Destino.

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Es de noche y siento el frío del viento colarse en mi desgastada ropa, el frío del suelo en mis pies descalzos,llevo una semana rondando por Ikebukuro, estoy algo hambrienta y cansada,ni siquiera puedo mantener una chispa de mi fuego, he tenido que pelear varias veces con algunas bandas de color, no sabia que la vida en la ciudad era más difícil que la vida en el campo.

Me acurruco en una esquina de una de las calles poco concurridas  de esta ciudad intentando mantener el calor de mi cuerpo, no es la primera vez que estoy en una situación dificil.
Me doy cuenta por el sonido de las pisadas que alguien está acercandose, pasos lentos pero seguros, casi como los de un depredador, no me muevo para ver si paso desapercibida, estoy demasiado cansada para pelear pero la luz de la luna no ayuda mucho ha esconderse.

- Hola.-Una voz tranquila y despreocupada me saluda, noto un acento burlesco en su voz, no le saludo me limito a ignorarle, manteniendo mi rostro oculto, hay un olor en el aire que otras veces he percibido pero... ¿en dónde?

?- Una niña no devería estar sola a estas horas de la noche, es peligroso, mucha gente se querrá aprobechar de tí..

Me empiezo a reir al sentir la falsa preocupación en sus palabras, cortando su combersación, me hace gracia que intente engañarme de esa manera, parece que está sorprendido por mi reacción, la primera reacción real que consigo de él, miro hacia arriba por primera vez para hablarle.

- Los humanos sois tan divertidos. Si hubiera tenido un sitio donde pasar la noche ¿ no crees que ya estaría allí? Y si me hubiera sentido en peligro ¿ no crees que estaría yá en otro sitio? Además ¿Por qué intentas engañarme con tus zalameras palabras? No servira

Al levantar mi mirada observo que es un hombre joven, tal vez de unos 23 años, no parece demasiado mayor o eso creo ya que no le puedo ver bien, tiene un abrigo largo negro y en los bordes del abrigo tiene lana o una especie de pelaje blanco, su ropa es igual de un color negro, como esta tapado con su capucha no veo bien su rostro pero percivo que tiene una sonrisa en su cara, no se si es de diversión.

- Niña lista, eres muy interesante. ¿ Cómo te llamas pequeña?-pregunta de repente

Ladeo mi cabeza un poco confundida.

Y - ¿ Por qué tengo que decirtelo?- Pregunto con desconfianza.

? - Me presentaré yo entonces, soy Orihara Izaya.- dice poniendo una mano en su pecho para remarcarlo.

" Un nombre estraño " pienso para mí, me levanto del suelo para estar un poco más cerca de él, por fin pude observarle un poco mejor la cara, se podía apreciar unos ojos de color marrón oscuro y unos mechones negros que le caían por la frente y los laterales de la cara, tenía esa sonrisa burlona en la cara.

Y-Me llamo Yilda, solo Yilda no tengo apellido.- al final decido decirselo, no me ponía en peligro decirselo.

I- Yilda-chan ¿Quieres venir conmigo?- dice estiendiendome la mano en forma de amistad.

Y- ¿Por qué?- miro su mano de forma extraña sin saber bien que hacer la cojo o paso de su oferta.

I - Ya te lo dije, eres interesante.

Al final con un poco de desconfianza le cojo la mano, aun no se si estoy haciendo bien aceptando este trato.

Ragnarock ( La Hija De Orihara Izaya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora