Epidemia...

Cap 6

(Hola a las que leen por aca, siento demasiado haber dejado esta historia en tal largo hiatus, pero me decidi a continuarla ya que la musa volvio. Espero no se hayan olvidado de ella y que sigan leyendo por aca. Saludos a todas!)

Bill camino en dirección a los otros dejando a Tom atrás, cuando estaba a unos pasos, volteo a verlo y se fijo que Tom venía detrás de el, su expresión no era de enojo ni de miedo, solo se veía pensativo.

Bill sentía emociones encontradas con Tom, por un lado no podía negar que disfrutaba su compañía como ninguna otra persona, y que cuando se besaban y tocaban le parecía espectacular, pero de ahí a querer estar juntos a un nivel mas carnal, era demasiado, no podía violar el código sagrado de ser hermanos gemelos, eso simplemente estaba mal, era una aberración.

Al volver, Bill vio que todos estaban empacando las pocas pertenencias que les daban. David Mike y Andreas estaban discutiendo algo en un círculo, de cómo podría llegar a un hospital, de que tan lejos estaría, o como tomar mayores precauciones.

Bill paso de ellos y se acerco a Georg y a Gustav que seguían en el mismo lugar que donde los dejo. Georg parecía dormir recostado sobre el pecho de Gustav que lo abrazaba protectoramente. Hubiera sido una escena hermosa, de no ser por la cara de preocupación del baterista.

-¿Qué pasa Gustav?- pregunto Bill.

-No lo sé Bill, creo que Georg estaba alucinando o algo así.

-¿Cuándo?

-Justo ahora, estaba murmurando cosas, pero ninguna tenía sentido.

-Georg nunca dice cosas con sentido Gustav. –quiso bromear el cantante.

-Hablo en serio Bill.

La sonrisa de Bill se desvaneció, volteo a ver a los demás y en especial a David.

-¿David lo sabe?

-Si, acabo de decirle y vamos a tratar de llevarlo al hospital.

-Si, me parece bien, creo que no tenemos opción.

-¿Y tu como estas Bill, a donde fueron con Tom?

-A ningún lugar en especial, ya sabes cómo es Tom, se pone insoportable a veces.

-Lo sé... pero eso es porque te quiere Bill.

Bill no dijo nada, solo busco en sus pantalones a ver si de casualidad le quedaba algún cigarrillo escondido de milagro, moría por fumar uno y ninguno de ellos tenía un solo paquete. Volteo a ver a Gustav y está ahora estaba acariciando el cabello de Georg, algo en su mirada le decía que ese gesto no era normal, pero prefirió no decir nada.

Georg parecía más pequeño de lo normal así acurrucado contra Gustav y parecía como si su cuerpo no hubiera dejado de temblar desde que salieron de Rusia. Todavía tenía la respiración elaborada como si tuviera algún estorbo en la garganta.

Mientras los observaba, Bill noto que los ojos del baterista se fijaron en algo más y de repente palideció...

-Oh Dios!! Bill mira!- le dijo.

Bill volteo y su corazón se detuvo un momento, justo acercándose a ellos estaba una chica joven, no debía tener mas de 16 años, y los miraba con los ojos desorbitados y la boca abierta de la emoción.

-No puedo creerlo!! Por dios, ustedes son Tokio Hotel!! –grito ella.

Parecía una expresión normal, una de esas que escuchaban cada día en su país natal Alemania, solo que en esta ocasión en lugar de ser una fan normal, ella tenía la ropa llena de sangre y tenía un enorme cuchillo en una de sus manos.