Una nueva luz en el camino 7

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Capitulo 7: Descubrimientos

*Camila*

Hoy es lunes, ya casi es de noche y no hay rastro de Alexa al parecer no aparecerá por hoy en el hospital, desde ayer no puedo dejar de pensar lo que me dijo, "quien lo pensaría, tiene una novia, trate de imaginármela, me imagino que la niña se ha de parecer a ella, puff ya están apagando las luces pero yo aun no puedo dormir, no me deja dormir en pensar de que la mujer que me gusta ya tiene una vida hecha, bueno, no hecha tiene novia aun no se casa jeje, eso sí sería malo, en fin creo que tratare de dormir si no mañana no me podre levantar".

Me dormí pensando en todo esto, me sentía bastante inquieta, otra vez sin querer se presentó el sueño donde una mujer de cabello castaño y ojos cafes decía mi nombre, pero yo le preguntaba quién era y ella me decía que no importaba, que ella venía a sustituirme, de ahí mi sueño paso a otro lugar, estaba acostada en una cama y veía a una mujer delgada, bonita, de una sonrisa hermosa, de cabello negro y ojos verdes esmeralda acercarse a donde estaba yo, me miraba con un amor intenso, me decía que me amaba y me besaba, a mí me gustaban sus besos, me separaba de ella y le decía que también le amaba, ella sonreía y su mano bajaba hasta mi estómago, yo seguía su mano con mi mirada y me daba cuenta que ella acariciaba mi estómago que era una barriga enorme de embarazo.

Desperté en medio de la oscuridad, sudando frio y agitada, voltee a la ventana, parecía que estaba a punto de amanecer o que faltaba poco, trate de dormir, me trate de acomodar, pero el yeso de la pierna no me lo permitía, ¿Por qué había soñado tal cosa? ¿Acaso conocería a esa mujer? Era muy bonita no lo niego, pero a mí la mujer que me gustaba era diferente, ¿Por qué soñar con una mujer así? ¿Sería que ahora sentía inclinación hacia las mujeres? Entre esas preguntas sin respuestas, me fui quedando dormida.

-¡Pero vaya! Creo que aquí tenemos a la réplica de la bella durmiente jaja- oí la voz de Alexa decir eso, abrí los ojos y la vi parada frente a mi cama, le sonreí y voltee a la ventana, el sol pegando fuerte, al parecer era más de medio día

-Creo que me dieron ganas de dormir más ¿Qué hora es?-le dije mirándola, no sé porque hoy se veía más hermosa, más rutilante de belleza, se veía esplendorosa

-Casi las 2:00 de la tarde, pase ese rato pero aun dormías, te vengo a dar una buena noticia- me miro sonriente

-¿Ah sí? A ver dime- le dije intentándome sentar en la cama, ella se acercó a mí para ayudarme, me encantaba que me ayudara porque me servía para tenerle cerca, pero cuando me ayudaba vi que algo brillaba en su mano, un hermoso anillo de compromiso, me quede mirándolo, ella se percató y sonrió más.

-¿Te gusta?-yo voltee a verle con cara interrogante- ¿que si te gusta el anillo?- me dijo sonriente

-Sí, es muy bonito- le respondí en un susurro, ella me miro extrañada por un momento pero después sonrió y se alejó un poco de mi para sentarse en la silla que estaba junto a la cama

-Ya verás que cuando te recuperes, encontraras a alguien que te ame o quién sabe si ya existe esa personita y te anda buscando desesperadamente- me dijo sonriente, yo la mire directo a los ojos, quería decirle que no necesitaba que alguien me amara, que solo necesitaba de ella, de esos hermosos ojos cafés, de esa hermosa sonrisa que me daba cada vez que me veía y que me alegraba la existencia-¿qué pasa? ¿Dije algo malo?- Salí de mis pensamientos y sonreí

-No doctora no pasa nada, bueno cual es la buena noticia, aunque creo que son dos ¿no es así?-le pregunte tratando de que de una vez por todas derrumbara mis ilusiones de poder ver a esa doctora como algo más, me sonrió nuevamente

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