Mi Angel Guardián (Zarcort X Town)

Angel

Narra Town

Cuando Miguel y yo comenzamos a salir no tuve problema alguno, es decir, no me moleta el hecho de que ambos seamos hombres, soy de mente abierta, pero últimamente me esta comenzando a afectar el muy toxico y venenoso entorno en el que vivimos, homofobicos que no paraban de insultarnos por todos los medios posibles, no hemos podido tener ni una sola cita en donde alguien no nos haga una mala cara o un desagradable comentario, Miguel siempre me defiende y se muestra fuerte ante esos ataques pero cada uno de ellos se queda en mi mente, me hace sentir mal y me molesta ver que la mayor parte del odio es para mi Miguelito. No se como pero en poco tiempo me encariñe mucho con el, adoro como me trata y las lindas cosas que hace por mi, no imagine que fuera tan dulce, Juan dice que es un tonto enamorado pero yo creo que es adorable.

Una vez mas ahí me encontraba, leyendo los horribles comentarios homofobicos que dejaban los haters, Miguel no dijo que no los leyera pero es inevitable, soy muy masoquista al hacer esto, lo se.

Zarcort: ¿Alvaro que estas haciendo? No leas eso por favor. - Obviamente se dio cuenta al ver mis ojos cristalizados.

Town: Lo siento. - Dije eso como si hubiera hecho algo malo. Miguel tomo mi rostros con ambas manos y me miro fijamente.

Zarcort: Mi amor no tienes que prestarle atención a esa gente, ninguno de ellos entiende lo que sentimos. 

Town: Lo se pero...

No podía soportarlo mas, quería llorar y eso hice, llore y llore como un niño pequeño, hasta que sentí el rose de unos labios estampar con los míos creando una sensación hermosa en algo que se podía llamar beso, esos eran los labios de Miguel quien me miro fijamente con preocupación en sus ojos.

Zarcort: No llores mas, no soporto verte sufrir.

El había soportado todas mis depresiones, buscando la forma de animarme y hacerme feliz pero yo siempre decaía otra vez.

Después de esa mirada llena de preocupación me besó nuevamente, esta vez fue un beso mas intenso y romántico como de telenovela, sus labios se deslizaban ferozmente con los míos y nuestras lenguas chocaban entre si, me gustaba aunque no dejaba de ser un poco extraño, es la primera vez que nos besamos así, finalmente nos separamos por falta de aire y un hilo de saliva era lo único que nos unía.

Zarcort: Ya no aguanto mas. - Dijo con voz ronca y seguidamente me lanzó a la cama con fuerza y prosiguió a atacar mi cuello dando lamidas y mordisco de manera desesperada, mientras que yo solo gemía y jadeaba, disfrutando ser devorado por el hombre que amo.

Después de seguramente dejarme marcas de mordiscos en el cuello, con movimientos rápidos quitó mi polera y pantalón dejándome solo en ropa interior. Me observó por completo con sus ojos llenos de lujuria, haciéndome sonrojar de vergüenza y luego comenzó a lamer y mordisquear mis pezones causándome un cosquilleo en el cuerpo y mas gemidos imposibles de ocultar.

Town: A-ah! Zarcort!

Zarcort: Dime Miguel.

Su voz ronca acompañada de sus juegos sexuales me excitaban cada vez mas. El se quito su sudadera dejando ver su torso descubierto con esos tatuajes que tanto me encantaban, deleitando mis ojos con lo que veía.

Me besó con furia como si quisiera romper mis labios, pero solo me mordió el labio inferior irritándome al soltarlo y dejándome con las ganas de "seguir jugando"

Zarcort: Esto me está exhaustando, tendrás que hacer algo por mi.

Town: A-ah! a q-que te r-refieres?

Zarcort: Ya verás. - Dijo sonriendo pícaramente.

Comenzó a desabotonar su pantalón que aun cargaba puesto y no tardé en ver su gran miembro erecto, me asuste al imaginar "eso" entrando en mi.