Capítulo 1

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̶̶ Yo Samuel Vandergirl, en pleno uso de mis facultades, nombro a mi hijo Lucas Vandergirl, como mi heredero universal, el cual deberá hacerse cargo de los negocios familiares y dar a su madre y hermanos una vida digna, con todas las comodidades a las cuales están acostumbrados. Sin embargo, Lucas podrá acceder al manejo de las empresas y de todos mis bienes, solo si llegara a cumplir las siguientes condiciones:

1. Deberá trabajar como empleado normal de las empresas Vandergirl Inc., bajo la supervisión de Chris Russo, por el lapso de un año, de esa manera conocerá la empresa de pies a cabeza.

2. Deberá contraer única y exclusivamente matrimonio con la Srita. Anielka Becker, por el periodo de dieciocho meses, la boda deberá realizarse un mes después de que se haya leído el testamento.

̶̶ Si estas condiciones no llegaran a cumplirse, Lucas no obtendrá nada de las empresas, quien quedaría cargo de mis bienes será Chris Russo, mientras que mi hijo menor Joseph Vandergirl, cumpla su mayoría de edad.

****

̶ ¡Pero papá!, no pueden pedirme que me case con el patán de Lucas ̶ exclamo totalmente fuera de sí, el matrimonio ya no forma parre de mi lista de cosas por hacer, una vez lo considere y fue una idiotez, además no he visto a Lucas hace mucho tiempo y la verdad no tengo nada agradable para recordar de él.

̶ Lo se hija, pero se lo debes al Sr. Vandergirl, recuerda que siempre te trató como a un miembro de su familia, cuando tu madre murió él se encargó de traerte de vuelta y eso jamás podré olvidarlo.

̶ Y siempre le estaré agradecida, pero no es algo simple lo que pide, es pasar dieciocho largos meses con el imbécil de su hijo ¡año y medio! ¿Te imaginas? ̶ Tanto mi padre como yo le estaremos eternamente agradecidos al Sr. V, recuerdo cuando mis padres se divorciaron, tenía diez años. Mi padre llevaba toda su vida como chofer de la familia Vandergirl, y mamá aspiraba a algo más, por lo que un día le pedio el divorcio y me llevo a con ella a España, donde tuvo más novios que bragas. Cada mes era uno diferente y la odie por separarme de papá. Venia cada verano a visitar a mi padre y lo pasaba de lo lindo con Megan e Isaac Vandergirl, a excepción de Lucas que siempre fue un dolor en el trasero. Me jugaba las bromas más pesadas, me pegaba o insultaba, mamá decía que era su forma de demostrar que yo le gustaba. ¡Que estupidez!

Después de cumplir quince años no regrese y jamás volví a verlo. En ese tiempo mamá murió, no soporte la idea de perderla, pensé volverme loca de dolor y tristeza...

̶ ¿Anielka? ¿Estás bien muñeca? ̶ pregunta papá al ver la cara de idiota que he puesto.

̶ Emmm si, solo que no puedo creer esto.

̶ Te apoyare en todo lo que decidas hacer, incluso si decides negarte.

̶ ¡Ni siquiera me gusta! ̶ digo totalmente decepcionada, como me puedo casar con alguien a quien no he visto en años. ¿Y si es feo? O peor ¿no le gusto?

̶ Eso no es cierto, cuando tenías quince estabas embobada por el ¿recuerdas? ̶ por supuesto que lo recuerdo, pero no voy a admitirlo y menos delante de mi papá, aún recuerdo la noche que Lucas me dio mi primero beso, fue mi último verano.

̶ ¡No lo recuerdo! Además, no lo he visto en años, tú mismo dices que es un desobligado, que en su personalidad la responsabilidad brilla por su ausencia.

̶ Si claro ̶ dice papá ̶ solo recuerda hija que le debemos mucho a esta familia, más yo, han pagado todo mi tratamiento desde que me detectaron cáncer, gracias a ellos y a Dios estoy vivo aun.

No te enamores Donde viven las historias. Descúbrelo ahora