía que alejar el cuerpo. Lo arrastre un poco y lo puse dentro de un contenedor de basura, aquí no es raro ver un cadáver cruzando la calle, pero entre más lejos de nuestra casa este mejor.

* *

-¡LEE! ¿Dónde estás? ¡Lee! -No estaba por ninguna parte, seguro salió por ahí. Salí a la calle, había una vista preciosa que daba al muelle, se podía ver el amanecer desde la puerta de la casa. Me senté en la puerta, para ver como aparecía el sol mientras esperaba a Lee. No tuve que esperar mucho tiempo, apareció casi de inmediato.

-¡Lucy! -Comenzó a decir mientras se acercaba a mí. -No sabes lo que acaba de pasar, hace un rato me acabo de enterar que... -Dejo de hablar cuando vio el coche, pasó sus ojos sorprendidos sobre mí y sobre el coche de lado a lado intentado entender que paso. Sonreí con suficiencia.

-¿Qué te parece? Eso es un buen inicio, yo creo, que después de esto todos me...

-¡¿PERO QUE DEMONIOS ACABAS DE HACER?! -Su respiración estaba agitada, parecía molesta y asustada.

-Yo, solo tome este coche, pensé que podríamos venderlo en partes y...

-¿No sabes de quien es este auto verdad? Acabas de sentenciarnos a muerte. A ver... -Entro a la casa y saco una lona enorme. -Ayúdame a cubrirlo, tenemos que pensar que hacer. -Miro a todos lados. -Vamos, hay que entrar. ¿Nadie te vio?

-No, creo que no.

-¿Crees? ¡No puedo creerlo! ¡Lucy, le robaste a la persona equivocada!

-Tú me dijiste una vez que nunca se le roba a la persona equivocada, que si tenían de sobra no les afectaría.

-¡Es un decir!

-No pensé que un auto causara tanto lio, es lujoso pero...

-¡EL PROBLEMA NO ES EL AUTO, ES EL DUEÑO DEL AUTO!

-¿Temes que te haga algo?

-¿Algo? Nos torturara hasta que le roguemos que nos mate. Luego lo divulgara por toda ciudad Gótica para que nos tomen como ejemplo.

-Creo que estas exagerando, solo tenemos que deshacernos del coche, podemos culpar a otro y negarlo en caso de que nos pregunten... ¿Quién es el dueño?

-El no vendrá a preguntarnos si nosotros le robamos, nos matara. Lucy, acabas de robar el auto preferido del Joker.

 Lucy, acabas de robar el auto preferido del Joker

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Lucy Quinzel La hija de Joker  y Harley QuinnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora