Lamento la tardanza pero acá esta el capítulo, espero que les gusté.
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La venganza es dulce
Tallé mis ojos al sentir el intenso rayo de luz sobre ellos, de un salto salí de la cama para luego entrar al baño hacer mis necesidades, minutos después terminaba de colocarme esos jeans desgastados con esa polera de marca Chanel, arregle un poco mi cabello y me colee hasta la habitación de jazmín donde la encontré envueltas en las colchas.
- hey rubia- susurre dándole un leve empujón a su hombro.
- uhmm.. - tallo sus ojos para luego mirarme detenidamente- buenos días.
- buenos días- sonreí - oye necesito un favor- murmure torciendo mi boca.
- lo que sea- bostezo para luego sentarse sobre la cama y estirar sus huesos.
- ¿me prestarías tu auto? - mordí mi labio nerviosa y esta carcajeó.
- claro castaña- giro sus ojos divertida a lo que se acercaba a su bolsa y sacaba las llaves- son tuyas- Exclamo extendiéndolas.
- lo cuidaré como si fuese mío lo prometo - dije tomando las llaves.
- lo se- sonreí- recuerda, úsalo para tu beneficio- susurro moviendo sus cejas un tanto divertida.
- obvio- bese su mejilla- ya tengo que irme a la universidad, come lo que quieras, el refrigerador esta llenó- sonreí amable y salí de la habitación para luego correr por las escaleras, tomar el sweater y mi bolsa que se encontraba en el armario, sonreí ante el espejo y me adentre al elevador.
Estacione el convertible rojo junto a una motocicleta, asegure todo y salí del auto moviendo mis caderas hasta la entrada de la universidad, todo estaba tranquilo y ya se podían oír los murmullos de los estudiantes, cruce el pasillo hasta las escaleras cuando sentí que mi brazo fue alado obligándome a entrar en una de los cuartos de limpiezas, estaba apunto de gritar cuando una mano tapó mi boca, nerviosa mire a mi alrededor para encontrándome con esos ojos mieles que ya conocía muy bien.
- buenos días curvas- escuche el susurro entre la oscuridad, cerré mis ojos con molestia cuando la luz fue encendida y choco contra mis ojos- ¿cómo estas cariño?- continuo hablando cuando ya había destapado mi boca.
- ¿en qué mierda estabas pensando?, ¿querías matarme del susto?- exclame molesta fulminandolo con la mirada.
Soltó una sonora carcajada dejando ver su hermosa dentadura, desvíe la vista irritada e intente salir de ese lugar pero sus manos me detuvieron.
- negó- no te dejare ir todavía curvas- sujeto mis manos hasta la altura de mi cabeza- a demás no dormimos juntos anoche así que se dice "buenos días"- exclamo burlón.
me retorcí para zafarme pero este sólo apoyó mi cuerpo a la pared, acorralandome con su cuerpo.
- sueltame o grito- amanece provocando de nuevo si risa.
- Hazlo- se encogió de hombros- creerán que gritas por placer, no sabes para que utilizan este cuarto- susurro perverso.
Arrugue mi nariz asqueada, yo misma había presenciado una de aquellas escenas y el simple hecho de estar en este mismo lugar me producía náuseas.
- ¿qué quieres?- logre decir cuando este me miro directamente a los ojos.
- lo mismo que anoche- frunció ceño - eso de dejarme duro no se le hace a un hombre cariño, y menos a uno como yo- sentí su respiración sobre mis labios, a lo que voltee la cara a otro lado.
- ¿un hombre como tu? - reí - ¿por qué te crees tan especial?- pregunte con la mirada desafiante.
- lamió sus labios- poco a poco te lo probare- acerco su rostro al mío y con su perfilada nariz comenzó a rozar mi mejilla hasta llegar a mi cuello donde mi piel se erizó al sentir su pesada respiración sobre este- hueles tan bien- susurro ronco, dejo un rastro de cortos beso en la curva de mi cuello, atrapo mis labios con los suyos para luego comerme la boca, nos separamos jadeantes a falta de aire y unió su frente a la mía mirándome a los ojos.
- seguirás en resistencia- susurro, sin quitar la vista de mi.
- sueltame justin, llegaremos tarde a clases- mi voz se quebró al sentir una de sus manos liberarme, deslizo uno de sus dedos por mi abdomen y alzo un poco mi camisa dejando ver algo de mi ombligo.
- no te preocupes por las clases- beso mis labios fugazmente- justo ahora te estoy dando una.
No pude evitar reírme, me miro mordiendo su labio y con mi mano libre acaricie su sedoso cabello.
- ¿a sí? - asintió- ¿qué clase?- pregunte divertida.
- anatomía- Acaricio mi cuerpo con su mano- sexualidad- apego su cuerpo al mío al punto de sentir su entrepierna palpitar sobre mi vientre- algunas páginas del tan famoso libro "kamasutra"- su mano bajo hasta mis nalgas donde le dio un leve apretón- podría decirse que son clases integrales, de todo un poco.
- eres un asqueroso- murmure burlona- ya deja que me vaya.
- ¿y romper este momento? No
Lo creo - tomo mi mentón haciendo que lo mirara - debo vengarme de alguna forma ¿no lo crees?.
-negué- no, ahora salgamos de aquí antes de que alguien entre.
- nadie entrara a menos que quieran tener sexo, en ese caso tendremos que buscar otro lugar-dijo con una sonrisa burlona pegada a sus labios.
- ¿qué tengo que hacer para que me dejes ir?- pregunte mojando mis labios.
- ho curvas- hizo un extraño sonido con su boca- acabas de atinarle al clavo, hay muchas opciones de como convencerme- mordió su labio- pero dejaré que tu escojas.
- ¿me darás opciones?- negó- tengo que descubrirlas- exclame robándole una sonrisa.
- exacto, sólo así te dejare ir, pero si no lo descubres a tiempo ... Creo que termináremos teniendo sexo justo aquí- señalo la pared y yo gruñí enojada.
Comencé besando sus labios hasta el punto de robarle el aliento pero eso aún no lo convencía, ladee mi cabeza para tener una mejor vista de su cuello, roce mis labios sobre este y lo sentí estremecerse, comencé por besos fugases que luego se convirtieron en mojados dejando pequeños moretones (chopones) producidos por las mordidas pero aún así no terminaba de convencerlo por completo, hasta que recordé el punto débil de los hombres DIN DIN "su entrepierna cariño" con un impuso abrace mis piernas de su cintura con cuidado de poner mi vientre contra su bulto, su gemido fue más que gloria para mis oídos, me frote un poco sobre este y me acerque hasta su oído.
- ¿acabo de convencerte no es así?- susurre antes de morder el lóbulo de su oreja.
- asintió- hasta el punto que no quiero que te vayas- beso mis labios delineandolos con la punta de su lengua.
Trato es trato- susurre besando sus labios por última vez antes de bajarme de su cintura y caminar hasta la puerta.
- fue un placer hacer negocios contigo- murmure divertida.
- el placer fue todo mío- exclamo con tal descaro que una sonrisa apareció en mis labios, provocando la suya.
Una hora con cinco minutos llevaba oyendo al profesor de cálculo tallé mis ojos y apoye mi cabeza de una mano, esta era la clase más aburrida y no entendía una mierda ... A demás de haber llegado 30 minutos después de que hubiese empezado, causando así el enojo del profesor. Mis lidia escucharon el sonido del tiemble provocándome una soñolienta sonrisa, dieron finalizada la clase y recogí mis cosas para luego caminar hasta la cafetería, este día estaba completamente sola, David acompañaría a su madre a visitar a una tía enferma y Jessica tenía cita con el odontólogo, arrastre mis pies hasta la barra donde tome lo primero que encontré, camine hasta la primera mesa y me deje caer sobre esta. Tome el emparedado entre mis manos para luego darle un bocado, y dos tragos a mi coca- cola, concentrada en mi desayuno escuche el chocar de la bandeja contra la mesa, alce la vista y me encontré unos ojos azules adornados por unas extensas pestañas.
