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Narrador Omnisciente.

WonGi tomó una bancada de aire y entró al edificio.

Saludó al señor Lee, quien sacudió su mano, asombrado al ver a la chica luego de cuatro meses.

Presionó el botón con el número '13' y comenzó a arreglar su ropa.

Bajó un poco su falda de jeans, aliso con sus manos su blusa blanca y volvió a colocar su chaleco de seda gris. Su vista se centró en sus vans blancas, procurando que el nudo fuera perfecto.

Dejó que su cabello cayera sobre ambos hombros mientras caminaba hacia la puerta que la llevaría a cumplir una de sus más grandes locuras.

"Sonríe, nada de tartamudeos, segura de ti misma y no te muestres débil. No es tan difícil, WonGi, tú puedes..."

La puerta se abrió al mismo tiempo que los labios de la chica se volvían una perfecta y falsa sonrisa. Pero, al momento de ver al, ahora, rubio, sonrió.

—Hola— Frío. Eso es lo único que pudo escuchar WonGi, un, casi, obligado "Hola" diferentes a todos los que había recibido de su parte, lleno de...nada.

—Hola—la chica sonrió y se hincó al momento en que Dubu comenzó a arañar sus piernas desnudas debido a la falda.

—Si te duele, ya debes saber dónde está todo, ¿o lo olvidaste?— "Tal cual como me olvidaste a mí y a nuestro amor".

Estoy bien, gracias— "Viendo tu cara, todo está bien, escuchando tu voz, todo está perfecto".

Pasa.

—Gracias.

La chica se levantó y se internó en el apartamento. Su aliento por algunos segundos se cortó y simplemente se congeló. Estaba absolutamente todo cambiado.

El sofá de cuero café mediano, había sido reemplazado por uno de cuero, grande y de color negro. En donde antes estaba una mesa de madera, ahora había un mueble donde reposaban las llaves del auto de TaeHyung, una instax de él junto con DoHee, pañuelos y algunos accesorios para salir a trotar. En un costado del departamento había una larga mesa, igual a las de los pubs.

Claramente, él quitaría las fotos de ambos, pero lo que no sabía era que las reemplazaría con nada. Lo único que se acercaba a una foto, eran varias camisetas de jugadores destacados de Basketball enmarcadas.

—Saldré en algunos minutos más, estaré por mientras en mi cuarto.

—El rubio te viene bien—susurró mientras los pies del chico se dirigían al lugar antes mencionado.

Una sonrisa arrogante se formó en su rostro. "Me gusta tu nuevo corte de cabello y que lo hayas aclarado, dejando algunas partes doradas, te vienen de maravilla, WonGi".

El timbre del lugar hizo eco en el departamento. Dubu gruñó y TaeHyung se apresuró a abrir la puerta.

—Siento el retraso—la voz de la chica se mezcló con los ladridos de Dubu.

—Las princesas siempre llegan tarde, ¿no?

—No hables tonterías—rió—. Iré a buscar un vaso de agua.

En ese momento, WonGi quiso convertirse en una roca.

La mirada de DoHee se cruzó con la suya, aquellos segundos en los que los ojos estuvieron fulminando a la chica parecieron horas para ella.

Finalmente, la mirada cambio a una de desagrado y la chica se internó en la cocina. El rubio la siguió.

"Explicaciones. Tendrás que dar explicaciones, TaeHyung, por mi culpa, Lo siento. Pero, aunque me sienta la zorra más grande del mundo, te necesito recuperar, no te noto feliz y quiero verte feliz, aunque no sea a mi lado."

University ➳Segunda temporada de 'Whatsapp'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora