Lucy Quinzel La hija de Joker y Harley Quinn

Capitulo 23: Necesito ayuda.

Me habia dado un refrescante baño, aunque doloroso por mis golpes, tengo recuerdos borrosos, lagunas mentales, ni siquiera se que dia es o que hora y esto me tiene abrumada. Joker debe estar molesto al no encontrarme, lo ultimo que recuerdo es estar viajando en un coche con Damian y luego... Estaban tratando de ahogarme en un pozo. Antes de salir del baño escuche voces.

-¿Ya se lo djiste? -Era una voz de mujer.

-Aun no, esta en la ducha ahora, ella no... No esta bien. Necesita ayuda. -¿Con quien estaba hablando Damian?

-Podemos ayudarla.

-No en ese sentido. Dejen que la ayude, necesita ver a un especialista.

-No olvides que hicieste una promesa Damian y debes cumplirla.

-Lo se. Solo denme un tiempo.

-Te daremos un mes.

-Es muy poco...

-Es lo unico que tendras. -Escuche a la mujer salir, espere un poco y despues sali. Damian estaba sentado en la cama con los codos en las rodillas y las manos en la cabeza.

-¿Todo bien? -Camine despacio hacia el, me sentia extraña, me habia dejado algo de ropa; un vestido holgado de manga larga y hasta el tobillo, color gris, aunque parecia mas un camison. Damian levanto la mirada y me observo un momento.

-Duerme un poco mañana nos iremos.

-¿A donde? Tengo que preguntarte muchas cosas.

-Lo se, solo ahora no, ¿Esta bien?

-¿Cuanto tiempo llevo fuera de Gotham?

-Hoy son seis dias.

-¡Seis dias! ¡Joker va a matarme!

-Hey, no. Tranquila. -Me acerco a su lado. -Estaras bien.

***

Todo estaba borroso. Abri los ojos despacio y me encontre con una habitacion blanca, con mucha luz natural. Mis fosas nasales se inundaron de olor a lavanda, ya no me encontraba en el castillo. Estaba recostada en algo acolchado, un sofa tal vez. Cuando iba a incorporarme la voz de Damian me detuvo, al principio crei que se habia dado cuenta que habia despertado, pero no.

-Sr. Wayne, lo que me pide va en contra de las reglas de esta institucion.

-No es una mala persona, solo necesita ayuda.

-Su intento de sobornarme...

-No es un soborno, vealo como una donacion para usted, para su retiro. -Hubo un momento de silencio.

-Esta bien Sr. Wayne. Me encargare personalmente. Pero antes necesito llenar un formulario. ¿Puedo preguntar por que esta inconsiente?  

-Le di algo par mantenerla tranquila. -¡No puede ser! ¡Damian me drogo! Y creo que no es la primera vez.

-No quiero saber. Bien, ¿Cual es la razon de que usted crea que ella necesita ayuda?

-No soy psicologo, pero Jane vivio una situacion traumatica, despues de eso ella... Cambio.

-¿A que se refiere con cambio? -Escuchaba a esa mujer garabatear en una libreta.

-A veces despertaba y me reconocia, otras veces despertaba e ignoraba quien era, varias veces me dijo que su nombre era otro. -¿Yo hice eso? ¡No! ¡Ni siquiera lo recuerdo!

-Interesante... ¿Cuando cambiaba su nombre, cambiaba su actitud?

-Si.

-Bien, creo que se que le pasa, Sr. Wayne. Pero antes de dar un diagnostico necesito hablar con ella. Saber que tanto afecto ese evento traumatico.

-Le afecto mucho.

-¿Que fue lo que paso? -Escuhe a Damian suspirar fuerte. ¡Que diga de una vez que me paso!

-La secuestraron. -Creo que ya me acuerdo. -La violaron. -El impostor. -La torturaron. -No pude aguantar mas y me incorpore de un salto. Damian y una mujer de mediana edad, morena y de cabello corto me miraron sorprendidos. En el escritorio de la mujer habia una placa 《Dr. Joan Linet, Directora de Arkham Asylum》Recuerdo ese nombre, la directora de mi antigua escuela queria que tomara terapia con esta psiquiatra. 《Cree que estas loca》Mire alrededor de la habitacion buscando es voz, una fraccion de segundo despues me hizo darme cuenta que la voz estaba en mi cabeza. 《Te encerrara en el manicomio》

-Yo... -Balbuce. -Necesito ayuda.

**Chicago**

-¡Mr J! -Harley abrio con cuidado la puerta. -¡Regrese! ¡Tenemos que...! -Se quedo sin palabras al ver la casa vuelta patas arriba.

-Un par de dias sin ti Harley y al payaso se le vuelve un caos la casa. -Murmuro la peliroja.

-¡Jonny! -Grito al ver al hombre de traje bajar las escaleras. -¿Donde esta Lucy y mi puddin? -Antes de que Jonny pudiera responder Joker aparecio. Estaba desaliñado; una insipiente barba de dias crecia por su barbilla, su cabello estaba sucio y usaba la ropa de cinco dias atras.

-¿Donde estabas? Mi arma no se limpiara sola. ¡No me contradigas! -Harley parapadeo y retrocedio asustada cuanto el solto una carcajada siniestra.

-Algo le pasa a mi puddin. -Murmuro bajo para que solo su amiga escuchara.

-¿Donde esta Lucy, Joker? -Hablo la pelirroja dispuesta a ayudar a su amiga.

-Debe andar por ahi. -Giro alrededor de si. -Ayer pasamos el dia juntos. Fue un fin de semana interesante.

-Hoy es Miercoles. -Respondio Poison, el parpadeo procesando lo que habia escuchado.

-¿Miercoles? ¡Harley, que bien que volviste! Estaba a punto de ir por ti a la prision. ¡Te extrañe pastelito!

-Mr. J, de verdad me esta asustando. -Dijo Harley con voz temblorosa.

-¿Cuando llegaste chica planta? -Joker lucia mal, mas demente de lo usual. Nego sonriendo, subio las escaleras y desaparecio dentro de su habitancion. Cuando escucharon la puerta cerrarse la pelirroja fue la primera en hablar.

-¿Que le pasa?

-Ha estado mezclando medicamentos. -Dijo Jonny. -Lucy desaparecio y no hemos podido ubicarla. -La rubia solto un grito ahogado.

-¿Porque el payaso no la ha buscado? -Poison se cruzo de brazos.

-Lo hemos intentado, su ultima llamada fue a casa de los Wayne. Seguimos varias pistas a travez de las camaras de seguridad de las calles y eso nos llevo a un afabrica abandonada. Encontramos su ropa y mucha sangre pero nada mas.

-¿Crees que ella... Esta muerta? -Susurro harley con la mirada cristalizada por las lagrimas.

-Al tercer dia que desaparecio, llego algo por correo. Un video. -Jonny fue por su computadora y las guio a la estancia, donde dio play al video.

-¡Quitalo! -Grito Harley con las lagrimas por todo su rostro. -No puedo seguir viendo...

-El video es muy largo, aun con todo esto no sabemos de quien se trata. -Dijo Jonny mientras quitaba el video.

-Harley. -Poison le acariciaba la espalda tratando de reconfortarla. -Tranquila, lo encontraremos y le haremos pagar.

-¿Y si ya la asesino?

-La vengaremos entonces. -La rubia asintio.

-Busquemos a mi pequeña.