Resumen: A dos años de haberse casado su matrimonio parece no ir bien, Sam nota a Freddie distante y Freddie cree que Sam paranoica. ¿Quién tiene la razón?
Edades: 27.
Sam
—. ¡VETE DE MI CASA!—. Grito Sam montada en la cama que solía compartir con Freddie—. ¡NO QUIERO VERTE NUNCA MÁS!
—. ¡CLARO, TAN TÍPICO DE TI APROPIARTE DE TODO! ¡TAMBIÉN ES MI CASA! Pero quédate con ella, espero te ahogues con recuerdos cada que recorras cualquier rincón de esta maldita casa y ¡QUIERO EL DIVORCIO!—. Le grito Freddie cuando tomo una maleta con sus cosas y abrió la puerta del cuarto. Sam le tiro la lampara junto a ella sin ningún resultado puesto que está solo golpeó la pared.
—. ¡PUES BIEN, TE DARÉ EL MALDITO DIVORCIO! ¡NO SE QUE ESTABA PENSANDO CUANDO ACEPTÉ CASARME CONTIGO!—. Le grito Sam desde la puerta de la que solía ser su habitación.
—. ¡NI YO CUANDO TE PEDÍ QUE LO HICIÉRAMOS! ¡TE VEO CON EL ABOGADO!—. Le respondió Freddie desde la puerta de la casa, su respuesta llegó acompañada de un portazo y minutos más tarde este fue seguido por el sonido del auto al irse.
Sam quedó sentada en el suelo del pasillo sintiendo la soledad de la casa, ingresó al cuarto poniéndose una chaqueta y los primeros pares de zapatos que encontró, salió de la casa subiéndose en su auto y conduciendo por las vacías calles de Seattle a la casa de su mejor amiga. Llego a la casa de dos pisos y toco la puerta de esta repetidas veces llorando, las lágrimas corrían sin compasión por sus ojos, Sam había intentado limpiarlas pero estas seguían saliendo, toco la puerta de nuevo y segundos después su mejor amiga le abrió la puerta. Carly no tuvo tiempo de hablar cuando Sam ya había corrido a abrazarla. La peli negra pasó su mano varias veces por el cabello de esta, dejando que su mejor amiga se desahogará en su pecho. Encaminó a Sam a los muebles de la casa y dejo que está llorara en sus piernas.
—. Se acabó carls—. Le dijo Sam a su mejor amiga entre lágrimas—. Él no quiere verme y yo tampoco quiero hacerlo.
—. ¿Qué ocurrió Sam?—. Le pregunto Carly levantando el rostro de su amiga entre sus manos.
—. Lo encare, le dije que se estaba distanciando, le pregunté si ya no me amaba, sí había una tercera persona. Me dijo que no, me dijo que el no se estaba distanciando me llamo paranoica. Discutimos, nos gritamos y luego le dije que se fuera, me pidió el divorcio.
—. ¿Se lo darás?
—. Lo amo carls, pero si él no me ama. No puedo atarlo a mí. Le grite acepte dárselo
—. Creía que ustedes estaban hechos el uno para el otro. Que durarían mucho más que Brad y yo.
—. Yo también carls, creía que tendríamos una familia, ya sabes, la casa grande con los niños que corren tras el perro. Habíamos planeado tener hijos, planeamos tener muchos, pero lo dejamos como un plan a largo plazo. Ahora de nada sirve porque ya ni siquiera estamos juntos—. Sam sintió un nudo en la garganta al decir lo último. Llevo sus manos a su rostro tratando de acallar las lágrimas. Carly la abrazo y Sam puso su cabeza en el hombro de esta, le dolía ver a su mejor amiga así, tan sola y deprimida.
El sonido de alguien bajando las escaleras alertó a Carly, vio a Brad vestido con ropa casual y un notorio rostro de cansancio, este se detuvo al ver a Sam sentada en el sillón de su casa llorando a mares en el hombro de su esposa.