- ¿puedo sentarme?- murmuro el Moreno a lo que yo me encogí de hombros sin importancia.
- Summer lamento lo de anoche- continuo hablando Diego al que me obligo a mirarlo a los ojos.
- no pasa nada- torcí mi
Boca devolviendo mi vista a el emparedado.
- no, si pasa. No debí engañarte de ese modo, peo no tenía elección- frunció ceño y mío a otra dirección.
- no me engañaste sabes, me hiciste ver la realidad- sonreí amarga- eres un idiota, uno más de los títeres de justin ¿no es cierto? - estuvo apunto de hablar pero lo interrumpí - y si tienes opción, por que si tienes valor para follarte a cualquiera puedes poner a justin en su lugar, ¿es que acaso te da miedo?- pregunte enarcando una ceja.
- no digas tonterías, no me da miedo- farfullo- es sólo que no lo conoces, acabas de llegar y ya te crees con derechos- exclamo.
- te estas equivocando Diego, si quiero ayudarte. Por qué aunque te sorprenda yo se más de justin que tu- exclame mirándolo fijamente.
Sonrió divertido y comenzó a comer de su desayuno, ambos nos mirábamos de vez en cuando y sonreíamos amistosos el uno al otro, no era tan patético después de todo.
- oye, esos dos chicos que andan contigo, ¿cómo se llaman?- pregunte rompiendo el silencio.
- el Rubio de ojos grises es Stephen Heller, y el pelirrojo es Austin Moore- murmuro.
- ¿podrías presentármelos? Necesito amigos, la verdad eso de estar sola no viene conmigo.
- ¿amigos?- pregunto con una sonrisa perversa.
- no has eso- golpee su hombro divertida a lo que los dos explotamos en carcajadas.
- cuénteme el chiste que también quiero reírme- se escucho tras mi espalda. Voltee para encontrarme a justin con los ojos oscuros y una sonrisa un tanto seca, camino hasta la
Mesa y se dejo caer a mi lado.
- hey bro- saludo Diego pero este sólo lo miraba fijamente con el rostro neutro.
- ahora muy amigo de curva- exclamo con la mandíbula tensa. Me apresure a responder.
- si, ¿por qué ? ¿Hay algún problema?- dije desafiandolo con la mirada, este dirigió su vista a mi y sonrió falso.
- no, para nada. ¿Por qué lo habría?, ¿no es cierto Diego? - pregunto a lo que Diego asintió tímido.
- bueno como te seguía diciendo Diego, quiero conocerlos- musite ignorando a justin.
- claro, les diré justo ahora- se levantó de la mesa y tomo la bandeja ya vacía- adiós.
¿Realmente le tenía miedo a justin? ¿Qué cosas las hará este cretino?.
- es mejor un desayuno de dos- susurro probando de su comida.
- eres increíble, de verdad - exclame girando los ojos algo irritada.
- ¿por qué lo dices?- dijo de lo más tranquilo bebiendo de su 7up.
- acabas de correr a tu "bro"- dije la última palabra imitando su voz a lo que soltó una carcajada.
- es sexy tu forma de hablar- susurro sensual a lo que fruncí ceño- y no, no lo corrí, el mismo se fue, no le veo el problema.
- idiota- susurre irritada.
- quiero hacerte una pregunta Summer- exclamo llamando mi atención.
- depende de cuán difícil sea su respuesta- murmure sarcástica.
- ¿dónde esta el nerd que siempre se la pasa tras tu sombra? - hizo gesto pensativo- uhmm ¿David? Si David .
- no le digas así, que no tengas su inteligencia no quiere decir que debas insultarlo- farfulle- a demás no es tu problema donde este.
- auch- hizo una mueca de dolor- eso dolió, no seas tan dura conmigo curvas, sólo quería saber de el.
- y yo quiero tener sexo con Mario Casas- Moví mis cejas - ¿lo tengo? no, veras no todo se puede tener.
- pero puedes tener conmigo, soy mejor que el en muchos sentidos- sonrió arrogante.
- solté una sonora carcajada - nunca vuelvas a repetir eso, quedas en ridículo- bromeé.
- pude hacerte reír vale la
Pena, el nunca podría hacerte reír con tanta facilidad como lo hago yo- murmuro divertido.
- hará mejora cosas que eso- lamí mis labios- me hará gemir de placer- susurre perversa.
Sonó la campaña y nos levantamos de
La mesa, resulto que tocaríamos juntos en la siguiente clase, caminamos en silencio hasta el
Salón y antes de entrar sentí un suave beso sobre mi cuello, gire sobre mis talones y me
Contra la mirada divertida de justin a lo que le hice una señal obscena (.I.), cada quien se acomodó en su puesto y comenzó la clase.
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Mis tacones sonaban contra el duro pavimento, mis piernas junto con mi cintura se movían en ritmo sensual pero rápido, el chiflido y comentarios de los chicos no salían desapercibidos a lo que sólo sonreí resignada y camine con la vista en alto, a poc0s metros estaba el auto de mis sueños, con el prostituto de mis sueños .. Espera, stop..¿ Acabas de decirle prostituto a justin ?¿ Y además de tus sueños?.. Que bitch Summer que bitch.
- te llevo- exclamo justin el cual estaba apoyado de la carrocería plateada de su auto.
- traje auto- murmure divertida antes de guiñare un ojo y subirme al auto de jazmín. Baje los vidrios y la cara de justin se asomó por la ventana.
- ¿te irás sin despedirte ? - exclamo con una sonrisa.
- vete al diablo- musite con una sonrisa burlona. Acelere el auto y me aparte de el.
- ¿ni un Besito ?- escuche su grito a lo que solté una carcajada.
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Acá dejo el capítulo lamentó si esta corto pero necesito decirles algo importante, no se sí para ustedes lo sea pero para mi si. Bueno iré al grano, como algunas sabes en el capítulo anterior les comenté que estaba por comenzar las clase, justo mañana empiezo y todos se me Complico ... La verdad no se que hacer con mi tiempo .. Si antes que no hacía casi nada tenía poco tiempo ahora que entrare a la secu no saber ni lo que es tiempo ... Con las tareas, las clases extracurriculares, los deberes y etc etc etc no tendré tiempo para novela, así que pensé en dejarla y no continuar ...
Pero esperen no se asunten, antes de que tomara la decisión una personita muy especial para mi me dijo que no la dejara, que no pidió hacer eso que sería muy irresponsable de mi parte, después se analizarlo con un café ( mentira porque fue con un baso de vodka, pero quería hacerme la interesante ) bueno bueno después de analizarlo llegue a la conclusión de que no podía decepcionarlas de ese modo así que esa personita especial se ofreció a ayudarme con mis deberes a cambio de que continúe con la novela, el es mi primer lector, así que bueno ya saben a pesar de todo el trabajo que tendré siempre tendré tiempo de publicar, dos días a la semana, les mentiría si les diera un horario fijo de como publicaría, sólo se que apenas tenga tiempo libre .. Creo que habrá cambios, no podré contarles mis "anécdotas " y creo que no ni siquiera los refranes de mi abuela .. Ya saben comentar y votar si te gusto el capítulo, si quieres que si cuente mis anécdotas y los refranes, si tienes preguntas, si me amas, si quieres dólares, naaa pendejadas no sueñen .. Jaja saben que amo sus sensuales comentarios así que PLEASE comenten y obvio que voten ..
Refranes de la abuela.
Amor de lejos, amor de pendejos - Isabella Casanova.
Gracias abuela por decirme estas dulce palabras cuando estaba en una situación nada linda, de verdad casi hicieron que parara de llorar .. Te amo mi demencia.
{Gaby}
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la venganza es dulce
Fiksi Penggemarchicas por favor no tomen el consejo de Summer nunca, recuerden que solo es un personaje ficticio